Nunca pensó que podría ser descubierto, menos que fuera por el más bobo de sus amigos al encontrar una de las revistas. Aunque tal vez aquel chico, si que lo sorprenda.
- ¿Qué condición?
- De que no me alejes de tí.
-💜-
[🔥] Temática omegaverse
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Notaba como la alfa no quitaba su mirada de él, sentía que podría ver su alma con los intensos ojos color olivo. Solo suspiró, acariciando levemente los cabellos negros de su pequeño.
— Jimmy, ¿podrías ir a tu habitación un momento? Necesito hablar con tu tía Aro, yo te llamaré cuando la cena llegué, ¿bien?. —le hablo dulcemente, mientras el menor asentía.
— Vale, pero pediré más de dos trozos de pizza.
Rió leve ante la advertencia de su cachorro y solo asintió, logrando una gran sonrisa de parte del menor, quien se fue corriendo a su habitación indicada. En la cual antes estaba todos los días desde que nació y cambió muchas veces mientras fue creciendo.
Hasta que todo ocurrió.
— Se ve que tú hijo a estado demasiado apegado a tí desde que te vio con Fargan. —miró a la rubia, quien estaba con una sonrisa divertida, mostrando sus blancos y perfectos dientes— Tu aroma a arándanos volvió y ni hablar de que hueles mucho a miel. Tan dulces ambos aromas. —canturreó la última frase, sacándole un rubor a su amigo.
— Aroyitt. —regañó, sacándole una carcajada.
— Joder chaval, es que de verdad, si supieras la enorme sonrisa que traías con sus palabras. Noté todo. —habló emocionada, tomando su mano para hablarlo con dirección a uno de los sofás y sentarse ambos al lado del otro— Tiempo sin poder sentir tu aroma a arándanos y en un dos por tres, solo al salir con aquel alfa, ¡recuperaste tu aroma!. ¡De verdad, ese chico debe ser mágico!.
Negó con una pequeña sonrisilla, mientras la chica seguía mirándolo esperando sus palabras— No diré nada y lo sabes.
Hizo un leve puchero— Oh vamos, por tu amiga, por la alfa que cuida a tu pequeño y te cubre en todo. Por favor. —alargó la última vocal lo que hizo que el contrario rodará los ojos.
— Eres demasiado molesta a veces. —su puchero seguía, lo que hizo al omega sacar una leve risa— Bien, joder, siempre ganas. —sonrió, mientras se sentaba mejor de lado para escuchar atenta lo que diría— Digamos que si hubo acercamiento, más del debido. Hubo un beso. —habló, sintiendo sus mejillas calentarse poco a poco, recordando todo lo ocurrido hace unas horas— Tal vez sí la llamada no hubiera existido, ahora mismo yo estaría llegando aquí o tal vez no... —murmuró lo último, pero siendo escuchado por la alfa.
Solo sé quedó con su sonrisa, tomando la atención de los orbes zafiros y simplemente estos estaban expectantes de lo que diría. Pero la chica solo lo abrazo, sorprendiéndolo.
— Si me hubieras dicho esto desde el principio, te hubiera escogido otro conjunto de ropa para llevar debajo. —habló de lo más tranquila— Quizás hasta Sam te hubiera ayudado a escoger un conjunto.