Jeon Jungkook, no creía volver a sentirse vivo después de lo que pasó hace varios años, pero eso cambia ante el regreso de aquel amor que no pudo ser, pero que solo tal vez podrá tener su inicio si decide hacerle frente a su más grande enemigo.
Ini...
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Habían pasado un par de días desde la llegada de Taehyung, nadie se había acercado ni le había hablado. Y Kim parecía no importarle eso.
Él estaba ahí solo por trabajo. No necesitaba hacer amigos ni ser amigable.
Todos se habían dado cuenta de que algo en Taehyung había cambiado, no solo por su físico que claro, traían a chicas y chicos volviéndolos locos. Porque acéptenlo.
Kim Taehyung es hermoso.
Si no que, algo en su mirada le daba un brillo misterioso, es como si siempre estuviera calculado los pasos de las personas a su alrededor, como si estuviera esperando algún tipo de ataque.
─ Vaya, vaya, vaya. Al principio no lo creí, y debía verlo con mis propios ojos. ─ un chico alto y un tanto musculoso se paró frente al él. Estaban llamando la atención de toda la cafetería. ─ No creí volver a verte Kim Taehyung.
El nombrado frunció el ceño confundido. Él no lo conocía, o al menos nunca se había topado con esa persona.
Y que él supiera su nombre lo puso alerta.
─ Todos creímos que habías sido secuestrado y llevado a quien sabe dónde.
Taehyung seguía con la mirada baja, no dándole importancia a lo que el tipo estaba diciendo.
─ Desapareciste sin dejar rastro. Y mírate, has regresado.
Sin entender nada, se levante con tranquilidad del puesto en el que había estado solo durante los minutos del recreo. Intentado evadir al chico, pasa por su lado sin decir nada, quiso salir de ese lugar, sin embargo, le fue imposible cuando este tomo su muñeca.
Al sentirse atacado, dobla su muñeca mientras tomaba el brazo del chico y le daba la vuelta dejándolo boca bajo sobre la mesa. Provocando un jadeo de sorpresa por parte de todos los que estaban presenciando la escena.
─ No vuelvas a tocarme. ─ fue lo que dijo de manera pausada, recalcando cada palabra con su voz baja y profunda.
Y sin mirar atrás, o a todos aquellos que estaban a su alrededor salió tranquilamente del lugar. Él no conocía al tipo, así que no sabía porque lo estaba molestado.
Las personas en la cafetería aún amonados por la escena, volvieron lentamente a sus cosas.
Nadie podía creer lo que vieron. Ya no había rastro del niño tímido y amable de la escuela.
Y es que nadie sabía que Kim Taehyung no recordaba a nadie. Él había perdido la memoria.
Una vez acabadas las clases del día, cada quien tomó sus cosas y empezaron a dirigirse a la salida de las instalaciones. Muchos iban cansados, otros iban preocupados, y otros iban cansados y preocupados a la vez.
Como es el caso de Jeon Jungkook.
La última clase se había alargado más de la cuenta, y tenía un ensayo que practicar. Aun le faltaba un par de meses para que se diera la última gira del año. Y no debía desaprovechar los días.
Además de que no solo estaban por graduarse, también estaban a pocos meses de que el año se acabara. Y él quería dejar todo listo.
─ Jungkookie, vamos. ─ observa a Yoongi antes de asentir y dirigirse al estacionamiento en busca de su auto.
Antes de llegar a su auto, Jungkook conecta sus ojos con los de Taehyung, fue tan breve que, se podría decir que no pasó. Jungkook observa como Kim sube a un auto con las ventanas completamente polarizadas y sale con rapidez del estacionamiento.
─ Eso fue raro.
─ ¿Qué cosa?
─ Eh...
─ ¡Jungkook!─ la persona que lo llamaba, no era más ni nada menos que la misma que había molestado a Taehyung en la cafetería.─ ¿Se te volvió a declarar? ¿Confeso que le sigues gustando?
─ Kai...él no...
─ ¿No lo hizo?
─ Taehyung no es el mismo Kai, déjalo tranquilo.
─ ¿Es así porque lo rechazaste?
Jungkook estaba apurado, y que Kai lo retuviera para preguntarle por cosas del pasado lo estaba impacientando más de lo que ya estaba.
─ Kai, no sé porque Taehyung es así. No supe nada de él después de... después de ese día, así que metete en tus jodidos asuntos y déjame a mí con los míos.
Rodea el cuerpo del mayor y se dirige rápidamente a su auto seguido por Yoongi, quien sin decir palabra alguna sube al asiento del copiloto y espera a que la respiración de Jungkook se tranquilice. No era un buen momento para que al menor le diera un ataque de ansiedad.
Al volverse adicto a las pastillas que su padre le daba, con la mínima cosa Jungkook podría tener un ataque, y eso necesitaría una pastilla para calmarlo. Sin embargo, cada que Yoongi estaba con él hacia todo lo posible para que su amigo no entrase en uno, y así podría evitar que tomara otra sustancia innecesaria.
Sabía las consecuencias que podría traer el consumo de varias de ellas, y aunque el cuerpo del menor este acostumbrado, el consumir más podría dañar más de lo que su organismo ya está.
─ Respira Kookie, todo está bien.
─ N-no yo...no
─ Si puedes Kook, vamos, respira conmigo.
Jungkook intenta hacerlo, pero no puede, su mente en blanco evita que piense y que le siga las respiraciones a su amigo. Yoongi nunca pudo encontrar una forma para poder ayudarlo a tranquilizarlo, y lo único que podía hacer era respirar junto a él hasta que el menor sintiera otra vez el aire pasar por sus pulmones. Y aunque no lo tranquilizaba completamente, el menor podía respirar otra vez.
Había ocasiones en las que Jungkook terminaba llorando y con los labios mordisqueados por estar tan perdido en sí que no se daba cuenta del daño que se llegaba a hacer hasta después de despertarse al día siguiente.
Cuando esos episodios le ocurrían estando su padre presente, lo primero que hacía era darle un sedante. Lo sedaban hasta el día siguiente.
─ Está bien.
─ No lo está Yoongi-ah, no lo está. Odio esto. ─ un sollozo escapa de sus labios y lágrimas se acumulan en sus bonito ojos. ─ Odio estos ataques, siento...siento como si callera al vacío y con la fuerza con la que caigo evita que la respiración llegue a mis pulmones. Cada que sucede me da miedo, tengo miedo de dejar de respirar.
Sin poder decir algo, el mayor abraza con fuerza a su mejor amigo e inevitablemente sus ojos se llenan de lágrimas. Él no podía perder a su único mejor amigo.
No podía perder a la persona que lo saco de su depresión hace un par de años.
Hola, hola, holaaa pequeñ@ skyyy...Siento que pasó mucho tiempo desde la ultimaactualización jejeje...Estaba acostumbrada a subir un capítulo, al menos casi todos los días,pero buuuuueno.
