𝙊 𝙉 𝙀

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Asistirás a la Academia Kamome-me sobresalté, después de tanto tiempo acudiría a una escuela, eso era emocionante pero a la vez daba miedo- 

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Asistirás a la Academia Kamome-me sobresalté, después de tanto tiempo acudiría a una escuela, eso era emocionante pero a la vez daba miedo- 

A qué viene esa propuesta, madre?-respondí-

Desde los 5 años te eh estado educando en casa, pero creo que es hora de que salgas y establezcas conversaciones con chicos de tu edad, además, no es propuesta, yo ya decidí que irás a esa escuela, ahora ve a tu habitación y sigue estudiando.

Pero, la inscripción, el uniforme?, mi mochila, libros, lápices, cuándo asistiré?-pregunté rápidamente-

Tú no te preocupes de eso, ya esta solucionado, dentro de dos semanas irás-cambió su cara y volteó a verme- ya respondí tus preguntas, ahora ve y sigue estudiando-

Tú no te preocupes de eso, ya esta solucionado, dentro de dos semanas irás-cambió su cara y volteó a verme- ya respondí tus preguntas, ahora ve y sigue estudiando-

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[ L U N E S  6 : 3 0 ]

-Mi alarma estaba sonando- Qué fastidio!-dije levantándome, hoy sería mi primer día en una escuela...con personas y chicos de mi edad...aterrada, la palabra que perfectamente me describía. Me bañé y me cambié para después bajar con mi madre, que yacía sentada en la mesa esperándome-

-Un minuto tarde, lo dejaré pasar, ahora come- apagó un cronómetro y empezó a comer su ensalada-

-Madre...no tengo apetito, podrías dejarme tomar solo el licuado?-pregunté con temor, ella se había esmerado en preparar tal desayuno para que yo solo quisiera beber un licuado de fresa y retirarme, pero de verdad pensaba que con solo llevar un bocado de ensalada a mi boca haría que vomitará-

-Come.

-Sin más tuve que hacerlo, no es que tenga un problema con la comida, o al menos creo que no, pero en las mañanas no tengo apetito y comer algo "pesado" haría que vomitase. 

Termine de comer, me acerqué a la puerta para ponerme mis zapatos y sin más me fui sin despedirme. Caminé por un rato, la verdad es que la escuela no estaba lejos y en pocos minutos llegue, estaba parada enfrente de unas rejas ya abiertas, niños y niñas entrando, al igual que unos cuantos profesores, iba a entrar pero unas voces me llamaron la atención.

𝙁𝙐𝙄𝙎𝙏𝙀 𝙏ÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora