Michael Myers X T/N Compartes tu bolsa de dulces con Michael.
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Michael se acuesta a tu lado en la cama. Se había comprometido y había permitido una cama real y sofisticada dentro de la vieja casa de Myers, con cabecero y todo, siempre que el colchón fuera duro. Y se refería a sólido como una roca: cuando finalmente trajiste uno a casa que él aprobó, se sintió como estar acostado sobre un ladrillo. Supongo que le recordó a la cama de Smith's Grove. Quizás simplemente no le gustaba relajarse. Cualquiera que sea su razonamiento, no te gusta pensar en ello demasiado tiempo, ya que la verdad probablemente te entristecerá ... y a Michael no le gusta cuando estás triste.
Esta noche te habías disfrazado y salido a pedir dulces; sí, tú, un adulto ,saliste disfrazado y pediste dulces en la puerta. Lo que pasaba con Haddonfield era que a todo el mundo aquí le encantaba Halloween. La masacre de Michael hace 40 años fue hace demasiado tiempo para que la mayoría la recuerde, incluido tu misma/o , y aunque mató de nuevo cada Halloween para sacarlo de su sistema, nadie parecía conectar los puntos.
Pero las calabazas permanecían en los porches, los dulces seguían siendo tan abundantes como las hojas que caían y los disfraces siempre eran creativos. Ésa es otra cosa de tu pequeño pueblo soñoliento de Haddonfield que te encanta; el espíritu inquebrantable. A la gente de esta ciudad no le importa si los adultos se disfrazan y participan en el truco o trato. Todo era parte de la temporada.
Lo que te lleva ala bolsa de dulces llena de dulces entre Michael y tú. Él lo mira. Sacas una barra de chocolate y se la das. Lo aplasta en su puño y te lo devuelve.
"Has dejado claro tu punto", murmuras, abriendo el envoltorio y dejando que las migajas se introduzcan en tu boca. "¿Alguna vez has comido dulces en Halloween?"
Michael asiente con la cabeza lentamente.
"¿Te gustan los dulces, de Halloween?" Michael inclina la cabeza hacia un lado. Obviamente no. "Simplemente prueba uno diferente. Aquí, prueba esto". Le das una piruleta. Lo mira por un momento, luego lo estrella contra la pared con una fuerza ridícula, devolviéndote el caramelo roto en el envoltorio. Suspiras.
"Okey.Si es asi. Más para mí. "Le das la espalda, volteando para poner dulces en un plato.
Puedes sentir su mirada silenciosa en tu espalda, perforando agujeros en ti. Es probable que esté confundido, sorprendido y más que un poco irritado, tratando de averiguar por qué estás haciendo esto. Su sombra bloquea la luz de la luna que entra por la ventana, así que sabes que todavía está sentado . La cama no se mueve. No mueves un músculo. Sabes que el cabrón está esperando que te rindas y te des la vuelta como siempre lo haces, pero esta vez no está ganando.
Tarareas para ti mismo mientras desenvuelves algunos M&Ms, metiéndote uno en la boca mientras lo ignoras. La respiración de Michael se hace más fuerte bajo su máscara y tienes que sonreír. Se está frustrando. Pasa otros segundos mirándote, antes de que sienta un cambio en la cama. Esperas que se ponga de pie y te abandone, como siempre hace cuando está frustrado. Es probable que no lo veas de nuevo esta noche, y 3 cuerpos más terminarán en las noticias más tarde.
Sorprendiéndote en cambio, su mano se posa sobre tu hombro. Intentas mantenerlo unido, ya que cada instinto te dice que te interese en el sentimiento. El toque es tan suave y te calienta que en realidad esté haciendo un esfuerzo por quedarse esta vez. Pero quieres ver hasta dónde puedes llegar con esto. Empieza a frotar su mano fuerte arriba y abajo de tu brazo y masajearlo, tal como le dijiste que te gustaba antes. Te muerdes el labio, volviendo a tus dulces.
Sacas una barra de chocolate de cuerpo entero y Michael la ve por encima de tu hombro. ¿Cómo podrías seguir prestando atención a tus dulces y no a él? ¿Su rara muestra de afecto no significó nada para ti?
Su mano se aprieta sobre tu hombro y de repente te tira de espaldas violentamente, arrebatándote la barra ofensiva de tus manos con un gruñido. Miras mientras saca su cuchillo y deja caer la barra sobre la cama. Tu corazón comienza a latir más rápido ... tal vez fuiste demasiado lejos al ignorarlo. Él levanta el cuchillo, lo baja y gritas, cerrando los ojos con fuerza. Cuando los abres, no te corta a ti, sino a la barra por la mitad. Michael te entrega la mitad y comienza a desenvolver la suya con indiferencia.
Al levantarse la máscara apenas por encima de los labios para comerse el chocolate, deja al descubierto su tenue barba blanca y la cicatriz en el lado derecho de la mandíbula. Derrite un poco tu corazón y pasas la pierna sobre su regazo. Está a la mitad de comer la barra, pero se detiene para ver qué estás haciendo.
"No pensaste que no iba a aprovechar esto, ¿verdad? "Sonríes, se sienta a horcajadas sobre él, y te inclinas para presionar tus labios contra los suyos, envolviendo tus brazos debajo de su espalda en un abrazo. Él deja caer el caramelo. envoltura y sus manos también se levantan, sosteniéndote sentada en su regazo, hasta que comienza a subirlas por tu espalda a medida que tus besos se profundizan.
Sabes que no le gusta estar mucho tiempo sin la máscara, así que presionas unos cuantos besos más suaves en sus labios expuestos antes de bajarla para él. Inclina un poco la cabeza y la entierra en tu cuello. Te recuestas sobre su hombro, escuchando su respiración acelerada por el beso.
"Feliz Halloween, Michael", le susurras al oído. Él le da a tu trasero un pequeño apretón a cambio.
