El Libro de Recetas

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Narra Khira

Llagamos a casa y allí Obito y yo hicimos el amor como siempre, en todo el viaje en coche, estuvimos jugando íntimamente en secreto, porque había un chófer que podía darse cuenta de lo que hacíamos, eso lo hacía más excitante.

Al llegar era imposible contenerse, Obito me sacó del coche y a pesar de todavía le costó andar sin el bastón, me llevó en brazos para entrar en la casa, quitándonos la ropa cómo podíamos y el me lanzó a la cama para ponerse sobre mi, besándonos por todo nuestros cuerpos,

Ah! Cómo me gusta que siempre hagas cosas locas, como esos juegos en el coche, porque me excita mucho,- Le dije mientras el me acariciaba y besaba por todo el cuerpo

Mi amor, si quieres lo haremos más a menudo, lo que sea con tal de sorprendernos y excitarnos,- Me dijo mientras me daba pequeños mordiscos por todo mí cuerpo logrando enloquecerme  de puro placer

Ah! Tú siempre me excitas con sólo tocarme un poquito, no importa donde pero siempre siento lo mismo que la primera vez que cuando estuvimos juntos, - Le dije mientras noté como entraba en mí,

Tú también me vuelves loco, sabes que incluso antes de pensar en que ya te amaba, era incapaz de controlar mí cuerpo, tú sabes lo que tuve que hacer todo ese tiempo en que dormíamos juntos, desde que regresaste a mí,- Me dijo mientras yo recordaba todo lo que decía como una película de nuestra vida juntos

Yo siempre te amé y aún no me creo que haya logrado que tú me ames de esta manera, ya que no se ni como lo hice,- Le Dije

Mi amor, yo ni siquiera supe porque esperé tanto porque siempre fuiste la única que se ganó mi amor,- Me dijo mientras nos dimos la vuelta para ponerme sobre el y empezar a moverme para sentir toda su virilidad dentro de mí

Obito, ya no quiero pensar más que en disfrutar de nuestro amor y placer, ya que es lo único que me hace darme cuenta que no estoy en un sueño y este calor que hay dentro de mí cuerpo eres tú quien me lo da,- Le dije mientras yo seguía moviéndome con más ganas y pasión, ayudándome con mis manos que se sujetaban a su cuello clavando mis uñas cada vez que me resbalaba por la sudor de su piel

Argh! Khira  me encanta cuando me clavas tus garras, - Me dijo mientras noté como el me agarraba fuerte las nalgas para ayudarme a moverme hasta que llegamos al orgasmo, siguiéndole varios orgasmos más, hasta quedar agotados y dormidos.

Narra Obito

Desperté y aún era de noche pero no encontré a Khira a mí lado, yo pensé que estaba en el baño pero poco después llegó con un carrito de la cocina con comida

Hice algo de cenar, espero que esté bueno porque esa cocina es muy complicada y lo único que pude hacer era un poco de arroz y una sopa de algas, la aprendí de un libro de recetas que tenía tú abuelita, - Me dijo

Tenía varios libros de recetas pero creo que se quemaron cuando Rin incendió la casa,- Le dije mientras ella sonrió y sacó una libreta algo vieja y con la letra de mí abuela

Este no, porque es el que me dió una vez poco antes de irme a esta casa, me la dio para que os recordara un poco, creí haberla perdido cuando me fui al internado pero resulta que mí abuelo lo tenía guardado en una estantería de su despacho, no se porque lo tenía allí,- Me dijo mientras me sirvió un poco de la sopa que era parecida a la que mí abuela me hacía cuando era niño,

Sabía un poco diferente pero me gustó muchísimo al ver que Khira como siempre se esforzaba para mí, haciendo que la ame más.

Se que no sabe igual porque no encontré los condimentos exactos porque no los tenían aquí, pero quise al menos intentarlo ya que aunque vivamos en esta casa y tengamos quien nos cocine y todo, yo siempre voy a querer cuidar de ti,- Me dijo con los ojos llorosos

Está muy bueno mi amor, además que el arroz también está rico, está suave y suelto, cocinado en su punto,- Le dije

Es lo único que aprendí de mí mamá, aunque también tengo algunas recetas suyas ya que tú abuelita apuntó algunas de ellas en esta libreta, porque en alguna de ellas tiene las iniciales de ella en el título de cada una,- Me dijo

Eso está bien mi amor, se nota que mi abuela de alguna manera supo que ibas a estar conmigo para siempre y aunque te fuiste alguna vez, volviste para hacerme feliz, además que también quiso mantener el recuerdo de tu mamá para que no pierdas el legado de las dos,- Le dije mientras ella se emocionó mucho

Yo la quise mucho a pesar de que apenas he convivido mucho con ella, era como una segunda madre para mí e igual que a ti le debo mucho, ojalá que hubiera hecho algo por ella pero creo que ya lo hice haciéndote feliz,- Me dijo mientras se acercó a mí para besarme

Está bien pero ahora me apetece algo dulce de postre, - Le dije mientras ella se sentó sobre mí haciéndome notar la piel suave de su trasero en mis piernas desnudas ya que sólo llevamos dos yukatas cortos

Tengo uvas dijo mientras ella me dio un grano que tenía sujeto en su boca, haciendo que yo lo muerda haciendo que nuestros labios se rocen

Está bien pero tus labios son más dulces y más ricos,- Le dije mientras yo devoraba sus labios y lengua

Está bien a mí también me gusta más tus besos,- Me dijo mientras nuestras yukatas cayeron al suelo y ella se puso sobre mí pene rozándose en su clítoris

Yo la cargué para llevarla a la cama, para poder besar todo su cuerpo, haciendo lo que más me gusta que es hacerla gemir, con mí lengua en su intimidad

Tú cuerpo es todo lo más rico que existe,- Le dije mientras empezó a tener varios orgasmos como ya estaba esperando

Ah, está bien pero yo también quiero saborearte, - Me dijo mientras nos pusimos en la postura del 69, porque yo también disfruto sintiendo su boca y lengua por todo mí pene y testículos

Argh, vas a dejarme vacío!,- Le Dije mientras no pude contener la eyaculación

Tú también me has dejado seca y agotada con tu lengua, - Me dijo cuando nos recostamos para besarnos

Mi amor, te amo y sabes que me gusta mucho cómo cocinas y no tienes porque hacerlo igual como lo hacía mí abuela o tu madre, porque todo lo que hiciste sabía muy bien y además se nota el amor que le pones cuando lo haces por mí, además que lo que más me gusta es comerte a ti,- Le dije mientras ella parecía dormirse sobré mi pecho,

Yo también te quiero, mucho Obito,- Me dijo mientras yo sólo la miraba y acariciaba su cabello

Aliados de Amor 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora