//Capitulo 42/Quien la sigue la consigue//

187 14 8
                                    

Narrador omnisciente.

La semana paso con toda la calma, el día sábado llego, todos estaban de manera relajada en la sala de estar de la casa del pecoso.

- Esto es relajante- Dijo Izuku el cual estaba tirado en el suelo.

- Completamente- Dijo Melissa la cual usaba de almohada el regazo de su novio.

- ¿Por qué un Midoriya le gusta usar su regazo de almohada y al otro usar los de su novia de almohada?- Se quejo Dánae teniendo a Akihiko en su regazo.

- Es que el enano aun no sabe los cómodos que son los muslos- Dijo Akihiko mientras hablaba casi en un tono excitado.

- Controla tus hormonas o te quito de mis muslos- Dijo Dánae con un tono algo molesto.

- Esta bien, esta bien- Dijo pasando a un tono relajado.

- A veces me pregunto que fue lo que hicieron contigo para que seas así de atrevido- Dijo Izuku mirando con vergüenza ajena a su hermano.

- Y yo me pregunto ¿De donde sacaste lo tacaño?- Pregunto Melissa con un tono curioso.

- Tampoco se, pero es bueno tener dinero ahorrado- Dijo mientras miraba a cierto mueble.

Aquella platica casual seguía de manera calmada, mientras cierto joven de cabello azul miraba a un espejo preguntándose si estaba bien vestido o no.

- ¿Sera mucho o muy poco?- Se preguntaba mientras miraba el espejo- Y esto otro- Dijo tomando una bolsa de papel con una cinta de regalo- ¿Sera excesivo o no?- Estaba completamente indeciso- Ante la desesperación no queda de otra- Dijo saliendo mientras se dirigía a cierta puerta.

El joven mexicano camino con calma al que anteriormente fue su cuarto, toco con calma y hablo en un tono algo nervioso.

- Celia ¿Estas libre?- Pregunto ciertamente nervioso.

- Para ti nunca- Dijo con un tono burlesco.

- Gracias, voy a pasar- Dijo mientras hacia lo dicho.

- ¿Qué quieres de mi?- Pregunto sin dirigirle la mirada.

- Nada tan importante- Dijo mientras se ponía detrás de ella- Solo dame tu opinión- Dijo algo nervioso.

- ¿Opinión de que?- Pregunto mientras se voleaba a verlo- Oh, ya veo- Dijo viendo fijamente su vestimenta.

- Y ¿Qué tal?- Pregunto mientras mostraba mejor sus prendas.

- Y ¿Qué tal?- Pregunto mientras mostraba mejor sus prendas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Traicion que poco importoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora