Capítulo 3

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Capítulo 3:

—¿Llevaremos la camioneta? –Pregunté a Kayden, notando que nos dirigíamos al mismo automóvil por el que llegamos.

—Sí, el recorrido será largo. Te llevaré, no sólo a los lugares importantes, sino que a todos. Pero primero, a tu nuevo hogar. –Contestó entrando. Aunque no nos conocíamos bien, pude distinguir un poco de emoción en su voz. La tristeza de antes ya no estaba. —Te gustará, es muy cómodo. –Aseguró cuando ya estuve sentada a su lado.

Manejó lentamente, ya que aprovechó para explicarme cómo llegar de las cabañas a, lo que él llamó, "Área Iluminada" refiriéndose a la carpa. Gracias al cielo, comprendí todo lo que me explicó. No tardamos en acercarnos a las casitas, antes de hacerlo demasiado, se detuvo a explicar.

—Tenemos treinta cabañas. –Señaló las seis filas que teníamos enfrente—Cada hilera es llamada por una letra, de la A, a la F, y es conformada por cinco viviendas. Cada cabaña, tiene un número. Por ejemplo, la primera cabaña –Apuntó a la primera de la izquierda. —es la A-1. La de la segunda fila, es la B-1 y así sucesivamente. Cada una es compartida y muy espaciosa. Somos pocos, así que cada quien la comparte con quien quiere. Tu tío no es tan estricto como el segundo jefe. Gracias a la luna.

—¿Segundo jefe? –Cuestioné mirándolo confundida.

—Oh, cierto. Que acabas de llegar. No te preocupes, te diré todo de a poco. –Hizo un movimiento con sus manos restando importancia y continuamos. —Me encanta estar afuera ¿Sabes? Pero jamás cambiaría estar en el exterior, a estar aquí con mi familia. –Compartió de pronto. Y lo que dijo a continuación, hizo que mi pecho se estrujara. —Y ahora, tú eres de la familia Iam. Creo que, si vamos a compartir tiempo, es mejor que nos llevemos bien. ¿No te parece? –Volteó brevemente a verme, con una pequeña sonrisa llena de timidez.

—Sí. Creo que tienes razón. –Solté, vergonzosamente con la voz un poco ronca. ¿Qué puedo decir? Estaba demasiado conmovida. Me callé por unos segundos pensando en qué más decir, cosa que hizo confundir a Kayden, quien emprendió un balbuceo muy urgente.

—No es... Quiero decir, yo lo que... Ah, no lo malinterpretes. No creas que lo hago sólo por obligación... Realmente me gustaría... Bueno, no comenzamos tan bien, pero Jake me hablaba de ti antes y... Ya sabes, enserio quería conocerte y que nos lleváramos bien... Luego Nieve... Rayos, creo que la he cagado por segunda vez. –Gruñó lastimosamente.

Ok. Estaba un poco más conmovida. Él quería agradarme desde antes, claro que el malentendido con Nieve no nos dio un buen inicio, pero con sus palabras, ya lo estaba consiguiendo. Por lo que, sin pensarlo, solté lo que jamás creí soltar de nuevo.

—¿Amigos?

Él me miró con sorpresa un microsegundo. Soltó aire y entre pequeñas risas de alivio, bromeó.

—Mientras no robes a Nieve. Amigos. –Aceptó, una gran sonrisa se extendió en su rostro, dejándome ver un adorable hoyuelo que se hundió en su mejilla, causándome extrema ternura.

Seguimos nuestro camino con un ambiente muy cómodo. Doblamos a la derecha. Entramos en, si no mal recuerdo, la fila D. Kayden me preguntó el nombre, para asegurarse de que hubiera entendido el orden.

Al responder correctamente, nos estacionó en la cabaña con el número tres. A un lado de la puerta se veía una plaquita con la dirección "D-3".

—Ésta es la nuestra. Recuerda, tu cabaña es la D-3. Que no se te olvide por si te llegas a perder. –Me advirtió seriamente apuntándome con su dedo índice. Al asentirle, cambió su semblante, sonriéndome nuevamente. —Bajemos. Te voy a dar el mejor tour de tu vida.

Blake | Solo en mi cabeza. [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora