Save Your Tears [Tokyo Revengers]

🌔 0 2

—¡Y mira esto! —Exclamó lanzando una patada en forma de curva, o círculo.

—Vaya, eso es genial, mira esa flexibilidad. —Dije con diversión.

—Oí, Gizmo. —Me dijo Shinichiro.

—No me digas así. —Gruñí.

—Si, si, lo que digas, ya nos tenemos que ir, el abuelo llevó brochetas de cordero, y si no nos apresuramos nos van a ganar. —Dijo tomando mi mano para después jalarme hacia la salida. —Ya nos vamos retirando, fue un gusto, nos vemos, no nos extrañen, besitos, bay bay...-

—¡Ya lárgate! —Exclamó irritado Sanzu mientras le lanzaba una chancla.

—Que agresivo, que violento. —Dijo y finalmente salimos. —Bien, súbete pa' arriba.

—No, ni modo que para abajo. —Viré los ojos divertida.

—¿Te vas a subir o no?

—Ya voy.

°°°

—¡Así te quería agarrar puerco! —Exclamó Mikey una vez entramos a la casa.

El rubio rápidamente me cargó y corrió a duras penas conmigo hacia su habitación, y pronto cerró la puerta.

—Conocí a tu abuelo. —Dijo y yo me sorprendí.

—¿Qué? ¿Y que pasó?

—Justo como lo dijiste, estaba siendo golpeado bien feo por un tipo, el ese MasaKiyo.

—Kiyomasa.

—Ese mero. —Asintió rápidamente. —Takemichi Hanagaki, ¿Quieres conocerlo cuando era joven y...? Nah, si lo digo sueno gay.

—No estoy segura de si quiero verlo aún... —Murmuré.

—Mañana iremos Kenchin y yo a su escuela, por si quieres venir con nosotros. Oh, y, ¿Qué va a suceder después?

—Ah pues.... —Intenté recordarlo pero entonces mi cabeza dolió. —Después...

El dolor comenzaba a ser un poco intenso, por lo que comencé a marearme, iba a caer pero Mikey logró sostenerme.

—¿Qué te pasa? ¿Qué tienes? —Preguntó con preocupación.

—Me duele la cabeza. —Murmuré y él me dejó sentada en la cama. —No puedo recordar que sigue después.

—¡Tengo la solución! —Exclamó yendo a su armario.

—¿De qué hablas?

—Hace dos años, cuando llegaste, y... No quiero sonar acosador, pero suena como acosador, te espiaba cuando dormías.

—¡Mikey!

—Pero al menos sirvió de algo. —Dijo sacando un par de discos. —Grabé mientras dormías, porque hablas dormida. Me parecía divertido pero después comencé a hacerlo porque tú contabas todo lo que sucedería, como si estuvieras narrando.

—¿Y todo está en esos discos?

—Parece que si. Veamos, cumpleaños de Mikey, Shinichiro, abuelo Hanagaki, Kenchin, ¡Aquí!

Mikey fue a poner el disco en la grabadora y entonces comenzamos a escucharlo.

Al fondo se podían escuchar los suaves ronquidos de Emma.

—Agos...to, tres... Draken... Abuelo... Kiyomasa...  Cuchillo. —Aparentemente me giré. —Aún se puede... evitar.

Y entonces la grabación se reinicia.

—¿Eh? ¿Un audio de pocos segundos? ¿Qué clase de productor tengo?

—¡Es que entré en pánico! No supe de que hablabas, fue la primera vez que te escuchaba hablar sobre algo así, y como recordé que venías del futuro, pues me sorprendí un poco porque entendí que probablemente hablabas de los sucesos. Es por eso que te seguí grabando, y cuando medio tuve todo lo ordené, así que el siguiente es Kenchin. ¡Chae, puedes evitar todo lo desastroso! —Exclamó abrazándome.

Pero yo... No podía recordar nada de eso. De repente, todos mis recuerdos parecían borrosos, no, como si una luz se mantuviera en las caras, evitando que yo viera de quienes se trataba.

—¿Quieres helado? Quizás eso te relaje un poco. —Me dijo sonriente.

°°°

¿Qué demonios pasará el 3 de Agosto?

—¡Gizmo! —Exclamó Shinichiro. —Iré a una peda, no me esperes despierta, comes sin mi.

—¿Y quién chinga dijo que te iba a esperar?

—Estamos casados, deberías esperarme. Bueno, nada más porque estoy de buenas no te voy a decir nadita. —Sonrió golpeando suavemente mi nariz.

—Sacate a bañar, ¡Abuelo, Shinichiro anda de lujurioso! —Exclamó Mikey.

—¡Mendigo chamaco! ¡No es cierto abuelito de mi vida, no le creas a éste piojoso!

Y ahí comenzó una nueva pelea.

Tres de agosto... Estaba a dos días.