엔하이픈 | short stories

riki | childhood lovers

Estaba muy nervioso.

No sabía que hacer.

Tenía la mente en blanco.

"Hola, Jia... buenos días- agh", susurró para sí mismo intentando ensayar cómo comenzaría la conversación.

El día estaba nublado, ya eran los inicios de la primavera, pero el clima seguía estando frío.

La noche anterior el chico no pudo dormir.

Se quedó despierto toda la noche tratando de encontrar la mejor manera de acomodar sus palabras para poder confesar sus sentimientos y aún así no llegó a un plan concreto, solo a pequeñas ideas y frases que definitivamente debía decir.

Necesitaba sacar todo para poder sentirse tranquilo. Unos días antes habían ido todos sus amigos a juntarse en una cabaña que ellos mismos decoraron cuando eran pequeños. Estaban jugando verdad o reto y Kim Sunoo, uno de sus amigos, le preguntó a Jia si alguna vez había pensado en tener una relación seria con alguien especial. Ella solo se quedó callada con los ojos bien abiertos y volteó rápido a ver a Riki solo para apartar la la mirada al siguiente segundo.

"Creo que mejor prefiero un reto", es lo que dijo Jia sin mirar a Riki.

No se habían visto desde ese día. Claro, había un mensaje aquí y allá preguntando como estaban o si ya habían comido, pero nadie se atrevía a sacar el tema de nuevo. La noche anterior Riki mandó un mensaje diciendo que quería hablar y ella aceptó.

Ahora él quería asegurarse de que la chica que quería con todo su corazón estuviera al tanto de sus sentimientos hacia ella incluso si no eran mutuos.

Tanto tiempo estando juntos, siendo los mejores amigos desde que podían recordar.

Haciendo todo lado a lado desde la infancia, riendo y llorando, afrontando los problemas juntos.

Cuando eran pequeños siempre vestían igual. Siempre que iban juntos al parque los demás niños comenzaban a decirles que se casaran y ellos siempre decían que así sería en el futuro.

Nunca se separaban.

Iban a la misma escuela desde el Jardín de Niños y no tenían problema con eso. Para todos ellos eran Riki y Jia, Jia y Riki, inseparables.

Siempre compartían cada momento juntos, "era imposible no enamorarse de ella" pensó Riki mientras frotaba sus manos temblorosas y sudorosas por los nervios del momento.

Después de esperar por unos minutos en la banca central del parque abandonado que les gustaba visitar juntos, la chica apareció.

Estaba usando un suéter color azul paster debajo de un overol que le quedaba almenos unas 2 tallas mas grande.

Que linda.

Se notaba que había corrido hasta el lugar pues estaba un poco roja y se detuvo a tomar aire posando sus manos en las rodillas para sostenerse. Riki se levantó apurado para ayudarla a sentarse pero ella lo detuvo.

"Estoy bien" le dijo aún agachada "no te preocupes, solo... solo dame un momento"

"Uh... de acuerdo" dijo Riki aún preocupado.

"Riki... uh yo..." dijo Jia una vez que se compuso mientras sacaba una pequeña caja de color azul cielo de su mochila, "ten", dijo extendiendo el regalo hacia él y agachando la mirada. Riki se sentó en la banca con el regalo en las manos y ella tomó asiento a su lado.

Él solo miró el regalo y comenzó, "quiero decirte algo-", "aún no por favor", lo interrumpió la chica "solo... abre la caja y... mira todo lo q tiene dentro... también hay una carta, solo léela y no me digas nada hasta que termines... de acuerdo?", le suplicó con la mirada.

Riki solo asintió y le dió una pequeña sonrisa que apenas se notaba.

Quitó la tapa de la caja. En la parte de abajo de la tapa venía un anillo con una carita feliz de color amarillo pastel, él sonrió y lo puso en su dedo meñique ya que parecía ser el único dedo en el que quedaba bien y la chica se golpeó internamente por no elegir bien su talla.

Siguió revisando lo que había dentro. Encontró un caramelo de sus favoritos encima de unos guantes color rojo.

Él quería esos guantes.

Hace meses pasaron al lado de una tienda y los vió por la ventana pero no tenía dinero en el momento; ella le dijo que podía comprarlos para él pero se reusó y le dijo que mejor solo siguieran caminando.

Al parecer regresó por ellos.

Hasta el fondo estaba un pedazo de papel doblado en una manera que parecía una estrella. La hoja era color rosa pastel y decía "ábreme". Riki sonrió mientras abría la carta y al instante reconoció la letra de su mejor amiga. Estaba escrita en tinta azul con brillos, "yo le regalé ese bolígrafo", pensó.

"Riki, hola. Soy yo, Jia. Bueno eso ya lo sabes, para cuando estés leyendo esto ya debería haberte dado el regalo. Espero te haya gustado. Regresé al siguiente día que viste los guantes rojos y los compré para tí. Perdón por no habertelos dado antes. Ya ni siquiera es invierno, pero sigue haciendo frío así que úsalos para mantenerte abrigado, ¿de acuerdo? Bueno pues todo lo escribo en esta carta porque tengo vergüenza de decirlo en persona y no saber como continuar en el momento que te vea. Eres mi mejor amigo. Lo haz sido desde que tengo memoria y se que siempre podré contar contigo así que tenía miedo de decir esto y arruinar nuestra amistad. El punto es que te quiero demasiado... más que solo como mi mejor amigo. Te quiero como Hyuna ama a Dawn haha. Bueno olvida eso, fue un mal chiste", se rió mientras continuaba leyendo " te quiero tanto que últimamente solo puedo pensar en abrazarte. El otro día que estabamos con los demás y comenzaron a hablar de relaciones no supe que decir, lo siento. Tal vez te hice pensar que no te quería o algo así, por eso quiero dejarlo claro en esta carta. Me gustas. Mucho. Más de lo que piensas. Quiero estar siempre contigo. Me pregunto como se sentirá tomar tu mano mientras caminamos por la orilla del río Han. Bueno, perdón, probablemente te sientas incómodo leyendo esto haha así que me detendré aquí. Solo quiero recordarte que siempre te apoyaré y apreciaré aunque me rechaces, seré solo tu amiga si así lo deseas-" en ese momento Riki dejó de leer y volteó a ver a su mejor amiga para después abrazarla con todas sus fuerzas.

Jia se paralizó. Tenía los ojos abiertos y no sabía como reaccionar. Riki tenía su cabeza metida en su cuello y sus brazos la rodeaban completamente. De vez en cuando podía sentir como sus brazos apretaban más su agarre en ella. Ella por fin reaccionó y lo abrazó de vuelta mientras jugaba con el cabello corto y negro de su amigo.

Él se acomodó en lo brazos de su amiga y sonrió cuando sintió su mano acariciar su cabeza. Se sentía tan bien.

Tan cálido.

"Yo también te quiero... como Dawn quiere a Hyuna haha" dijo haciendo referencia a su mal chiste en la carta. Ella se rió por lo bajo y le dió un pequeño golpe en la cabeza a lo que él se quejó pero volvió a sonreír con su cabeza aún en el hombro de la chica.

"Vayamos al Río Han... a caminar tomados de las manos..." dijo Riki alejandose del agarre de Jia sin romper el contacto visual a lo que la chica se sonrojó, pero sonrió dulcemente.

"Me parece perfecto" dijo mientras acariciaba de nuevo el cabello de su mejor amigo.

Al parecer Riki se preocupó por nada.

Se sentía un poco apenado ya que ella fue más valiente que él al momento de confesarse, pero estaba demasiado feliz como para pensar en ello en ese momento.

Y así tuvieron su primer cita.

La primera de muchas que vendrían en el futuro.

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Escrito el 04 de diciembre de 2021

1294 palabras

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