- México... ¿Sabés que día es hoy?
Cierto tricolor lo miró confundido.
- Martes.
La sonrisa del argentino desapareció de su rostro apenas México terminó por hablar, bajando su emoción por tal fecha a la que se refería y tanto le entusiasmaba. Aun asi, sin rendirse, siguió intentando para que su contrario adivinara.
- No. Bueno, aparte. Es un día muy especial para mi y sólo para mi. Se festeja algo muy importante.
- No sé, we.
- ¡Deberías saber!
- ¡Pero no sé!
Ambos se miraron. Uno extrañado y el otro ya enojado. Sin más que comentar, Argentina se fue de la cocina donde se hallaban, totalmente indignado, dejando a su pareja que se planteaba qué chingados pasaba.
"¿Ahora que madres me olvidé?"
México tenía bien sabido que Argentina se tomaba muy a pecho sus fechas nacionales. Si alguien importante para el argento se olvidaba de alguna, técnicamente estabas muerto para él. Al menos por unos días. Unos largos y tediosos días en el que te preguntas qué podría llegar a pasarte de la nada.
Desesperado, sacó su celular de su bolsillo derecho, entró a Google y en la barra de búsqueda escribió "30 de noviembre en Argentina".
Al instante, varias cosas empezaron a salir respecto a esa fecha, como personas conocidas, partidos que hubieron, etc.
Bajó más hasta que lo encontró:
"En homenaje al nacimiento del caudillo Andrés Guacurarí y con el propósito de promover el reconocimiento de las costumbres argentinas, este martes 30 de noviembre se celebra el Día Nacional del Mate en Argentina"
- Ohhhhh.
Se quedó mirando la pantalla, pero pensando en literalmente nada.
- Sabía que éste día llegaría.- Formó una sonrisa victoriosa.
Guardó su celular donde estaba antes y corrió a la habitación principal que compartía junto con Argentina.
Al llegar, encontró a su amado sentado en la cama, viendo feliz un mate redondo forrado en cuero negro que traía en manos, mas conocido como mate torpedo, con adentro una bombilla pico loro.
México se asustó porque su novio estaba con el mate de urgencia que tenía para momentos como ese.
- Mex... me encanta, gracias.- se levantó sin soltar el mate y abrazó por el cuello al norteamericano.
Que Argentina no aparentara estar enojado alivió los nervios del mexicano, quien luego de que su mente se aclarara, se dio cuenta de algo:
- Argentina... ¿por qué revisabas mi cajón?
- Para Guardarte los calzones...- Inventó rápido.
.....
Ese es el mate y la bombilla, la cual es súper gruesa y entra un montón de agua. Yo me quemé la jeta con eso.