segui corriendo tras de el como si mi vida dependiera de ello, pero era tan rapido que no se cuando lo perdi de vista, pare a descansar pero empeze a notar que los arbustos se movian me agache pensando que seria el y que ya no escaparia, me asuste y cai hacia atras cuando salio no era el presisamente, era una jovencita igual que yo pero con el cabello azabache y su vestido era rojo, la mire detenidamente crei por un momento que era yo pero a diferencia de ella yo era rubia y mi vestido era azul.
parecia con miedo y perdida.
-hola estas bien- le pregunte y ella solo asintio.
-soy alice mucho gusto- dije extendiendole la mano pero ella miraba todo menos a mi como buscando algo.
-has visto un conejo negro,lo vi saltando por aquí- dijo finalmente.
-no, pero he seguido a uno blanco- conteste.
-tal vez son amigos- la escuche decir por segunda vez.
-no lo se, pero el conejo blanco me hizo caer en su madriguera y llegue aqui- le dije sinceramente.
-que extraño, el mio me hizo salir- me contesto de igual manera.
-¿como conociste al conejo blanco?- pregunto con curiosidad.
-bueno creo que el siempre estuvo frente a mi incitandome a jugar y yo accedí, y tu?-
-el se escondía en lugares oscuros tras de mi, le pedí que saliera, corrió frente a mi y por eso le segui- me conto.
-sabes mi madre me dijo una vez que jamas dejara que algo que residiera en la oscuridad saliera de ella- le dije.
-porque- siguio con la misma curiosidad.
-porque cuando entra en tu vida jamas se va y te llena poco a poco de una densa oscuridad, de un sentimiento de locura y vacio-
mi madre me lo dijo antes de morir, aun en sus ultimos momentos tuvo una luz de sensates entre lo que mi familia llamo locura.
yo siempre supe que ella no mentia y que las personas que mas amaba no le creyeran la llevo a la perdicion, yo no fui suficiente, quien le creeria a una niña con una progenitora con esos antesedentes.
al final mi madre no lo soporto y se baño de rojo frente a mi.
-así que por eso estoy aqui- dijo sacandome de mis pensamientos, parecia comprender lo que acababa de decirle e incluso por un momento pareciera que hubiera leido mi mente.
-tal vez, el conejo blanco me guió para encontrarte- le dije con seguridad.
-tu crees- pregunto a un dudosa.
-si! Porque no seguimos juntas al conejo blanco- le dije ofreciendo mi mano hacia ella.
-deberas- dijo con una sonrisa acercandose para tomar mi mano pero depronto la alejo cerrandola y poniendola en su pecho con su mirada algo perdida. -pero no crees que el conejo negro se sentirá solo- me dijo con tristesa.
comprendi que ella se sentia de esa manera al igual que yo creo que por eso seguimos a los conejos porque nos sentiamos solas.
-como te he dicho el nunca te dejara y quien sabe tal vez lo encuentres al final del camino- dije tomando su mano y empezando a correr.
la mire y ella sonreia al igual que yo.
-talvez ellos esten juntos no crees-
yo solo acenti con una sonrisa aun mas grande, tal vez el conejo negro ya no se sentiria solo por que el conejo blanco le haria compañia de ahora en adelante.
-oye y me diras tu nombre?-
-si claro- hizo una pausa y dijo -alyss- solo eso dijo y siguio corriendo a mi lado.
Y asi proseguimos el curso en busca de el conejo blanco, sin percatarnos de que la oscuridad nos seguía en nuestros pasos.
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las dos caras de alicia
Paranormalel conejo blanco y su mitad saltando y guiando, uno hacia la luz y otro a la oscuridad