Enamorarse no es un delito

CAPITULO 15

Maia.

Mantengo la cabeza de Gia en mi regazo, no he dejado de acariciar su cabello, noté que eso la tranquiliza un poco.

Mark ha salido hace unos minutos hacia la farmacia para comprar unas pruebas, y así podremos saber si Gia lleva algo en su vientre... aunque las pruebas caseras no siempre son efectivas.

-¿Cómo... cómo lo conociste? - Gia gira su cabeza hacia mí y frunce el ceño - al posible padre de...

-Entiendo - me interrumpe - fue hace unos años - suspira - recuerdo que ese día papá había olvidado unos documentos, algo sobre un trato que debía cerrar con unos socios. Mamá estaba de viaje cerrando trato con un despacho de Alemania, él no podía salir de la reunión, así que lo más lógico era que nosotros los lleváramos.

»Yo estaba castigada porque no aprobé un examen, así que la regla era si vas a salir, Mark tiene que ir contigo. Vayas a donde vayas, no vas sin su compañía", entonces no podía quedarme en casa. Apenas llegamos, nos cambiamos de ropa y salimos de nuevo hacia la empresa de papá.

»Sabes que el tema de la empresa no es mi fuerte, no me llama mucho la atención, es por eso que sólo fui una vez. Cuando llegamos, vi toda la decoración nueva, la remodelación era increíble, tanto me distraje que perdí de vista a Mark... y me perdí.

»Después de estar tanto tiempo dando vueltas como una loca por toda la empresa, di con el comedor... y recordé por qué la cocina es mi lugar favorito de todo lugar. Aunque la verdadera razón por la que me quedé, fue por que ahí estaba Rita - sonríe

Rita es la antigua cocinera de los Abreu, también fue quien se encargó de cuidar algunas veces a los mellizos, cuando sus padres tenían viajes de urgencia.

-Nos pusimos al día con todo lo que había pasado, me quedé a ayudarle a atender a la gente y... lo vi - su mirada se vuelve algo triste.

»En el momento en que lo vi... Hubo un algo, que sé que ambos sentimos, hubo una chispa que surgió entre los dos... platicamos un poco y él me contó que estaba ahí por trabajo, era hijo de uno de los socios de papá, aunque también llevaba un caso.

Intercambiamos números... la verdad no recuerdo muy bien, pero desde ese día hablábamos casi todos los días.

»Seguimos en contacto, tuvimos varias salidas y encuentros, todo era muy diferente cuando estaba con él... tan lindo, tan sincero...

-¿Cuándo sucedió el "incidente"? - hago comillas en incidente, así es como ella lo ha llamado.

-Hace poco más de 2 meses - levanta su cabeza de mi regazo y se acomoda a mi lado - exactamente el día en que Mark fue a tu casa y casi lo encuentras comiéndose a Mady

Ambas reímos, es un tema que cuando se habla, Mark intenta hacerse el loco y lo evade. Sabemos que algo pasa, pero estamos tratando de no presionarlos sobre el tema.

La puerta de la habitación se abre y aparece Mark con una pequeña bolsa, se la entrega a Gia y ella se mete al pequeño baño de su habitación.

-Había una señora detrás de mí en la fila - Mark se tumba a mi lado - tuve que soportar su discurso sobre la importancia de usar condón

Río y él posa su cabeza en mi hombro.

-Joder, estoy a sólo unos minutos de saber si voy a ser tío... de saber si la vida de mi hermana va a cambiar - tomo su mano y le doy un pellizco en la muñeca, como solemos hacerlo cuando el otro está a punto de volverse loco.

-Lo sé... ella se ha esforzado tanto por su futuro... pero debe saber que pase lo que pase, cuenta con nosotros - gira su cabeza y me sonríe

-Ella no está sola Mai, ella nos tiene a nosotros