HELL

???

Estábamos en pleno invierno y no podía más, mis pies estaban helados y no había parado de correr desde que salí de ese sitio, me venían a la mente imágenes de todo lo que había pasado y no pude contener las lágrimas solo de pensarlo. Todo parecía tan irreal que mi cabeza no podía procesarlo, era tan doloroso que me había dejado sin fuerzas tanto mental como físicamente.

Fue entonces cuando lo vi.

Estaba paralizada. Había llorado tanto y estaba tan cansada que mi mente no reaccionó. Llegó hasta mi corriendo y por fin sentí que mi cuerpo se llenaba con un poco de esperanza, hicimos un intercambio de miradas y nos quedamos así durante unos segundos, pero algo estaba mal en todo esto, ¿qué le pasaba?, ¿porqué no sentía ni una pizca de emoción de su parte?, ¿cómo había llegado hasta aquí?; y de esta manera pude reconocer a la perfección algo que había visualizado durante este último año muchas veces.

La traición.

Sabía a la perfección lo que tendría que haber hecho, escapar, pero me acordé de algo que leí hace un tiempo, hay dos clases de monstruos, los que atacan por en frente, y los más peligrosos, que lo hacen a tus espaldas, ¿y justamente en eso consiste la traición no?, tus verdaderos enemigos no son los que intentan atacarte por en frente, sino los que esperan hasta el momento indicado para poder hacerlo y mientras tanto van cubiertos de una capa de mentiras que les engulle poco a poco hasta formar su propio mundo de mentiras en los que siempre están ellos para ser los que lo controlan todo.

Pero había que acabar de una vez por todas con esa capa de mentiras que se había creado el mismo, a si que si lo que le gustaba era jugar, ¿porqué no hacerlo?, si se creía que sería tan fácil librarse de mi, ese capullo que me conocía tan bien se estaba equivocando.

Porque yo estaba ahí, lo estoy y lo estaré para destruir su puñetero juego de una vez por todas.