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Blog #00: La Élite de New York.

¿Cómo inició todo? ¿Cómo es que llegamos a la Élite? ¿Que sucedió para que las instituciones que son conocidas mundialmente, existieran?

Soy Débora, su humilde servidora, me encanta documentar todo y a todos. La historia debe guardarse pero no me interesa descubrir huesos de animales extintos o momias ya más que muertas.

Me interesa la sociedad y sus problemáticas, la sociedad adolescente.

Les traeré, en pocas palabras, los acontecimientos más jugosos de nuestro instituto: el Roosevelt.

¿De qué manera empieza nuestra historia? Les daré una pista: con un obsesionado con Theodore Roosevelt.

Nuestro querido fundador fue Elijah Gavín Roosevelt Parks, creció pensando de que alguna forma compartía sangre con uno de los presidentes más importantes de la nación.

A cada persona le juraba ser un hijo no reconocido de Theodore, pero su fama no vino solo por su supuesto parentesco sino por sus acciones humanitarias y caritativas.

Venía de una familia más que acomodada, lo cual respaldaba en la posibilidad de que si fuera un hijo no reconocido del presidente. Estudió leyes en una buena universidad, su fortuna creció a medida que se destacaba ganando casos y más casos.

Hasta un punto que decidió crear cuatro academias que rindieran honor, no solo a su ejemplo a seguir, sino también a otros presidentes relevantes en la historia de América.

Muchos hablan de que inspiró los nombres de tales instituciones, en los cuatro presidentes esculpidos a granito en el monte Rushmore: George Washington, Thomas Jefferson, Abraham Lincoln y Theodore Roosevelt.

Con su inmensa fortuna, y actuando con la colaboración de muchos de sus personas allegadas, también poseedora de grandes cuentas bancarias; empezó las construcciones.

Estuvieron listas en ocho meses, tanto academias como instituciones con espacios abiertos, bibliotecas con miles de libros, canchas dónde entretenerse y personal capacitado para enseñar.

Una exorbitante cantidad de familias llegaron a inscribir a sus hijos, solo las personas más favorecidas de la sociedad podían entrar y disfrutar de lo avanzado de tales lugares.

Fundadas en 1940, abrieron sus puertas y destacaron por su participación en decenas de eventos. Prácticamente, las cuatro instituciones se hicieron populares y reconocidas de la noche a la mañana.

Para la desgracia de nuestro director fundador, años después se descubrió que su padre no era el presidente Theodore Roosevelt cómo había jurado y perjurado.

Lo consideraron un fraude, incapaz de poder dirigir instituciones de alto grado. Lejos de esconderse y evitar los chismes de la sociedad, Elijah dio declaraciones dónde se consideraba un hijo más del difunto presidente al considerarlo un digno ejemplo a seguir, siendo padre de muchas leyes progresistas y el fundador de la represa más grande del país, bautizada con su nombre.

Los comentarios maliciosos no se detuvieron pero después de la rueda de prensa, disminuyeron notablemente. Un ciudadano inspirado en las acciones de un gran presidente era todo lo que deseaban en el director de cualquier lugar.

Años después se anunció que Elijah se casaría, la identidad de la joven era desconocida hasta un día después de su regreso de luna de miel dónde se descubrió que era una sobrina de Theodore Roosevelt, tuvieron hijos que heredaron el instituto hasta el sol de hoy, dónde nuestro director: Elijah Jr es el rostro de nuestro emblemático y avanzado edificio.

Las instituciones están separadas, ubicadas en diferentes puntas del estado pero se reúnen unas cuantas veces al año con el fin de motivar e incentivar la buena interacción entre sus estudiantes.

Claramente, la escuela ha hecho cambios a medida que el tiempo ha avanzado. Desde unos cuantos años para acá la exclusividad ha flexibilizado sus barrotes, cada año se admiten nuevos ingresos cuyos apellidos no son influyentes; se les da a jóvenes de recursos no tan elevados, la oportunidad de cumplir sus sueños y llegar lejos en la vida.

A su vez la escuela ha sufrido mejoras, conservando nuestra distribución original. Cada año se hacen censos entre los órganos de cada institución para crear nuevos espacios en los cuales las nuevas generaciones se puedan desenvolver respectivamente.

Se realizan viajes escolares, existen grupos extracurriculares, presentaciones de diversas obras de teatro, participaciones en competencias a nivel estatal y nacional.

Otras reglas se han reforzado como cupos limitados en tiempos limitados, el director Elijah ha dado declaraciones y acepta que las reglas del Roosevelt no pueden romperse bajo ningún acuerdo, nadie cuenta con más o menos oportunidad de romper las leyes circulantes que hacen que la institución sea respetable.

Algo comprensible considerando la buena racha y reputación en toda la institución.

Cada academia e instituto rompe récords cada año, gana competencias, sale en muchos periódicos dentro y fuera del país, y por si fuera poco, deja en claro por qué son consideradas la Élite de New York.

¿Feliz de nacer en la alcurnia? ¿Triste por no poder crecer entre nosotros?

Este es el Instituto Roosevelt. Y esta es la Élite de New York que parece mantenerse por siempre joven en las noticias de cada día.

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Sé que no se lo esperaban, y es que cuando dije que haría esto del blog de Débora, supe que el primero tenía que ser sobre la Élite de New York: no es solo el instituto Roosevelt sino que hay otros tres, pero no serán tan importantes en esta historia.

Espero les haya gustado y aunque sea los distraiga un poco de la historia central. Disculpen si tardé en publicar, no estuve todo el día en casa. Espero tengan una buena semana, y todo les salga bien.

Las amo, un beso.

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