capitulo 13

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Deidara sentado en el escritorio de presidencia mientras tomaba un café esperando a que su jefe llegará para saludarlo tomo su celular para bajar y ver nuevas publicaciones de las cuentas que seguía, que sorpresa se dió cuando vio que cierta persona lo comenzó a seguir, solo se rió un poco y termino el café, era obvio que iba a molestar a alguien.

- buenos días - saludo Obito entrando a la oficina y viendo la gran confianza de Deidara en sentarse en su escritorio

- buenos días - deidara un poco incómodo se levantó lentamente mientras dejaba espacio para que Obito pasará - no sabía que llegarías tan temprano -  juntó sus manos mientras se tornaba un poco rojo por la pena de haberlo encontrado de esa manera

- a si? Aún querías seguir sentado en la silla de presidencia? - era lógico que obito no lo regañaría por eso, en cambio lo molestaría un poco - me dijeron que fuiste al cóctel de tsunade - obito paso de lado y se sentó en su silla posando sus codos sobre el escritorio

- si, iruka me dijo que era necesario y no había nadie más que yo para asistir - obito solo escuchaba mientras sacaba papeles de su maleta - y como le fue en su viaje? Puedo solucionar el problema? - deidara trato de no ser tan directo para que solo obito entendiera lo que trataba de decir

- si, en dos días nos mandará el dinero completo - prendió su computador dispuesto a dejar de hablar para ponerse a trabajar y ver cómo estaba la empresa

- menos mal - deidara se iba a ir al ver el ambiente de concentración a su jefe pero un incógnita hizo que se quedará - disculpe, será que le puedo hacer una última pregunta? - pregunto con un poco de pena

- claro, rápido - respondió desinteresadamente

- mire, ayer en el cóctel de Lady Tsunade llego un invitado no deseado... - obito dejo de poner atención al computador para centrar su vista en deidara - era un tipo extraño, tenía una máscara naranjas que solo tenía un orificio por dónde podía ver, una toga negra con nubes rojas, comenzó a saltar entre las mesas incluso tomo a Lady Tsunade y la hizo caer a propósito, sin mencionar que pasó algo parecido en la ceremonia de compromiso de hatake y iruka - apretó sus manos mientras hablaba no quería ofender a Obito, quien sabe, de pronto podría ser algún familiar - si mal no me recuerdo decía llamarse Tobi

Obito se paró de la silla rápidamente y bruscamente pegó a deidara a la pared mientras aseguraba la puerta y volvía a peligrosamente a acercarse a deidara poniendo sus dos manos a lado a la cabeza del más bajo evitando que este escapara.

- cuéntame con detalles que fue lo que hizo el sujeto - lo vio con irá acercó su cara a la sonrojada expresión de deidara que no esperaba nada de eso.

- ß-bueno, en la ceremonia de kakashi y iruka comenzó a decir que el ambiente parecía la de un funeral incluído la decoración - obito acercó su cara más a la de deidara con más enojo a la vista - iruka se puso a llorar por lo que dijo así que lo seguí y me dijo su nombre si mal no me acuerdo, con Lady Tsunade no se por donde, cuando o como entro pero la sostuvo por un momento y la dejo caer - deidara estaba completamente asustado con una de sus manos sobre su boca con casi ganas de llorar - parece que se acordó de mi y me molestó así que lo seguí nuevamente a la piscina y me comenzó a repetir que yo era una mujer - deidara al recordar la acción que había echo aquel tipo que su cara que era de tez blanca paso a una roja haciendo que obito se diera cuenta

- te hizo algo? - su voz era una combinación de enojo y preocupación

Deidara se lo pensó de si confesarlo, pero al ver que obito se le volvio a acercar decidió decirlo o mejor dicho, confesarlo mientas hablaba rápido esperando que no se le entendiera y que la vergüenza terminará - E̴s̴ - es que como seguía molestando que yo era mujer, le grité y insistí que no era, y en un momento repentino se acercó y apretó mi pecho para verificar que no tenía senos y aunque le di un golpe al irse insistió que seguía pensando que era mujer de senos pequeños! - lo último lo dijo en un grito mientras cerraba los ojos y su carita era completamente roja, al abrir sus ojos vio la expresión de Obito que pareciera que le hubieran dicho que su madre se había acostado con el presidente del país

Una triste realidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora