THE DARK PRINCE

IV

Me llevaron directo a una torre extremadamente alta que está en medio de un bosque y Maximum me dice:

-Bienvenido a nuestro refugio.

Entramos por la puerta principal que estaba vigilada por dos chicos.

-Ellos son Rufus y Tadeo. -Apenas alcanza a decir sus nombres cuando Tadeo, un chico con el cabello castaño obscuro, de tez blanca, pero con un cuerpo atlético me extiende su mano en forma de saludo a la cual yo acepto y hago lo mismo después con Rufus que es un joven moreno, pero con el pelo chino y también con cuerpo en forma, al parecer todos aquí se la pasan en los gimnasios.

-Bienvenido, me llamo Tadeo Sinner.

-Un gusto Tadeo, un gusto Rufus. – Mientras no pregunten mi nombre seguiré siendo el novato aquí.

-Daremos un recorrido para que te guies un poco y si tienes alguna duda puedes apoyarte con estos dos. – Maximum me dice eso y hace seña con su cabeza hacia Tadeo y Rufus los cuales sonríen con toda la amabilidad del mundo.

Caminamos y mientras Maximum y los otros idiotas que van enfrente de nosotros tres me explican todo lo que hay ahí yo finjo poner atención hasta en el pasillo tras el cristal puedo ver a un chavo que está recibiendo unos bueno golpes por alguien....

Hasta que puedo verle el rostro de una chica, más bien de esa chica, esa misma que estaba corriendo y yo persiguiendo ante el ataque que ocurrió en el reino.

-Y bueno como ven aquí está la sala de entrenamientos- Dice Maximum.

¡Y boom!

El chico cae boca arriba tras un buen golpe y flechazo por parte de la chica, ella sonríe con malicia y dice algo que no alcanzo a entender pero que me intriga, aunque no se si sus palabras o ella. Así que lo suelto.

-¿Quién es ella?

El que me responde es Tadeo que esta justo al lado mío:

-Aria Peterson.

-La mejor de este clan- Responde Rufus.

-Esa es mi chica- Maximum lo expresa, pero para sus amigos, por lo visto ya encontramos a la parejita de este idiota.

-Y si pasamos por aquí encontraremos....

Y seguí sin ponerle atención a Maximum pero ahora con una buena excusa y es que no podía parar de mirarla, sentía que cada paso que daba alejándome de ella solo era para mirarla aun más y con mayor intensidad hasta que ya no tuve de otra que dejarla ir con la vista, mas no con mi cabeza.

Llegamos a lo que se supone que era el comedor y el fin del maldito recorrido. Así sin más esos tres idiotas se largaron y me dejaron con Tadeo y Rufus. Ellos tuvieron la idea de mostrarme las habitaciones y algunas otras cosas.

***

Escuchamos un timbre y Tadeo me dice que debemos ir a la sala de reuniones, donde Maximum dará un aviso. Rufus ya no estaba porque lo habían llamado y tuvo que irse así que tuve que caminar hacia la sala de reuniones con Tadeo, era alguien agradable y simpático. Cuando todos estábamos ahí busqué a la chica de antes pero no la encontré por ningún lado y Maximum empezó a hablar.

-Hoy fuimos hacia las afueras de Lilthmoon en busca de flores sagradas, es lo único que nos hace falta junto con el sol de medianoche para tener el encargo de los duendes y podremos tenerlos de nuestro lado, cada vez nos acercamos más mis queridos compañeros, cada vez se acerca el día donde por fin seremos escuchados y aunque desgraciadamente no encontramos flores sagradas encontramos algo que nos puede ayudar o, mejor dicho, a alguien.

Oh. Mierda.

Todo se voltean a verme cuando Maximum me señala y me pide que de un paso al frente para después seguir.

-Tenemos un nuevo compañero de viaje, que será de gran ayuda...

-¡A TI TE QUERÍA VER IMBECIL! - Todos los ojos se posaron en ella y por supuesto los míos igual, era ella que esta caminando muy rápido y con una mirada intimidante hacia Maximum y pasa a un costado mío.

-Mi querida Aria, pero que hermos....

No alcanzó a terminar la frase cuando recibe una cachetada de ella y se escucharon susurros de los demás.

-Dejarme atrás, tras una misión y ver cómo todos se fueron y me dejaron en el mundo luz, sola con toda esa bola de idiotas.

Bueno supongo que en esa "bola de idiotas" entro yo.

-Cariño, no es momento de hacer escándalo. – Maximum le dice agarrándola de los brazos con firmeza y con una mirada asesina hacia ella.

En cuanto vi como la agarró de esa manera no sé porque quería quitarle sus sucias manos de encima, apenas di un paso cuando ella se desganchó de su agarre y gritó.

-Jodete.... Cariño.- Le guiña el ojo y le muestra el dedo de en medio y su salida iba a ser triunfal si no hubiera chocado.

Y si, si no hubiera chocado conmigo.

Y al sentirla, la agarre de los brazos, pero de diferente manera que como lo hizo Maximum, fue tan extraño y aún más extraño cuando sus ojos se conectaron con los míos y nuestras miradas, nuestras miradas fueron más allá que de ese momento, ella fue la primera en apartarse y sin más se marchó.

Yo no deje de mirarla de nuevo hasta que cruzó la puerta de salida, pero antes de eso giró en nuestra dirección y volvimos a conectar.