Capitulo 8: La llamada.

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- Perdón nosotros solo

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- Perdón nosotros solo... Solo... - Trata de hablar Nicolás pero falla en el intento. Está muy colorado, nunca lo había visto tan nervioso. Por lo general utiliza sus dones de actuación para disimular cuando lo esta. Pero no creo que ahora le estén funcionando.

Siento mis mejillas más calientes de lo normal, se que debo parecer un tomate. Esto es tan vergonzoso. No digo que me dé vergüenza haber besado a Nicolás, no no me da vergüenza. Solo que fue incómodo que ella nos vea.

¡Hamilton!

Debo contárselo a Hamilton, definitivamente debo hablar con él. Hará un escándalo. Se pondrá a planear la futura boda y crear nuestro nombre en pareja. Necesito hablar con alguien y Hamilton es mi mejor opción. Se que Dara es mi psicóloga y también puedo hablar con ella en modo profesional y amiga, pero ahora necesito a Hamilton Green.

¡Oh dios! ¿Porqué lo hice? ¡Soy una idiota!..

No puedo besarlo cómo si nada y estar dudando si me gusta. No lo conozco. Bueno, si lo conozco, pero desde los doce años que no lo veo y está muy cambiado. No puedo parecer un típico cliché de película y enamorarme... Bueno, enamorarse es una palabra fuerte... ¡No puede gustarme de una escena para la otra! ¡Es una locura Alex Williams!

Estoy diciendo y pensando cosas sin sentido.

Debería pensar antes de besar a personas que recién conozco, más si el beso me revuelve como un torbellino las mariposas del estómago... ¡Me revolvió las mariposas!

¿Y si ahora no vuelve a hablarme? ¿Si comienza a ignorame como los chicos idiotas de los libros? ¡Por dios! Debo controlar mis impulsos.

Estoy sobre pensando todo, debo controlarme. Respira Alex, respira.

- Estaban intercambiando saliva. - Interrumpe Nina a Nicolás y a mis pensamientos. - No es nada de otro mundo. - Le resta importancia y se adentra en el sótano. - Todo el mundo lo hace. - Nos mira con una sonrisa. - Cambien esas caras, no los van a crucificar. - Continúa riendose. Su risa suena agradable. - Eres el chico de la noche de la luna roja ¿No? - Pregunta y él asiente. Se que no debe recordar el nombre de Nina. Nunca recuerda los nombres. Así que salto a su salvación.

- Nina - Resalto su nombre mirándolo a él. - me ayudara a realizar el artículo de la Newslline. - Explico mientras cierro la puerta y le busco en los cajones una toalla para que se sequen. Están empapados y hace mucho frío. Agradezco que aún recuerdo dónde Catriel guarda algunas cosas... Bueno también porque investigue todo el sótano. Cuando se fue y me dijo que podía usarlo. Fue genial.

Solía llenar de preguntas a mi hermano, mientras iba desordenado todo e investigando los cómics, mangas, novelas y películas que tenía y tiene en las paredes. El nunca se ha enojado solo las volvía a acomodar y respondía mis millones de preguntas. Es un gran hermano.

- Con todo lo que tengo en la cabeza me he olvidado de escribir. Soy una decepción para el periodismo. - Continúo buscado entre las cosas algo seco para que se ponga Nicolás. - Ven Nina que te presto algo para que te pongas. - Le digo dirigiéndome hacia la escalera. - No permitiré que mueras de un resfrío. - bromeó.

Alex Tras Las Pistas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora