CAPITULO 4: El Oscuro Origen de la Infección de los Muertos

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Era una noche hermosa como cualquier otra del año, los cielos estaban despejados y la luna, junto con las estrellas, iluminaba las calles de la Noble y Leal Ciudad de Canterlot, Capital del Reino de Equestria, la cual se encontraba de fiesta aquella noche, pues las casas y los edificios más importantes del lugar estaban decorados con figuras de murciélagos, arañas, monstruos, fantasmas y demás criaturas espeluznantes, una decoración ciertamente particular, pero que guardaba un vínculo con la celebración de aquel día, una celebración que buscaba honrar a una criatura de pesadilla y que se había convertido en una tradición entre los habitantes del Reino de Equestria: La Noche de Nightmare.

Esta celebración tenía un origen tan antiguo como la misma Ciudad de Canterlot, pues su origen estaba relacionado con Nightmare Moon, una antigua alicornio que había sido corrompida por las fuerzas oscuras y de quien se decía solía escapar de la luna cada 31 de octubre para devorar a los ponis que se encontrase en su camino, los cuales, para protegerse, solían disfrazarse de animales o monstruos aterradores para alejar a la malvada yegua, quien, a pesar de ser una criatura aterradora, solo buscaba alimentarse, razón por la cual muy pronto los habitantes de Equestria comenzaron a ofrendar dulces frente a las estatuas de Nightmare Moon que se encontraban en las orillas de los bosques.

No obstante, y con el pasar de los años, la tradición comenzó a perder su significado original para convertirse en una noche de risas, juegos y bromas, pues tanto los ponis adultos como los potrillos empezaron a disfrazarse más por diversión que por protegerse de Nightmare Moon, lo cual a su vez trajo consigo que los dulces recolectados dejasen de ser ofrendados a las esculturas de la criatura, por lo que muy pronto se volvió normal ver que frente a estas solo habían una o dos golosinas, la mayoría de ellas entregadas por viejos ponis que querían mantener viva la tradición original.

Y si bien muchos potrillos y potrancas esperaban impacientemente esta fecha, había una que destacaba entre ellos: Su nombre era Sunset Shimmer, una potranca unicornio de cuero color ámbar brillante y crines color rojo carmesí con franjas amarillas, quien era hija del tendero Moonset Shimmer y de la Profesora Gold Sunshine, ambos miembros de la clase media acomodada de Canterlot y los cuales se sentían bastante orgullosos de su hija debido a que esta había sido aceptada recientemente en la Escuela de Magia para Unicornios Superdotados de la Princesa Celestia, convirtiéndose así en la alumna y aprendiz de magia personal de la Gobernante de Equestria.

Sin embargo, la pequeña unicornio era un tanto reservada y tímida debido a que, desde sus años en el Jardín de Potrillos Mágico, nunca tuvo una buena habilidad para hacer amigos, aunque eso sí, sus disfraces de la Noche de Nightmare llegaban a impresionar a varios de sus vecinos y compañeros de colegio, quienes estaban sorprendidos por la increíble habilidad que tenía la potranca para coser y confeccionar sus disfraces.

Aquella noche no sería la excepción, pues la pequeña unicornio tenía en su mente hacer algo diferente, pues no quería personificar al típico Monstruo de Manenstein o al clásico Pony Vampiro, sino que deseaba encarnar a un personaje mucho más cercano al folklore equestriano y, tras leer algunos libros de su madre, finalmente encontró el disfraz perfecto, el cual estaba compuesto por una fina capa negra que tenía bordado con hilo de plata las figuras de varios cráneos de ponis, así como un curioso tocado de plumas negras que tenía en el centro una figura de cartón que representaba el cráneo de un unicornio y, para rematar, un cetro de hierro de cuya punta colgaba un frasco que resguardaba un peluche con forma de gusano blanco.

-Para algunos soy la Diosa de la Muerte, pero para otros soy una bruja que merece ser quemada por jugar con la vida de los ponis inocentes -decía la pequeña Sunset Shimmer con una voz infantil al tiempo que se miraba al espejo, luego soltó un suspiro y comenzó a caminar hacia la ventana de su habitación diciendo -Yo... Dark Poison, la Hechicera Oscura del Norte, he vuelto a la vida para soltar... ¡A mis pequeños! ¡HAHAHAHAHA!

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