8 de diciembre, 2021
Estadio Madre de Ciudades, SDE
El Toto estaba posicionado para patear el último penal, el que nos separaba del grito sagrado. Estaba notablemente nervioso por la definición y porque en mi mente pasaba las mil escenas donde me encontraba declarándome, todas terminaban mal. Tengo miedo. No tengo a Rossi para hablar sobre esto.
Si se lo preguntan, me costó mucho darme cuenta de lo enamorado que me encontraba de mi mejor amigo. Mi objetivo era centrarme en mi juego y demostrar lo que era capaz de hacer con esta hermosa camiseta, lamentablemente Almendra no me la dejó fácil. Desde que él apareció en mi vida supo sanar las heridas que mi relación con Ander me había dejado, ha estado para mí siempre que lo he necesitado, los abrazos que él sabe dar son únicos e irrepetibles, los consejos, las palabras, todo. Almendra me vuelve loco.
El árbitro dio la orden para la ejecución, Salvio tomó carrera y la clavo en el ángulo superior izquierdo. Es un hecho, ¡SOMOS CAMPEONES! Corrimos hacia la hinchada, los gritos, canticos y el ¡DALE CAMPEÓN! No se hizo esperar. Abrazos, llantos, fotos, espuma, saltos, era una verdadera fiesta. Sabía que el momento estaba llegando, buscaba al chico en cuestión, estaba con los demás pibes. Me fui acercando, temblaba.
-Somos campeones-gritó Agustín Almendra mientras me abrazaba, no quería soltarlo.
-Lo logramos, copamos Argentina-sonreí para envolvernos nuevamente en otro abrazo, me está gustando esto.
A lo lejos logré ver a Rossi soltando las lágrimas contenidas tanto de felicidad como de tristeza, no lo malinterpreten está feliz de obtener otro título en Boca pero que su papá no esté más debe ser realmente doloroso. Me crucé con Lastra, hora de ser cupido y ayudar un poco.
-Agus-lo llamé-alguien de rosa por allá te necesita.
-¿Quién?-preguntó, uh no capta el chico-tu gemelo, te necesita. Rossi te necesita, anda.
-No, él ya no...-susurró, mirando hacia la dirección donde estaba el anterior nombrado.
-¿No qué?-cuestioné, no iba a dejar que se separen definitivamente-no me vayas a decir que ya no se aman porque los dos están completamente equivocados. Lastra, él te necesita, vos lo necesitas a él, ¿No te parece que es injusto que no estén juntos? ¿Vas a dejar que esa chica se meta en su relación que tanto les costó entablar? Dale decime.
-No-habló bajito.
-¿Qué? Dale Agustín-me crucé de brazos, lo estaba por empujar o llevar hasta allá.
-Que no, que no quiero perderlo por más problemas que esa chica haya ocasionado-sonreí, era justo lo que necesitaba escuchar.
-¿Entonces? ¿Qué esperas? Vaya campeón, a consolar a tu chico-lo empujé en aquella dirección. Orgulloso de mi trabajo, esperamos que funcione.
Nos llamaron para la ceremonia de premiación; primero el pasillo de honor para Talleres que hizo una excelente campaña. Luego de la entrega de medallas, y el espectáculo de Advincula, la copa estaba en nuestras manos. La que juraban ganar todos, la ganó Boca. Mis hijas se acercaron para felicitarme, son mi vida.
-Marcos-me llamó Juan Ramírez.
-¿Qué?
-Es el momento, anda-palmeó mi brazo mientras señalaba a una persona en cuestión-¿Te pensás que no te conozco? Estas haciendo tiempo, no te salvas.
-¿Y sí me dice que no?-pregunté-¿Qué hago? Me escondo debajo de una piedra, o me voy del país.
-No seas exagerado boludo, él te ama.
-¿Y sí dice que no?-pregunte nuevamente.
-La concha de tu madre Marcos, anda dale-me empujo Juan. Se dio lo que no se daba.
Me acerqué hacia Almendra, quién estaba hablando con Briasco y Rolón. Les hice una seña para que me dejaran solo junto con él, no captaron nada, volví a internarlo, nada. Suspiré, me estaba por ir.
-Oh no, vos de acá no te vas-apareció Ramírez nuevamente.
-Y pero si los otros no me hacen caso, ¿Qué culpa tengo yo?
-Deja, yo lo arreglo-manifestó acercándose a Norby-vamos.
-Pero estoy hablando ahora amor, ¿No puedo ir después?-suplicó Briasco, ¿Desde cuándo están en algo estos dos? Buenos amigos que tengo.
-No, hay algo importante que te tengo que decir y no puede esperar-tiro de su brazo-vos Estaban también, vamos.
-¿Yo porque?-Juan hizo una especie de seña que Rolón pareció captar rápidamente-ah sí, debo ir a...hablar con...alguien, nos vemos.
Almendra se dio vuelta encontrándose conmigo-Ey Hola, otra vez.
-Bien-suspiré-no pienso estirar mucho el discurso porque no sé qué saldrá de eso. Veras, yo...emm
-Boludo, estas pálido ¿Estás bien?-se preocupó, lo amo.
-No hasta que me saque este peso que tengo. Estoy en boca hace 10 meses, no me preguntes como ocurrió porque ni yo sé, desde que llegue al club y te ayudé a que no tomes la decisión que tenías en mente, nunca nos separamos. No fue problema eso, el tema es que a partir de ahí y de varios sucesos de te empecé a ver desde otra perspectiva-jugaba con mis manos, ya estaba hecho, solo faltaba decirlo.
-Ya sé, me empezaste a ver como un Mejor amigo, suelo causar eso en la gente-se rió, sin embargo yo no podía creerlo.
-¿Qué? No, así no es-negué con mi cabeza, mis expectativas se estaban yendo.
-¿Y cómo que entonces? ¿Un hermano? ¿Un primo político?-seguía riéndose.
-No Almendra no, me gustas, te amo ¿Lo podes entender?-exploté, mi respiración se volvió agitada.
-Oh-balbuceo, me quería ir.
-Perdón, no quise. Creo que no era el momento. Simplemente perdón-comencé a caminar hacia donde estaban los chicos dejándolo atrás. Que imbécil que soy por creer en lo que decían mis compañeros y sobre todo por hacerles caso.
-MARCOS-gritó el chico que acababa de romper mi corazón en 300 pedazos-¿Me dejas que te conteste al menos?
-Creo que ya dijiste todo o más bien nada. Lo entiendo, fui un tonto que confundió las cosas por completo, vos te acercaste por pura amistad y yo terminé enamorándome. Me lo merecía, este momento irá a la lista de fracasos cometidos o vividos-sonreí a medias.
-Parece que no-se volvió a reír -tendré que tomar medidas de urgencia con vos.
-¿A qué te referís con eso?-interrogué confundido.
El 32 de Boca Juniors en un rápido movimiento unió nuestros labios, al principio me costó reaccionar pero finalmente correspondí. Ese beso duró bastante, el mejor que me han dado. Nos separamos aunque nuestras miradas seguían conectadas.
-Ahora que por fin te callaste, quiero decirte que te tardaste mucho en declararte, desde hace un tiempo que pude notar tus intenciones conmigo, para ese entonces estaba loco por vos y en un momento quise hasta declararme pero me acobardé así que decidí esperar un poco más a que vos hicieras el trabajo de pensar que decir en estos momentos si no ahí sí tomaría el valor de intentarlo-lo miré atónito, sufrí más que en los penales.
-Ibas a tener que esperar sentado porque si no fuera por el plantel no hubiese hecho nada-confesé-aun así me alegro saber que esto tiene un final como corresponde, onda feliz. Los del pasado queda atrás.
-Después me contaras sobre eso, presiento que serán muy buenas historias-sonrió con burla incluida.
-Primero deberás aceptar ser mi novio y después veo si te cuento o no-rodee mis brazos sobre su cintura.
-Déjame pensarlo-fingió dudarlo-sí, acepto señor Rojo.
Volví a unir nuestros labios, cerrando una noche maravillosa. Campeones de la Copa Argentina, clasificación directa a la Copa Libertadores y me animé a declararme. Puro festejo.
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Volvió el horario habitual.
Primer One Shots Bostero, me hacía falta.
Espero les guste❤
