Estaba en mi apartamento, concretamente en la cocina escuchando un audio de mi madre donde me explica su día detalladamente mientras yo le daba a mi perro, Rex un poco de agua en su tazón, cuando se acabo su audio levante mi mirada del móvil para ver donde se había metido mi perro.
-Rex, donde estas?- pregunto mientras camino en busca de el mirando en las únicas 2 habitaciones de mi apartamento con la esperanza de encontrarlo, pero no estaba ni en mi armario donde siempre se escondía, aceleré mas mis pasos preocupada por no encontrarlo, entre al baño pero tampoco, busque en todas las puertas de la cocina donde el se podía meter, pero tampoco.
Mientras salía de la cocina escuche en la ventana del salón que miraba hacía fuera a un hombre gritando algo de una ambulancia, me giré y vi la puerta de fuera abierta, ahí es cuando até clavos y sin pensarlo dos veces salí corriendo en calcetines de mi apartamento olvidando cerrar la puerta, baje las escaleras lo mas rápido que pude.
Llegue hasta la puerta de entrada de mi edificio y pude ver como un hombre que estaba de espaldas llamaba a alguien en su teléfono desesperado, abrí la puerta y lo primero que vi es el coche parado en mitad de la calle con las luces delanteras encendidas, debería de ser su coche supongo pero tenia el cristal roto en la parte superior a mi derecha.
Me di la vuelta y me acerque a aquel hombre, mire lo que había delante de el y ahí estaba, mi perro Rex en el suelo con su lengua medio fuera, con los ojos medio abiertos, y le salía algo de sangre de su estomago, se me empezaron a lagrimear los ojos, y poco a poco se estaban deslizando en mis mejillas pequeñas y amargas lagrimas, el hombre se dio cuenta de mi presencia, levanto su mirada yo solo lloraba abrazando a mi perro, a mi mejor amigo de toda la vida.
- Es tu perro?- me pregunto confundido, yo solo lo mire y desvié mi mirada hacia Rex que por suerte podía escuchar todavía sus latidos, creo que ese silencio y mi mirada dijeron todo. El solo suspiro y miro al suelo - Lo siento mucho, enserio no era mi intención no lo había visto pero ahora vendrá la ambulancia. Dicho eso no le respondí nada yo solo quería que mi perro estuviera a salvo a mi lado. - Acaso estas ciego?!- Le grite no sabia exactamente que era lo que sentía en ese momento si era tristeza, rabia mis emociones se mezclaban.
El solo se quedo callado y de ahí pude escuchar la sirena de la ambulancia.
- Ya esta Rex ya vienen a salvarte, por favor no te vayas no me dejes sola....- murmuré con mis lagrimas deslizando aún en mis rojas mejillas.
Llego la ambulancia, se estaciono cerca de nosotros y bajaron dos personas con una camilla, se acercaron a nosotros y cogieron a Rex delicadamente para ponerlo sobre esa pequeña camilla, antes de que se lo llevaran me levante limpiando mis lagrimas con las mangas de mi sudadera negra, y me dirigí hacia ellos - ¿Podría ir con vosotros?, es mi mascota.
Ellos asintieron y me ayudaron a subir
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Que somos?
RomanceAmalia, una chica de 19 años se entera que su perro Rex su mejor amigo de toda la vida a sido atropellado por un coche. Ella llorando en la puerta de su apartamento pensando que no lo volvería a ver nunca mas se encuentra con el hermano de uno de s...