Única parte

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Será divertido y no pasara nada, decían.

 Sera rápido y sencillo, nuevamente Decían.

Ganaras muy bien.

Decían.

Y mientras maldecía a esos que me dijeron tal cosa, y me convencieron de entrar a ese plan, corría por mi vida, y por mi libertad.

-Pendejos -susurro en varios jadeos aun corriendo de todas las patrullas que venían detrás de mí.

Pero más pendejo yo, por haberme dejado convencer por esa gente estúpida, y no haber conseguido un trabajo decente y ganar dinero decentemente.

Solo yo acepto entrar a robar a una tiendo en plena luz del día.

Corro aun más rápido, y jalo mi gorra negra junto a mi cubrebocas para que no me reconozcan, y también llevo unos lentes oscuros, los cuales estoy odiando porque se empiezan a empañar por mi propia respiración y no me permite ver muy bien el camino.

Los bajo un poco y a unos cuantos pasos puedo divisar un callejón, las patrullas aun vienen detrás de mí, así que corro con todas mis fuerzas y me adentro a este, puedo ver que hay una salida hacia la otra calle, pero no me quiero arriesgar. 

Mi primer pensamiento fue meterme al contenedor de basura que esta aun lado mío, pero cuando vi unas escaleras arriba de este, y las cuales daban a varias ventanas de lo que se supone son departamentos, brinque y brinque hasta quedar medio colgado del barandal de estas, con mi peso y el peso de la enorme maleta que tengo en la espalda me costo demasiado llegar hasta arriba y pasar por fin a las escaleras, mi rozón latía desenfrenadamente y respiraba como un loco, pero no me detuve en descansar por que las sirenas me alarmaron aun más y subí escaleras hasta llegar a la primer ventana, pero para mi mala suerte estaba cerrada, subí más e igual estaba cerrada y solo quedaban siete ventanas, pero como si las personas que vivían ahí me odiaran la mayoría de las ventanas estaban cerradas, hasta que llegue a la penúltima.

-Joder sí -celebre al ver que esta si estaba abierta, la abrí y me adentre, pero mi pie y mi mochila se atoraron logrando una caída estrepitosa golpeándome la cara al instante.

-Pero que mierda -gritaron.

levanto mi mirada rápidamente al escuchar la voz de alguien y mis ojos casi salen de mis orbitas al ver al hombre desnudo frente a mí, mis mejillas empezaron a sentirse calientes por vil imagen.

-Lárgate -volvió a gritar el hombre el cual ya se había cubierto su entrepierna con una toalla.- sal ahora mismo o llamare a la policía.

Al escucharlo decir eso me levante rápidamente y cerré la ventana.

-No llames a nadie por favor -le digo mientras veía por la ventana, una patrulla estaba llegando al callejón y de esta salían varios oficiales.

volteo a verlo y mi mirada recorre todo su cuerpo desnudo, una ligera pulsación llega a mi entrepierna.

Ahora no Erick, por el amor de dios.

-¿Quien demonios eres y por que entraste a mi habitación? -vuelve a hablar aun enojado.

no le presto mucha atención por que mi mirada recorre rápidamente la habitación, hasta que doy con una puerta de armario y corro así ahí para meter la maleta.

-Hey, hey no, no que haces -dice caminando hacia a mi, vuelvo a voltear para verlo pero mi mirada cae en la computadora que esta encendida y esta en una pagina...

Já, porno gay.

suelto una risa burlona y el cae en cuenta de lo que veo y sus mejillas se tornan en un color rojizo.

Caught || Joerick O.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora