The Stray (traducción a español)-historia original de Nezumi-of-the-Ruins

Parte 2 - El hombre que huele a comida

El hombre que huele a comidaEra un lindo día soleado y la gente se arremolinaba en las calles haciendo sus cosas. Algunos niños se rieron mientras pasaban corriendo donde yo estaba apoyado contra el costado de un edificio de apartamentos, bebiendo de una botella de agua que acababa de comprar en un puesto.

No había tenido una pelea en una semana y, por una vez, no estaba tan magullado. Todavía me duele un poco la espalda de dormir en el colchón abandonado que había reclamado como mío. Era tan delgado como una tabla y duro como uno, pero es mejor que nada. Prácticamente le he dejado en claro a cualquier otra rata callejera que era mío, así que nadie más lo intenta y lo toma por su cuenta.

Cerrando los ojos, dejé que mi cabeza se inclinara hacia atrás contra el ladrillo caliente detrás de mí, tomando un sorbo de agua. Dejo de beber cuando un olor celestial positivo se encuentra con mis sentidos. Lentamente abro los ojos y busco el delicioso aroma.

Mis ojos se concentran rápidamente en un hombre que pasa. En sus brazos, debajo de una bolsa de plástico, pude notar que algo delicioso residía. No presto atención en absoluto a la apariencia del hombre, a sus rasgos faciales o cualquier otra cosa sin importancia, solo examino la bolsa que se está alejando rápidamente.

Se estaba alejando y yo lo seguí. Me aseguré de mantener al menos media cuadra entre el hombre y yo mientras lo seguía, no quería que se diera cuenta.

Me encantó cuando se dirigió a su propio edificio de apartamentos. Vive en el primer piso. Sería fácil deslizarse y agarrarlo; el hombre ni siquiera debería darse cuenta.Tuve aún más suerte cuando dejó su bolso para revisar su llavero buscando el correcto. Me arrastré detrás de él, cerca del suelo y fuera de su visión periférica.

Realmente no debería haberse fijado en mí, he hecho esto antes y nadie lo ha hecho.

Me congelé cuando mis dedos, a centímetros de la comida en caja, se detienen cuando una pierna se coloca a propósito frente a la bolsa. Al levantar la vista me encontré con ojos cansados ​​en un rostro pálido.

Bueno, eso no salió como estaba planeado.

Lo que tampoco salió según lo planeado es que el hombre se quitó la pierna para deslizar la bolsa por el suelo en mi dirección con la punta de la bota.

Parpadeé y parpadeé de nuevo, mirando entre la bolsa y el hombre varias veces con confusa sorpresa. De repente me sentí culpable por no haber examinado al hombre antes.

Tiene el pelo largo y negro y ropa y botas negras. Se ve agotado y también como si pudiera ver dentro de mi alma con sus ojos oscuros.

5Los ojos no me dejaron por un segundo cuando aparté las asas de la bolsa de plástico y abrí la caja de poliestireno que había dentro. El olor fuerte y cálido del pollo recién cocinado y sazonado hizo que se me hiciera agua la boca y los ojos se iluminaran de alegría.

No había comido nada caliente desde que me echaron.

Volví a levantar la vista bruscamente cuando escuché el sonido de las teclas. Estaba abriendo su puerta.

Decidí que era mejor reservarlo antes de que él decidiera que en realidad tenía más hambre de lo que pensaba, cerré la tapa y até las manijas de plástico con fuerza para que no hubiera posibilidad de que nada se derramara.

"Niño."

Mi cabeza se levanta de nuevo y retrocedo con todo mi cuerpo.

"Mis puertas se abren mientras no me robes", dice, con voz ni amable ni fría, solo neutral. Una vez que vio que el mensaje me había llegado, regresó a su apartamento y cerró la puerta, dejándola sin llave.