La magia de nuestro enlace ONE-SHOTS ( Camilo Madrigal x lector )

Conociendo a la familia

Camilo descansaba recostado en la cama de ____ mientras que esta buscaba y rebuscaba en una caja sentado en el suelo, su novio le miraba con cierta preocupación por su postura, aunque él no pudiera predicar con el ejemplo, pero cada vez que le pedía que se sentara con él ___ le hacía callar.

- Cariño ¿Que estás buscando? Llevas así como, no sé ¿una eternidad? - dijo incorporándose

- Ya lo verás, dame un momento.

- Espero que sea un anillo de compromiso, de no ser así me has estado haciendo perder el tiempo, guapo.

___ paro la búsqueda tan solo un segundo para girarse a mirar a su novio que reía burlón, le golpeó la rodilla con suavidad pero Camilo, siendo Camilo, se la agarró y comenzó a quejarse tirado de espaldas en la cama.

- ¡Creo que me vas a tener que amputar la pierna, ___!

- Como no te calles lo haré- amenazó y se sentó con él. - Mira.

- ¿Otra fotografía vieja? - Camilo tomó la imagen entre sus dedos sin levantarse y la miró con cuidado. - El señor se parece a ti.

- Es mi abuelo.

-¿Paterno?

- Materno. La foto me la dio mi tío.

En el calmado silencio  ___ aprovechó para mirar a su novio con el cabello sobre sus sábanas y el entrecejo ligeramente fruncido que ponía cuando pensaba, su olor quedaría en la almohada y esa noche sería como dormir a su lado, su voz hizo que despertara de su pequeña fantasía:

- Oye.

- Dime.

- Yo quiero conocer a tú tío.

Al día siguiente ya estaban de camino hacia su casa, Camilo no pensó que pasaría tan pronto y llevaba el estómago revuelto, estaba a punto de vomitar su corazón, en contraste estaba ____ que se veía más ilusionado que nunca, quería a su tío y amaba a su novio, que Camilo hubiera mostrado interés en su familia había despertado su sonrisa que no había bajado de sus comisuras desde que lo mencionó.

- ¡Tu eres uno de los niños mágicos! - Vito señalaba a Camilo con el dedo mientras reía después de haber saludado con un largo abrazo a _____

- ¡Así es! - una risa nerviosa se le escapó - ¿Quieres ver lo que hago?

Antes de que contestara Camilo comenzó a hacer un desfile de sus habilidades  frente al adulto, que acabó riendo a carcajadas por las imitaciones del joven.

- Me cae bien el muchacho.

- Me alegro, porque, bueno, él es mi novio.

Al vivir alejado del pueblo Vito no recibía las noticias al mismo tiempo que los demás por lo que se sobresaltó, mirando de nuevo a Camilo y volviendo la vista a su sobrino y así un par de veces más.

- ¿Él es...?

- Sí

- ¿Del que...?

- Sí

- ¿Y sois...?

- Ajá

- ¿Tu o él?

- Él

Madrigal miraba la rápida interacción de pregunta/respuesta tratando de descifrar la expresión del familiar de su novio quién de pronto le levantó del suelo en un abrazo.

- ¡Bienvenido a la familia, Camilito! - lo dejó de nuevo al suelo - Vamos a dentro y me dais todos los detalles. 

Camilo, aliviado al fin, siguió a su novio adentro de la casa donde pasaron la tarde tomando té y contestando las preguntas del tío Vito.