Stevenson se pasó la noche buscando los libros que él leyó cuando era pequeño para aprender a controlar sus habilidades más rápido; sólo encontró dos ejemplares, una guía y otro que explicaba todos lo que se podía hacer como guardián de los mundos, entre ellos ver el futuro, pero traía la pequeña advertencia que él escucho toda su infancia.
Tomó esos libros y salió afuera, todavía era temprano y nadie más estaba despierto, lo cual agradeció porque necesitaba un momento de paz. Salir a esas horas de la mañana era algo que siempre le gustó, el olor que él llamaba olor a mañana, la pequeña brisa y el sonido del río le brindaban una paz increíble, pero duraba poco tiempo con adolescentes allí.
Siempre había alguna pelea a gritos donde Melisa gritaba aún más fuerte para que hagan silencio, a él le causaba gracia porque siempre que se enojaba le salía su "lado argentino" y los insultaba a todos aunque ellos no entendieran qué quiere decir, todo era un pequeño show hasta que intervenía Sheila, ella ni siquiera elevaba la voz, su sola presencia y la cara diciendo 'se callan o los mato a todos' podía parar cualquier pelea.
Dejando los libros en un bulto de hojas caminó un poco, hasta quedar a poca distancia del río, se sentó en posición de flor de loto y meditó, meditó sobre el hecho de ver el futuro, él sabía que traería muchas consecuencias pero las circunstancias lo requerían, o es lo que él pensaba.
"Si ves algo que no te gusta trataras de evitarlo"
-Pero sabré a qué nos vamos a enfrentar- le decía a su subconsciente-. Además, no evitare nada.
"Puedes ver muerte ¿eso tampoco lo evitarás?"
-No, de todos modos pasará.
Cuando por fin sintió que nada le impedía ver el futuro inició el proceso que se requería.
Sólo lo deseó con toda su alama y mente, era un proceso que requería de mucha concentración y energía ya que en el proceso tu mente trataría de evitar que logres tu objetivo mostrándote tu más grande miedo, si lograbas ganarle a tus miedos verías el futuro, verías lo que en verdad deseabas; en el caso de Stevenson, ver si alguien moría, pero no vio nada, solo un espacio grande con árboles quemados por doquier era un lugar similar al territorio de fuego solo que más siniestro, en ese sitio solo se podían escuchar gritos y lamentos, pero él no vio a nadie, así que supuso que nadie moriría, por lo tanto rompió el lazo con ese futuro que vio y se puso de pie.
Decidió creer que era una señal de que, a pesar de su práctica, no estaba listo para enfrentar el hecho de conocer el futuro.
Se quedó allí sentado mientras sacaba un cigarrillo del bolsillo de su remera y lo encendía, solo pensaba y miraba al vacío.
-Me vas a entrenar, ¿verdad?- la voz de un chico provocó que el profesor se sobresaltara del susto, lo fulminó con la mirada y le dio una calada a su cigarrillo.
-Si es lo que quieres.
El chico se sentó a su lado y recordó aquella noche que estaban afuera viendo las estrellas, era un recuerdo cálido que no le desagradaba tanto como el hecho del por qué estaba afuera.
-Claro que quiero, ¿será fácil?- el otro sólo asintió como respuesta, al parecer estaba muy ocupado fumando-. Me caes bien.
Stevenson no se molestó en ocultar la sonrisa de su rostro, así que imitó el gesto y le dijo lo mismo.
-Tienes la remera al revés- dijo después de una mirada rápida.
Peter bajó la vista y notó que la etiqueta estaba en su cuello, no le dio mucha importancia y quiso averiguar que tanto miraba el profesor.
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Guerra de Elementos [#1]
FantasiaDespués de la derrota de las brujas, Adira y Yassaria, los últimos guerreros de los cuatro elementos siguen desapareciendo de una manera misteriosa, lo que confirma las sospechas del Guardián de los mundos de que nunca las vencieron. Buscando la man...