Capítulo 16: Amortentia

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Diciembre 8, 1976

Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería

Salón de pociones

10:30 a.m.

—Buenos días—dijo el profesor Slughorn a los estudiantes de sexto año a lo que estos entraban a su salón de clases.

—Buenos días, profesor Slughorn—los alumnos respondían a coro observándolo con atención.

—En la clase de hoy estaremos trabajando con filtros de amor, específicamente, la amortentia—comentó con calma el profesor con su usual sonrisa—. La amortentia es el filtro de amor más fuerte que existe en el mundo mágico ¿Alguien me puede decir los efectos de este?

Varios estudiantes alzaron la mano, entre esos, Severus Snape, Lily Evans y Amos Diggory. Slughorn mantenía cierto favoritismo dentro de su salón, por lo que su vista fue directamente a Evans con una sonrisa amable.

—señorita Evans—Slughorn no podía evitar tenerle mucho aprecio a Lily, en especial después de saber todo el esfuerzo que le ponía a su clase.

—La amortentia genera una sensación de enamoramiento en quién la consume por quién la crea—contaba Lily con una sonrisa—. Usualmente, los efectos causan que la persona que lo bebió se ponga pálida y enfermiza, obsesionándose por el objeto de sus afectos.

—Exactamente, esa es la palabra clave, "obsesión"—dijo Slughorn sonriendo—. 10 puntos para Gryffindor, señorita Evans. Como les decía, esto genera una intensa obsesión por la persona. Un sentimiento como lo es el amor no puede ser recreado, simplemente es una vaga imitación.

Marlene McKinnon alzó la mano. Llevaba su cabello rubio despeinado y su mirada expresaba cierta curiosidad.

—¿McKinnon?—preguntó Slughorn con cierta curiosidad.

—Digamos que Meadows y yo nos gustamos...—empezó a decir Marlene a lo que un chico de Ravenclaw la miró.

—¿Algo que quieras declarar, McKinnon?—dijo burlón a lo que algunos estudiantes rieron.

—No hagas que vaya allá a hacerte escupir babosas...—empezó a decir Marlene a lo que Slughorn interrumpió.

—Nada de conflictos en mi clase, 5 puntos menos para Ravenclaw—Slughorn miró al chico y después a Marlene—. Puede seguir, señorita.

—Decía, digamos que Meadows y yo nos gustamos—siguió Marlene mirándolo—. Pero no sabemos, entonces se me da por hacer la amortentia y se la doy ¿Qué ocurriría en ese caso?

—Excelente pregunta—Slughorn sonrió entusiasmado—. Lo que ocurriría es que pasaría de ser una poción de amor a una de odio, quién la beba amando a la persona que se la dio, la va a odiar hasta que el efecto de la poción pase o reciba su respectivo antídoto.

Severus anotó aquel detalle rápidamente en su ejemplar de Pociones Avanzadas. Este levantó la vista una vez el profesor dijo que debían hacer parejas. Ya se había rendido desde que se peleó con Lily en tener compañero de pociones fijo, así que se decidió por esperar a aquel que sobrara.

Sirius iba a decirle a James para trabajar juntos, pero vio como este fue al lado de Lily casi de inmediato.

—Ciervo traidor—murmuró Sirius jugando con su pluma.

—¡Oye, Evans!—la llamó James con una suave sonrisa—¿Trabajamos juntos?

—James, mira, esto te lo diré una vez más y espero quede claro—Lily respiró hondo y lo miró—. Me halaga que gustes de mí, pero no, no quiero trabajar contigo, no quiero una cita contigo después. No nos conocemos lo suficiente y tus bromas se me hacen de muy mal gusto. Además, ya voy con Mary.

La Noble Casa BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora