Las grandes pantallas de Tokio alumbraban las calles con noticias acerca de Ghouls, Sobre el distrito 11 y 23.
Ambos habían sufrido fuertes ataques y gracias a eso la "Paz" volvio a verse afectada.
Las personas caminaban con miedo aterrorizados pues tal vez un día serían los siguientes. Aun así, e irónicamente los que vivían escondiéndose eran los ghouls.
Pero aun con todo eso la felicidad por abrir un nuevo año era mayor.
-¿Podre ver otro?-Esa pregunta no dejaba de carcomerlo desde los sucesos anteriores, pero a decir verdad su estancia en esa jaula no le interesaba, solo quería asegurar una vida. [¿Y dejarla vivir así?] ¿Para qué tanto esfuerzo y si el ciclo de muerte continuaría? Quiere que Eto viva muchos años, pero ¿La verdadera opción es solo protegerla? ¿Por qué no aspirar a más?¿Por qué no romper la jaula?
-Así imposible-Cerro su puño con fuerza mientras se adentraba en el distrito 20-Suzuya y Arima-Esos dos nombres permanecían en su mente, no de dejándole respirar.
Ambos lograron destrozarlo con facilidad. Creyó que era fuerte, que podía conseguir lo que quisiese... Y fue así por un tiempo, al menos.
Faltaba algo, estaba seguro. Necesitaba más.
Tenía que comer.
-No-Negó con la cabeza, mientras en el aprecias dos grandes sonrisas. Unos penetrantes y grandes celestes le observaban fijamente al igual que unos delicados verdes-Tiene que haber otra forma, no quiero ser como mi Padre-
Suspiro hastiado mientras el olor a carne se filtraba por sus fosas nasales [Todos estos humanos... ¿Qué pensarían al estar cerca de un ghoul?]
Algunos llamarían a sus madres asustados otros clamarían a Dios.
Pero para él no había deidad que los salve, él fue el primero en abandonarlos, el amor que (Según la religión) profesa no va dirigido a los ghouls.
¿Cómo podrías amar a alguien que asesina a tu creación?
¿Pero acaso los animales nos son iguales? Los carnívoros cazan sin elección, tratan de sobrevivir.
Nacieron sin elección, al igual que los ghouls.
A pesar de eso, es imposible negar que cada quien decide su destino. Pues hay maneras.
-Dios esta aqui, si, no pierdas el camino-Una melodiosa voz entre la multitud llamo su atención, vinculándose esta de manera extraña con sus pensamientos.Vio a un hombre sentado, un gorro cubría su cabeza y una gran sonrisa enmascaraba su pobreza. Con gran actitud y a pesar de ser ignorado por muchos, no apago su ilusión.
Dejo su cabeza en blanco, permitiendo que la tenue pero hermosa melodía opacara el vacío.
Un par de minutos después el también sonrio. De alguna manera esos minutos escuchando al ghoul cantar le hizo darse cuenta de algo.
Y es que nada está perdido.
Palpo su bolsillo delantero y ante los ojos del guitarrista le entrego diez mil yenes.
Un simple gracias sirvió como respuesta ante tal suma. Sorprendido no dejó de mirar el billete, pues con suerte conseguía eso por mes.
-A ti-Exactamente la misma sonrisa emergió del oji-verde. Una que reflejaba esperanza.Paso de largo tocando su hombro.
-Ojala hubiesen más ghouls como tu-Sin cerrar la boca observo su espalda alejarse para después sentarse en una pequeña barandilla, observando un oscuro y profundo bosque.
-¡Ohhh! Gracias Ikuma-
-¡Eh! ¡Hori ¡Devuélvemelo!-Tomo la guitarra y con paso brioso comenzó a perseguirla, inconscientemente ambos acabaron a unos centímetros del ghoul catalogado como SS+.
-Mira, ya no tienes que pagar un gimnasio-Bromeo acerca de la "persecución"
-Que risa-Con el ceño fruncido arrebato la suma guardándola en su pantalón.
-¿Como lo conseguiste?-Cuestiono desnudado a la luna.
-Un chico me lo dio y me agradeció, se miraba triste-
-¿Era guapo?-
-Y-yo que se... Me gustan las mujeres ¿Recuerdas?-
-No te pregunté eso-
-No lo sé-
-Eso no es una respuesta-
-Tsk...-
-Tampoco-
-Él-Señalo a su izquierda-Él fue-
-Otra razon para ir a la cárcel-
-¡Espera! No le robes es un ghoul-
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Mi Querido Perdido (Una historia de Takatsuki Sen)
FanfictionEsa vez, mientras me aseguraba que nadie me notara (ni siquiera el padre) en secreto y en silencio escribí el resumen. Uno solo puede destruir cosa que no puede cambiar. Esto es así para mi, una persona que dejó en el útero todo lo que necesitaba. ...