Digno

III

Lucifer se quedó mudo por un momento, estudiando la reacción de Chloe; le había pedido bailar con él y había aceptado sin pensarlo dos veces, incluso se había quedado aquí con él cuando Pierce le había dicho de ir se. ¿Qué quería decir eso? ¿Quizás Chloe aún estaba interesada en él? No podía ser posible, le había devuelto su libre albedrío cuando le rompió el corazón, incluso ella estaba casi en medio en una relación con otro hombre. Tenía que haber otra explicación.

-Vamos Lucifer - dijo Chloe sacándolo de sus pensamientos - pon algo de música.
-Si, voy - contestó él buscando el mando de los altavoces.

Enseguida comenzó a sonar una suave melodía predestinada para bailar bien pegados uno con el otro. Chloe fue la que dio el primer paso acercandose a él y cogiendo una de sus manos, mientras colocaba la otra sobre su hombro. Lucifer reaccionó rápidamente manteniendo firme su agarre en la mano de Chloe y posando la otra en su cintura. Poco a poco comenzaron a mecerse lentamente mientras se miraban a los ojos durante varios minutos.

-Esto es agradable - dijo Chloe rompiendo el silencio.
-Ciertamente lo es - contestó Lucifer con una sonrisa nerviosa.
-¿Lucifer estás bien?
-Si detective, es solo... - respondió él haciendo una breve pausa para pensar en las palabras correctas - estoy intentando entender por qué estás aquí ahora y no con él.

Chloe se movió nerviosa ante las palabras de Lucifer. En principio había subido para saber que era lo que Lucifer había querido decirle cuando los interrumpió Pierce, pero en el fondo, sabía que había querido estar con él toda la noche y no con Pierce, pero esa parte de ella no estaba preparada para admitirlo en voz alta.

-Te lo dije, quería saber que era lo que me querías decir - respondió ella sin mirarlo a los ojos - y ahora ya lo sé.
-Cierto - respondió él - aún así podías habermelo preguntado mañana en el trabajo.
-Pero entonces no estaríamos bailando ahora - zanjó ella con una sonrisa soltando el agarre de su mano y colocando ambas manos en la nuca de Lucifer.

Lucifer se quedó quieto por el repentino contacto, no sabiendo cómo reaccionar, cuando la sonrisa que Chloe le lanzó, le dio las respuestas; colocó ambas manos a los lados de la cintura de Chloe y la acercó más a él, lo suficiente para que sus labios estuvieran a escasos centímetros sin llegar a tocarse. Las respiraciones de ambos comenzaron a acelerarse y cada vez era más difícil resistir la tentación de hacer un pequeño movimiento y chocar sus labios entre sí. Cuando Chloe parecía que iba a dar el paso, Lucifer giró levemente la cabeza para apoyarla sobre la de ella, evitando así que se produjera el beso. Chloe resopló por lo bajo y se resignó a dejarse llevar por la música y no por el momento.

-Bueno ya es tarde, debería marcharme a casa - dijo Chloe separándose abruptamente de él.
-Si - contestó él algo decepcionado por la pérdida de ella en sus brazos - ¿Puedo llevarte a casa?
-No hace falta, voy a acompañar a Ella a su casa, que no está en condiciones de ir sola.
-Puedo llevaros a las dos, no tengo problema.

Chloe lo miró casi negando con la cabeza, cuando un "por favor detective" la hizo cambiar de opinión. Ambos subieron en silencio al ascensor y descendieron hasta un Lux prácticamente vacío.

La señorita López se encontraba acompañada de Patrick, riendo alegremente y gesticulando sin parar. Lucifer se acercó a ella y la agarró de la cintura para ayudarla a pararse de pie mientras le daba las gracias a Patrick por cuidarla. Los tres se marcharon de Lux y Lucifer dejó primero a Ella, esperando a Chloe fuera de la casa mientras ella ayudaba a su amiga a entrar. Después, Chloe salió de la casa y subió al corvette para marchar hacia su apartamento en silencio. Una vez llegaron allí, Lucifer apagó el motor de su coche y cuando se disponía a salir, Chloe lo detuvo.

-No hace falta que me acompañes hasta la puerta Lucifer.
-¿Qué clase de caballero sería si no lo hiciera detective? - contestó él con una sonrisa.
-Sé que lo eres - dijo ella riendo - pero de verdad, no es necesario.
-Insisto - zanjó él saliendo de su lado del coche y acercándose rápidamente al lado de ella para ayudarla a salir.

En cuestión de unos cuantos pasos, llegaron a la puerta del apartamento. Chloe comenzó a buscar sus llaves en el bolso cuando la voz de Lucifer la hizo detenerse y mirarlo a los ojos.

-Gracias por bailar conmigo esta noche detective.

Chloe se limitó a sonreír y en un acto de valentía, se acercó a él y le dio un beso en la mejilla.

-Gracias a ti por llevar a Ella y traerme a mí a casa. Nos vemos mañana en comisaria. Buenas noches Lucifer.
-Buenas noches detective - contestó él mientras la veía entrar y se llevaba una mano a su mejilla donde Chloe le había dado el beso.

Lentamente se volvió hacia su corvette mientras una sensación de calor y emoción le invadía el pecho. Quizás las cosas con la detective podrían estar cambiando.