—Confiesa, Chaeri. —Dijo Rindo mientras me acorralaba contra la pared.
—¿A dónde fuiste? —Cuestionó Ran al lado de su hermano, también acorralandome.
—Ah, ya saben, me gusta ir... y venir.... llegar.... e irme.
—Dejate de misterio, estuvimos buscándote por días. —Gruñó Rindo.
—La verdad es que... —Solté un suspiro dramático. —Me gané un viaje a México, y fui por una semana.
Ambos me miraron sin creerme, pero luego terminaron asintiendo indecisos.
—¿Y para qué me buscaban o que chou?
—Bueno, no sabemos cómo decirte esto sin que te... tú sabes, sin que te moleste o te pongas algo rara.
—¿Qué? Si no se sienten seguros con el plan de Mikey de las citas está bien.
—¿En serio?
—Si, la verdad es que yo no quería hacer eso. Digo, acababa de salir de una relación y ese burro quiso meterme en otra.
—Entonces, ¿Todo bien?
—Claro, y si quieren podemos ser amiguitos. —Sonreí metiéndome entre ambos para después enredar mis brazos con los de ellos, para comenzar a caminar. —Y si no... pues se la pelan porque me gusta molestar.
Ambos rieron divertidos, asintiendo.
—No teníamos ninguna intención de alejarnos. —Murmuró Ran.
°°°
—Agh, estúpido Mikey y su: “andale es que estoy malito”. —Gruñí caminando hacia la tienda.
Mikey había amanecido con un resfriado equis, pero como siempre lo exagera todo y ahora me mandó por medicamento para él.
Lo malo es que ni Shinichiro ni el abuelo estaban, así que nos tocó a Emma y a mi cuidar del enfermo.
Al llegar a la tienda saludé y pedí el medicamento, el chico que atendía me dijo que lo esperara un momento mientras buscaba así que me quedé ahí parada.
—Así que tú eres la protegida de Mikey el invencible. —Dijo alguien desde la puerta del local.
—Lo dudo, pero si quieres si. —Dije encogiendome de hombros. —¿Se te ofrece algo?
—¿Cuál es tu nombre?
—Roberto.
—No estoy bromeando.
—Ah, me llamo Chaeri Hana...bami. —Murmuré nerviosa.
El moreno me miró de arriba a abajo y asintió.
—¿Sabes pelear?
—¿Por qué preguntas?
—Responde.
Levanté mis cejas sorprendida, nadie me había hablado de esa forma nunca (que no fueran mis padres, claro), y ésta, no sería la primera vez.
—No voy a responderte, ya pierdete. —Gruñí girando mi cabeza hacia el frente.
Pero entonces el chico se acercó rápidamente hacia mi, colocando su mano en mi cuello, apretando con un poco de fuerza, pero no tanta como para asfixiarme.
—Soy mayor que tú, superior a ti, no tienes por qué hablarle así a tu rey.
—Rey de mi pie. —Bramé empujandolo sin éxito. —No me toques, idiota.
—Dudo que alguien que no sabe defenderse pueda amenazarme. —Sonrió abriendo mucho los ojos, como un loco. —Podrías servirme... No para una pelea, eres débil, pero... para otras cosas si.
—Izana, vámonos ya. —Habló un chico con ojos heterocromaticos y cicatriz en el ojo.
—Volveremos a vernos. —Sonrió el morocho, soltandome finalmente.
Ambos chicos se fueron y entonces el chico de la tienda salió del almacén.
—Ya no tengo éste medicamento, pero tengo otros que...-
—Lo siento, tengo que irme. —Murmuré saliendo del local.
Comencé a caminar viendo a todos lados para no toparme con el morocho de nombre Izana, mi cuerpo temblaba demasiado.
Cuando llegué a casa, me encerré en mi habitación evitando a Mikey y a Emma.
—Chae, ¿Qué sucede? —Preguntó Emma tratando de abrir la puerta. —¿Chae?
—No quiero hablar. —Fue lo único que dije.
Del otro lado de la puerta, Emma miró al suelo, notando gotas de sangre en el suelo.
—Mikey, Chae volvió a enfermarse. —Dijo la rubia mirando hacia donde se encontraba un Mikey tapado hasta los ojos.
—¿Eh? —El rubio se levantó colocandose sus pantuflas de dinosaurio y comenzó a seguir el camino de sangre. —¿Cómo crees? Seguro está en sus días.
—¿Eso crees?
—Si, además... Eh, ya es mitad de mes, ya ves que a ella le llega en mitad de mes. —Dijo revolviendo el cabello a la rubia. —Tu tranquila, seguro está avergonzada por su accidente con Andrés.
—Está bien, iré a hacerle un té para los cólicos. —Dijo la rubia.
Mikey espero a que se fuera a la cocina, y entonces golpeó la puerta, abriéndola en cuanto le quite el seguro.
—¿Qué cambió? —Cuestionó Mikey.
—No tengo idea, en realidad no sé que fue lo que hice. —Murmuré limpiandome la nariz con papel. —Creo que iré a dormir.
—Cualquier cosa, te llegó Andrés.
—En realidad si, ayer.
—Chchchch, no quiero saber eso.
—Y duele muc...-
—¡Lalalala!
Reí y luego él se fue.
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Save Your Tears [Tokyo Revengers]
FanfictionBy: @Moross_ «Te haré llorar cuando me escape, llévame de vuelta porque quiero quedarme. Me doy cuenta de que llego demasiado tarde, y te mereces a alguien mejor. -Save your Tears, The Weeknd y Ariana Grande.» Inicio: 21/Nov/2021. Final: 21/Dic/20...