2. Capitulo 4.

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-Nos mandó a llamar Lord Hokage. -dijo Inojin.

-Si pero... ¿Que no falta Shikadai?

Shinki dejó de mirar a Chou-chou y dirige su mirada a Naruto.

-Oh, lo siento Naruto, está en Suna suplantandome.

-Mmmm entonces hay que reemplazarlo en esta misión.

-No hace falta. -dijo Chou-chou. -Los dos podemos hacerlo solos.

-Bien, es algo simple en realidad, así que presten atención.

Naruto les dió la misión y ambos salieron lo más rápido posible.

-Joder que buena está. -dijo Shinki en voz baja.

-¿Ah?

Naruto lo miró confundido.

-La señorita Akimichi, es bellísima.

-Si tanto te gusta invitala a salir.

-Ya lo intenté y me mandó a la mierda por como la traté cuando éramos niños.

-Uuuhh, las mujeres no olvidan tan fácilmente, tal ves por eso me casé con Sasuke.

-Si, el único que soporta a una mujer molesta es mi tío Shikamaru, tía Temari es un caso perdido y el aún así la ama con todo el corazón.

-Asi es.

Naruto y Shinki continuaron trabajando hasta la hora del almuerzo, en el cual Naruto se retiró porque iría a almorzar con su viejo grupo de amigos, así como en los viejos tiempos y Shinki se quedó en su oficina trabajando en su lugar.

Lee y Gaara llegaron al restaurante y ya Sasuke y Naruto se encontraban allí, ellos se saludaron y tomaron asiento. Luego de unos minutos todos los demás llegaron también, Neji y Tenten, Sai y Ino, Choji y Karui, Shikamaru y Temari, kankuro y kiba y Shino, Hinata y Sakura, y todos se sentaron en la misma gran mesa.

-Hace un par de años que no hacíamos esto, deberás. -dijo Naruto.

-Asi es Naruto. -dijo Gaara. -deberiamos comenzar a ordenar.

Naruto le hizo señas a un mesero y para sorpresa de Lee el mesero era ese mismo chico pelirrojo de la noche de la feria.

-Hola a todos, soy karuno, yo los atenderé el día de hoy. -dijo sonriente.

Gaara lo miró de arriba a abajo con desprecio, y luego miró a Lee, Lee se giró hacia Tenten, sabía que si miraba más de dos segundos a ese chico tendría a un Gaara celoso junto a él.

Gaara no suele ser muy celoso, excepto cuando le dan razones o cuando es por otro chico que relativamente se parezca a él.

-¿Que no eres el hijo de Karin? - preguntó Sasuke.

-Asi es señor.

-Ooohhh entonces tú apellido es Uzumaki.

-Karuno Uzumaki a sus servicios, ¿Que tipo de bebidas desean?

Todos comenzaron a ordenar y a conversar animadamente, el tiempo había pasado pero la amistad había triunfado grandemente, todos se sentían como los adolescentes que un día fueron, a pesar de que sus hijos ya habían pasado la adolescencia.

Después de unos minutos, Karuno llegó con la comida y las fue sirviendo, todo fue normal hasta que cuando fue a servir la de Lee este roso su mano con la suya intencionalmente asiendo que a Gaara se le subieran los sumos a la cabeza en cuanto lo vió.

Un trozo de la capa de arena protectora cayó desde la mejilla de Gaara y Naruto lo miró intrigado.

-¿Pasa algo Gaara?

Lee lo miró y tomó su mano.

-No, nada.

Todos los que habían presentado atención comenzaron a comer y Gaara apretó la mano de Lee con fuerza.

-¿Eres muy celoso lo sabías? -Susurró Lee.

-Si se te vuelve a acercar le corto el cuello.

Todos escucharon las palabras de Gaara y dirigieron su mirada hacia el.

-¿De que hablan ustedes dos? -dijo Ino.

-¿A quién vas a matar Gaara? -dijo Tenten.

-Tal ves al chico pelirrojo que coquetea con Lee y este ni cuenta se da. -Dijo Temari.

Lee miró mal a Temari.

-¡Lo sabía! Hoy se muere.

-Gaara, mi amor, calmate, ya estás grande para que te den celos ese tipo de cosas.

Gaara soltó la mano de Lee y se cruzó de brazos.

-Como sea, si se te acerca le cortaré el cuello con mi arena.

Lee asintió y tragó grueso, esperaba que el chico no se le volviera a acercar o las cosas se pondrían feas.

-Vaya, nunca había visto a mi hermanito celoso. -Dijo Kankuro.

-De seguro lo está porque el chico también es pelirrojo tal y como le gustan a Lee. -dijo Temari.

-Enserio Temari, ya callate, cada ves que dices algo la mirada de Gaara se pone más tétrica.

Karuno regresó a la mesa con la cuenta y se la extiende a Lee con una sonrisa, luego se retira.

-Dame.

-Solo es la cuenta Gaara.

Gaara mira a Lee con los ojos entre cerrados y espera a que este habra la pequeña libreta con las órdenes y el total que deben pagar.

Cuando Lee lo hizo vió que al final había un número de teléfono con el nombre del chico, por lo que lo tomó y se lo entró a la boca lo más rápido que pudo.

-¡Hey! ¿Que tienes ahí?

-Nada.

-Damelo.

-Pero...

-Escupe esa cosa o te lo quitaré a la fuerza.

-Oh esto se puso interesante. -dijo Kankuro.

Lee se sacó el papel de la boca y Gaara se lo arrebató de la mano, lo abrió sin importarle que tuviera la saliva de Lee por todas partes y vió el número de teléfono.

-Su número, el infeliz te dió su número.

-Vaya Lee, al parecer aún tienes tú encanto. -dijo Kiba.

Lee lo miró mal por ese comentario. Gaara tomó un cuchillo de la mesa y lo lanzó hacia karuno con la misma precisión con la que lanzaría un kunai a un enemigo y se lo clavó en una pierna.

-¡Gaara! ¿Por qué hiciste eso?

Lee trató de levantarse para ayudarlo pero Gaara lo detuvo.

-Si te levantas y lo ayudas el siguiente cuchillo estará en su cuello.

Lee miró a Gaara con determinación y se levantó de la silla.

-Te has pasado de la raya.

-Lee... Te lo advertí.

-No, yo te advierto a ti, iré a ayudar al chico que solo es un civil cualquiera, no es un ninja para defenderse de ti y tú te quedarás tranquilo y hablaremos en casa.

Todos se quedaron con la boca abierta viendo cómo Lee iba a ayudar a karuno, se dieron cuenta que se equivocaron al pensar que Lee hacia lo que Gaara quisiera.

-Al parecer Lee tiene huevos debajo de esos pantalones. -dijo Temari.

-Definitivamente él es el activo. -dijo Karui.

Todos rieron un poco y cambiaron de tema para calmar el ambiente, Gaara en cambio no le quitó los ojos de encima a Lee.

¿Quiere hablar en casa? Pues hablarían en casa.

Solo tú  ~GaaLee~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora