La Weasley diferente y en Durmstrang

La poción. ¿Hermione, Pansy y... Cedric?

- Ahora, les explicaran un poco, luego el ministro me cederá la palabra y explicare que les daremos la poción, sin mencionar su verdadero propósito. Si cualquiera tiene dudas las tendrás que responder, si la respuesta es muy comprometedora, modifícala – me indico el señor Silver mientras avanzábamos por el pasillo.

- Entendido, aparte solo Víctor sabe de la poción y el verdadero objetivo, los demás no están enterados, igual le diré que no diga nada... – me interrumpieron los murmullos.

- ¡¿Qué paso Dumbledore?!

- No lo sé.

- Debes decirme que...

- Esto es...

- Nos debes una explicación...

- Jamás había sucedido algo así...

Todos los directores y algunos profesores junto con el ministro iban delante de nosotros y parecían estar discutiendo. En todos los libros que leí y obligué a mis amigos a leer no había pasado nada similar a esto, es más ¡Nadie había burlado el cáliz! Dudo que alguien con prácticamente nulo conocimiento de las artes oscuras lo haya hecho. ¡Incluso ninguno de nosotros lo pudiera haber hecho eso tan fácil!

- ¿Harry, tu pusiste tu nombre en el cáliz de fuego? – pregunto Dumbledore a Harry al nomas entrar al salón (Estaba muy bien decorado, muy bonito).

- No, señor.

- ¿Le pediste a algún estudiante que lo hiciera?

- No, señor.

- ¿Estas completamente seguro?

- Sí, señor.

- ¡Miente! Estoy suguga – exclamo Madame Maxime.

- No, el cáliz es un objeto muy poderoso, no podría haberlo hecho, se necesita un hechizo muy poderoso. Además es magia muy avanzada para alguien como el – dijo Ojo loco Moody.

Por fin alguien dice algo coherente, para ser más grandes no usan su cerebro, sin ofender a nadie.

Iba a hablar, estaba por decir que compartía la opinión con el ahora profesor de defensa contra las artes oscuras en Hogwarts, pero el señor Silver me detuvo.

- Parece que sabes mucho de esto Moody – le dijo nuestro director poniéndose en frente de él.

- Mi trabajo era pensar como lo hacían los magos tenebrosos – No me gusta por donde está yendo esta conversación.

- No nos ayuda en nada – intervino Dumbledore –. Tú decides Barty.

- Las reglas son las reglas, el cáliz de fuego tiene la decisión. El señor Potter no tiene salida – dijo el ministro por fin volteándose para ver a todos –. Es a partir de hoy otro participante del torneo.

Todos se voltearon a verlo. El salón se quedó en un silencio absoluto hasta que el ministro volvió a hablar.

- Ahora, le cedo la palabra al señor Jack Silver, quien es pocionista y trabaja en uno de los cargos más importantes del ministerio de Bulgaria.

- Gracias, primero que todos quiero decirles que: Les deseo la mayor suerte, motivarlos a no rendirse y dar todo de ustedes mismos. Segundo, la poción de la que se les había platicado antes está a cargo de Antonella Weasley, ya que ella la preparo, así que ella les dará las indicaciones y cualquier duda a ella.