Capítulo 15.

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Capítulo Quince

Julia Rivera.

—¡Vas mal en Alemán, Julia!

Si, la profesora Aura le había contado mi pequeño problema con el Alemán y estaba furiosa, bueno, furiosa era poco, por momentos creí que le daría algo.

—Mami, cálmate, puedo recuperarme —Dije con el sofá en medio de nosotras para evitar que mi mamita hermosa me diera la golpiza de mi vida.

Me trataba de alcanzar y nos seguíamos moviendo en círculos, una que otra risa se nos escapaba, pero ella trataba de estar lo más seria posible advirtiéndome "ya veras cuando te agarre" entre otras cosas.

De pronto el timbre de la puerta sonó, lo que nos tomó por sorpresa y ambas miramos la puerta y mamá caminó hacia la puerta abriéndola.

—Oh, ¿Cómo estás?

Me incliné un poco para ver quien era, para agradecerle aparecer en este momento.

—Bien ¿Está Julia? —Su voz me alegró, aunque pensé que estaría con resaca por lo de anoche. Mi madre se hizo a un lado.

Zack entró y me miró de arriba abajo. Aún traía puesto el vestido, me imagino que pesará que fuimos a la iglesia, tal vez se impresionó porque sabe que no iba desde hace un tiempo. Él se acercó a mi oído y habló en un susurro.

—Escuché que terminaste con Carlos ¿es cierto?

Lo miré impresionada, con mi boca ligeramente abierta sin saber que decir.

¿Le habrá dicho Aaron? Paso por mi cabeza en cuanto recordé lo que paso anoche.

—Cual es el secretismo de ustedes aquí —Preguntó mamá parándose a nuestro lado—. Y tú, hablaremos luego lo de las clases de Alemán —Dijo con un rostro furiosa, que por momentos me dió miedo.

—Se entero que va mal en Alemán... —Susurro asintiendo lentamente y mi mamá lo miró—. Es malísima —Dijo cruzando los brazos mirándola, dramatizando la situación.

—Ah, ¿es que tú sabías? —Él asintió y yo me rasqué la cabeza mientras mamá se veía que quería jalarle la oreja como cuando éramos más pequeños.

—Si, pero.. —Se movió parándose atrás de mi viendo las intenciones de querer jalarle la oreja y sus manos se pusieron en mis hombros—, pero siempre la he aconsejado de que tome clases privadas para mejorar, pero no me escucha, es muy orgullosa como para pedírselo a la profesora Aura

—No soy orgullosa

Mi querida madre hizo una mueca, ¡UNA MUECA!

Solo abrí mi boca en impresión y en indignación por esa mueca que había hecho mamá dando a entender que pensaba lo mismo que Zack—. ¡Mamá!

—Lo siento, pero es verdad, lo sacaste de mi —Me dijo y Zack sonrió y caminé hacia la cocina.

—Casi se me olvidaba —Nos hizo a Zack y a mí mirarla—, La profesora Aura nos invitó a un pequeño compartir en su casa

—¿Ustedes también van? —Ambas miramos a Zack—, Aaron me dijo que si quería podría pasar —Nos dijo encogiéndose de hombros.

Mi madre me miró y yo asentí.

—Bien, nos vamos más tarde —Caminó hacia su cuarto alejándose de nosotros.

—Así que es verdad...

Me dijo Zack sentado en la silla a un lado del meson de la cocina.

Suspiré sentándome y empezando a contarle lo qué pasó anoche, con lujo de detalles y sólo diciendo "baile con Aaron" guardándome esos detalles.

Ella Es Mi Calma © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora