Jungkook, el típico bad boy del colegio tiene un secreto que nadie sabe. Es virgen.
O mejor dicho, lo era, hasta que un misterioso hombre en un bar lo sedujo hasta hacerlo suyo.
Lo que no sabe Jungkook es quien era ese hombre, que lo hizo volar entr...
Era un buen miércoles para que Taehyung se despertara maldiciendo. Claro que sí. Lo que no sabía el castaño es que ese solo era el principio de un caótico día lluvioso que recién comenzaba.
.Al levantarse de la cama, fue hasta su armario, saco su ropa y se dirigió al baño para darse una ducha para poder ir a desayunar antes de partir a la universidad.
En la planta baja, en el comedor, estaban sus padres platicando a lo que dio un saludo de buenos días y se dirigió a la cocina a hacerse un té. Tarea que no pudo realizar tras escuchar salir de la boca de su madre, un nombre cual lo dejó perplejo haciendo que detuviera sus movimientos. Se asomo al marco de la puerta de la cocina, que dividía la cocina de la sala, muy discretamente, con la espalda pegada a la pared y callado, para así poder escuchar un poco de esa conversación, quería, no, necesitaba saber el contexto de esa charla en la que escucho ÉSE nombre.
- Sólo digo que me pareció muy simpático y además, guapo. A ella la conozco desde la universidad, hace mucho tiempo no la veía. Sería bueno organizar una cena. ¿Qué dados?
- Claro cariño, creo que sería una buena idea. Por lo que escuché en el trabajo, van a la misma universidad, creo que no abra ningún problema con ello.
Taehyung estaba confundido. No entendía y algo dentro suyo no quería entender realmente de que hablaban sus padres. Pero se le era imposible a Kim Taehyung quedarse con la duda, era cual gatito en nueva casa luego de que lo adoptasen. Muy, muy curioso.
Reanudó su labor de seguir preparando su té. Cuando lo tubo se dirigió con taza en mano al comedor que compartiría con sus mayores.
- ¡Oh! ¡Tae, adivina cariño! - Dijo entusiasmada su madre Hwasa con una sonrisa en su rostro, estando 100% segura de que su hijo reaccionaría con el mismo entusiasmo una vez que le contara la noticia.
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- Q-qué p-pasa ma-mamá? - No sabia por qué estaba tan nervioso como para que tartamudeara.
- Hijo, ¿estás bien? ¿Está todo bien? - Preguntó preocupado por su padre Hyunsik. Su hijo solo tartamudeaba cuando estaba nervioso o triste.
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- S-si - Maldijo internamente, cerrando los ojos con fuerza y volviéndolos a abrir - ¿Qué me decías mamá? - Dijo finalmente sintiéndose aliviado de que no tartamudeara esta vez.
