So it goes// Kai Parker

Capítulo 4. Chica nueva

Portland, Oregón
Septiembre/ 1987

Aurora

Primer día de escuela, aquí vamos.

En otros momentos estaría emocionada por entrar a la escuela, pero no ahora con mis antecedentes; en fin la buena noticia es que al menos ya conozco a 3 personas.

Me levante temprano a tomar una ducha, el agua era tibia y justo así la necesitaba, baje rápidamente a desayunar y mi familia ya se encontraba ahí. Mi madre se ofreció a llevarnos a la escuela y ahí estábamos, en camino a la escuela.

Llegamos unos minutos antes de la hora de la entrada, Hazel era un año menor que yo por lo que asistiríamos a la misma escuela pero cursaríamos grados distintos. Ambas entramos por nuestros horarios y cada una se dirigió a su respectivo salón, pero antes de yo entrar al mío me dirigí mi casillero y hubiera logrado mi cometido si no hubiera chocado con alguien por distraerme buscando el casillero con número 1312.

- Lo siento- me disculpe inmediatamente.

- ¿Que no ves por dónde vas? - me pregunto una chica de cabello castaño.

- Discúlpame- reitere- no fue mi intención.

Me miro con desagrado, barriéndome con la mirada.

- ¡Agh! eres la nueva ¿no? - no conteste- ¿por qué mejor no me haces un favor y te desapareces de aquí? - me señalo con la mano la salida.

Solo la mire y trate de restarle importancia. Continue mi camino y antes de llegar a la entrada del aula choque con Jo, vaya torpeza la mía, ella me sonrió y me indico que entrara. Al entrar había medio salón sentado, Jo y yo nos sentamos juntas y pronto empezamos a platicar. Unos minutos después entro el profesor de literatura y gracias al cielo no me pidió presentarme ante los demás, esperaba la misma suerte en mis demás clases.

Lamentablemente no fue así, en la tercera hora la profesora de algebra me hizo presentarme.

Al presentarme solo mencione mi nombre, de donde venia y la razón por la que llegue a esta ciudad, claro que omití los detalles del aquelarre, la magia y los seres sobrenaturales; de por sí ya me veían de manera extraña no necesitaba darles más motivos.

A medio día hubo un descanso y agradecí que esto ocurriera, estaba harta de presentarme en cada clase. Fui por mi almuerzo y divise una mesa posicionada junto a una gran ventana, fui directo a ella y me senté a tratar de disfrutar mi almuerzo, hasta que la presencia de alguien interrumpió mi tranquilidad.

- Hola tu- me saludo Kai.

- ¡Qué onda! - le devolví el saludo- no te habia visto desde artes.

- ¿Por qué estás sola? - pregunto mientras se sentaba frente a mí.

- No sé si lo habías notado pero aquí soy nueva - respondí con sarcasmo - y la gente me trata como bicho raro.

- Pues ya somos dos- contesto con desagrado.

- ¿No eres popular aquí? - reí, a lo que él me contesto con una mirada de desaprobación.

Seguimos almorzando juntos y ambos estábamos en un silencio que para nada era incomodo, pero como siempre este fue interrumpido.

- Vaya vaya- era la misma chica que me encontré en la mañana- la chica nueva se junta con el rarito- se mofo- no se me hace extraño saben- se dirigió al grupo de amigos con el que venía- a leguas se nota que son tal para cual- y en otras circunstancias me habría gustado el cumplido pero no ahora.

- ¿Cuál es tu problema? - pregunte levantándome- no llevo ni un día aquí y ya te burlas de mí.

- Ahh la chica nueva tiene agallas- se mofo nuevamente.

- Déjame en paz- la mire a los ojos retándola.

- ¿Y si no quiero que? -

- No creo que quieras averiguarlo-

En ese momento se sentía una gran tensión que fue rota por un chico de pelo castaño y ojos claros.

- Vamos chicas, tranquilas- se puso entre las dos- es el primer día de escuela, no es necesario todo esto.

- Tienes razón cariño- contesto ella con una sonrisa- vámonos, no vale la pena hablar con esta.

- Si me vuelves a molestar lo siguiente que veras serán a tus lindos dientes saliendo de tu boca.

Y con una sonrisa hipócrita salió de ahí, yo me senté y Kai solo me miraba con una sonrisa, pero se borró cuando noto quien se acercó a mí.

- Lo siento mucho- era el chico que se interpuso entre aquella chica y yo- Amanda a veces es algo intensa- solo lo mire con confusión- soy Alex- acerco su mano hacia mí.

- Aurora- le correspondí.

- Bueno Aurora, mucho gusto- ambos nos sonreímos- bueno me tengo que ir, espero coincidamos en alguna clase.

- Hasta luego- Y salió de ahí, me pareció un chico agradable.

Mi mirada regreso a Kai, el cual me miraba algo serio.

- ¿Qué pasa? - pregunte.

- Nada- contesto fríamente.

Preferí no decir nada y bebi un poco de agua, después de un minuto observé a Kai y este se encontraba tenso. Iba a preguntarle de nuevo que le pasaba pero salió caminando a prisa, dejándome sola.

Me resulto extraño su comportamiento, me levanté de mi lugar y fui directo a mi siguiente clase, geometría, ahí descubrí que estaba de nuevo con Jo y Alex, el chico que acababa de conocer. Pase la clase junto a Jo y senti que fue una eternidad, las matemáticas no son lo mío.

Finalmente terminaron las clases y me dispuse a esperar a mi madre sentada en una banca que se encontraba frente a la escuela, unos minutos después llego Hazel y comenzó a contarme lo bien que le habia ido en su primer día de clases, ''que afortunada'' pensé. Realmente podía notar lo mucho que le había gustado y sentado el cambio de ciudad y eso me agrado demasiado, amaba verla sonreír. Y para no causar conflictos y preocuparla decidí contarle que también me habia ido muy bien en mi primer día, y así habia sido a excepción de la tal Amanda y del extraño comportamiento de Kai en el almuerzo.

En fin, para ser mi primer día no habia estado tan mal. Mi madre llego unos cinco minutos después y nos fuimos en dirección a casa.