Señor Taisho

Capítulo 4: Malos Entendidos

En este capítulo veremos la historia desde el punto de vista de Sesshomaru, todo para entender un poco la actitud de nuestro peliplateado favorito. Espero que lo disfruten.

Pov. Sesshomaru

-Por Dios, Sesshomaru! No puedo creer tu actitud conmigo frente a tus padres, no seas tan grosero, ¡soy tu esposa!- Me recriminaba, Kagura desde el jardín, esta mujer se empeña en hacerme el día difícil. ¿Cómo espera que la trate después de lo que hizo?

-Por conveniencia, Kagura, no lo olvides. Me casé contigo hace 5 años a petición de tu hermano Hakudoshi, y sabes mejor que nadie que lo intenté, intenté que lo nuestro fuera permanente, pero me di cuenta que tú no eres la mujer para mí, sabes perfectamente el porqué. - que descaro hacerse la víctima después de la infidelidad con ese tipo llamado Muso.

-Ya me cansé de disculparme contigo, ¿a caso no puedes dejar las cosas en el pasado? Ya madura Sesshomaru.

-Soy un hombre maduro, Kagura. Pero no soy una persona que tolere la traición. No pienso pasar el resto de mi vida con una mujer de moral distraída. Madura tú y entiende que el contrato termina en dos semanas y ese mismo día tramitaré nuestro divorcio y que quede claro que no obtendrás nada de mí.

-Eres un maldito rencoroso, pero eso ya lo veremos. - salió la mujer dando un portazo. Agradecida debería estar de que accedí a la petición de mi amigo Hakudoshi de casarme con su hermana para que ella pudiera cobrar el seguro de sus difuntos padres, un seguro de varios millones en el que yo no pedí absolutamente nada a pesar de tener que atarme a ella en un matrimonio arreglado de 5 años, ante las autoridades el matrimonio tenía que ser verdadero. Kagura es muy bella y de buena familia, por eso intenté que nuestra relación de esposos funcionara. Pero a esa mujer le es difícil mantener las piernas cerradas y yo no soy el pendejo de nadie. Si no pedí el divorcio antes fue por mi amigo, sabía que le quitarían a ellos el dinero del seguro, pero mi condena a lado de esa mujer terminará pronto. Me quité la camisa y tomé una toalla, necesitaba urgentemente meterme en la tina para intentar relajarme, pero estaba tan metido en mis pensamientos que no me había dado cuenta que no estaba sólo en la habitación, por una pequeña rendija de la puerta vi una tela azul brillante, era obvio que se trataba de un vestido, por un momento quise entrar y enfrentarla, pero decidí vestirme de nuevo y salir de ahí, esperaría oculto entre las escaleras hasta ver a la dueña del dichoso vestido, ¿con qué intenciones me espiaba? La tendré que mantenerla vigilada, sea quien sea.

Después de un par de minutos salió quien buscaba, no podía creer lo que mis ojos veían. Era una joven tan hermosa que por un momento no pude reaccionar, esa piel tan blanca y cremosa, parece de porcelana y contrasta con su cabello negro de una manera tan perfecta. Labios carnosos de un dulce color rosa que decoró con un simple gloss y me llaman como la miel a las abejas. Y sus ojos azules tan brillantes, adornados por largas y rizadas pestañas negras, ¿qué se sentirá que esos preciosos ojos te miren con deseo? No pude dejar de mirarla hasta que salió de la mansión directo al jardín. Es tan hermosa, ¿quién es esa joven? ¡Sesshomaru, reacciona! Es una niña a lado tuyo. Ahora que ella salió del cuarto podré tomar el baño que tanto necesito...

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-Sesshomaru, por fin sales hijo. Mira te presentaré con los invitados. - dijo mi padre cuando salí al jardín y me acerqué a su mesa. - Ellos son la familia Higurashi.

-Sesshomaru, ¿cuánto tiempo sin verte? ¿Me recuerdas cierto? - claro que lo recordaba, aunque claramente ha cambiado por la madurez que le han brindado los años, aún puedo distinguir al amigo de mi hermano.

-Por supuesto que te recuerdo, ammm... Hiroshi?

-Casi, es Hoshiyomi, pero no importa quiere decir que aún no me olvidaste por completo, mira te presento a mi bella esposa Nahomi.