𝓒𝓐𝓟𝓘𝓣𝓤𝓛𝓞 𝓘: 𝓛𝓪 Ú𝓵𝓽𝓲𝓶𝓪 𝓣𝓸𝓻𝓶𝓮𝓷𝓽𝓪

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Era un día cualquiera, todo era normal, una joven de tan solo 16 años volvía a su casa después de un duro día de escuela.

-Mamá ya volví -Su voz sonaba sin muchos ánimos junto a un pequeño suspiro- ¿Mamá?

Cerró la puerta con cuidado y entró en aquella silenciosa habitación, parecía que no había nadie y estaba hecho todo un desastre. Observando por toda la habitación se encontró con una pequeña nota.

-Mamá ¿Acaso te volviste a ir sin avisar? Prometiste que hoy estarías- Agarró la carta y empezó a leerla- Tuve que ir a trabajar, así que, hazte tu sola la comida. jajaja- Una risa psicópata y agotada salió de sus labios- Siempre igual ¿Habrá algún día que estarás por mí, idiota? Esperaba mucho, soy idiota, debería de habérmelo imaginado.

Revolviendo su cabello desesperadamente pasó 10 minutos pensando si escribir o no a aquella mujer llamada madre. Finalmente decidida le escribió.

MAMÁ<3

Mamá, te escribo para decirte que he llegado a ser la mejor nota de clase ¿Estás orgullosa o volverás a decir que es mi deber?- 15:30

Espero que tengas un buen día hoy ¿vendrás a cenar?-15:31

Tiró su móvil con agresividad al suelo y se levantó con molestia dirigiéndose a la cocina.

-¿Debería hacer algo sencillo para comer? Mejor haré una sopa.

Agarró todos los productos necesarios y lo dejó todo preparado con el fuego encendido, ella quería quedarse tranquila allí esperando a que la comida se hiciera, pero no había pasado ni 5 minutos, que ya había sonado una notificación de su móvil.

-¿Esa mierda aún sigue viva? ¿Es un Nokia o que?

Fue al salón donde se encontraba el móvil tirado en el suelo, al levantarlo se dio cuenta de que tenía una pequeña rotura.

-Si te vas a romper al menos, rómpete bien, vaya mierda-musitó con molestia- ¿Será un mensaje de mi madre?

Encendió aquel móvil esperando un mensaje de aquella mujer que la "cuidaba" pero, lo único que se encontró fue un tic azul de sus mensajes, si, le había dejado en visto. Realmente lo único que le había notificado fue Instagram, sin embargo, lo que nunca hubiera esperado ver apareció antes sus ojos, una foto de su madre junto a otro hombre y dos niños siendo felices, se notaba que aquella foto era reciente ¿Acaso su madre la estuvo mintiendo todo este tiempo? ¿Tenía otra familia y por eso la ignoraba? Esas preguntas pasaban por su mente mientras sentía un dolor como si le clavaran mil flechas.

-Esto es inútil ja, ja, ja, ¿No podía ser al menos sincera conmigo? - La joven suspiró mientras pasaba sus manos temblorosas por su flequillo apartándolo del rostro- ¿No pude ser peor mi día?

Otra notificación sonó en su móvil, se actualizaron unos nuevos capítulos de su novela favorita, ahora al menos tendría algo con lo que entretenerse.

-Al menos algo bueno ha pasado hoy ¡¡Por fin han sacado los tres últimos capítulos de la primera temporada!!- En su rostro se mostraba alegría, realmente lo único que le hacía feliz era el anime y leer novelas asiáticas. Sin darse cuenta de que se olvidaba de importante, se sentó en el sillón y empezó a leer capítulo tras capítulo durante casi una hora.

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⏰ Última actualización: Dec 11, 2021 ⏰

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