único

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Pequeñas gotitas de lluvia empezaban a cubrir su rostro, debía de apresurarse en tomar el autobús sino quería tener un resfriado.

Eran aproximadamente las nueve de la noche y el último autobús de la ruta estaba próximo a pasar, pero siendo honesto, él no quería llegar a casa, pensó en ir a pasar la noche al departamento de Chanhee pero recordó de que hoy no estaría disponible ya que su novio iría a visitarlo, Changmin era una buena persona pero en definitiva no quería incomodarlos.  Kevin no estaba en la ciudad ya que había ido a la casa de sus padres a pasar las vacaciones ,  y Sangyeon , bueno, tenía un largo tiempo sin hablar con él , no tenía otra opción más que resignarse e ir a casa.

Saludó al conductor, pagó su boleto y un poco temeroso — gracias que no había más de dos personas en el autobus  — tomó asiento al lado de una de las ventanas.

Él realmente odiaba los días lluviosos, cosa un tanto curiosa ya que cuando era pequeño le rogaba a su madre que le dejara salir al patio y jugar en los charcos de lodo, aún si eso significa ensuciar su tan preciado impermeable de patito, en verdad extraña la época en la cual esa era su única preocupación, ahora, lo que menos quería hacer era salir en los días de lluvia, se la pasaba en su hogar debajo de sábanas y sábanas para evitar ver los rayos y escuchar los relámpagos que tanto le atemorizaban.

Además de que bueno, ese tipo de días le recordaban a ' él ', su corazón dolía cada vez que llamaba su nombre pero éste no le respondía, nunca más lo haría.

(...)

Lo observaba a lo lejos, quizás a unos seis asientos de distancia, pero eso no era un obstáculo para poder admirar su belleza, todo de él era una obra de arte de la cuál se consideraba el fan número uno, incluso estando de espaldas, esa aura tan auténtica y única seguía ahí, aunque no lucía a como lo recordaba, está vez había teñido su cabello de azul, justo como las moras que tanto le gustaban . Quizás al bajar del autobús podría observarlo de mejor forma.

Por más que quisiera acercarse a él no podía, las ganas de querer escuchar su voz , preguntarle cómo le iba y saber si su sueño de volverse un cantante se había cumplido, quizás podría parecer fácil el hecho de que él mismo buscara esa respuesta en internet pero no, las cosas no eran tan sencillas.

De verdad extrañaba tanto tenerlo entre sus brazos, y hoy estaba preocupado por esa misma razón, ¿Quién abrazaría a su bebé hasta quedarse dormido y olvidara el hecho de que había lluvia a fuera?.
Aunque siendo honesto — o más bien egoísta — no le gustaba la idea de que alguien lo reemplazara pero algo era verdad y es que, debía de continuar su vida sin él.

No podía olvidar las noches en que se quedaban hasta tarde cantando, con las luces apagadas y siendo sólo iluminados por la ciudad, aquellas noches no tenía comparación, reían, conversaban, compartían una parte de ellos mismos, incluso su novio le revelaba canciones que había escrito pensando en él, sus ojitos se llenaban de lágrimas mientras el contrario le cantaba, poemas que describirían lo feliz que era a su lado, detalles que lo hacían especial, promesas que durarían para toda la vida, aunque, no las pudieron cumplir, incluso ahora al recordar eso las ganas de llorar se apoderaban de él.

Ya había llegado a su destino por lo cuál guardo sus sentimientos para otra ocasión.

(...)

Despidiéndose del conductor abandono el autobús y se dirigió a su hogar, sus pasos iban más y más rápido ya que la lluvia se intensificó, tendría que darse una ducha al llegar.

El hecho de que sus manos estuvieran húmedas sumado a que estaban temblando hizo que las llaves se le resbalaran, torpemente las recogió y a todo prisa entró a su hogar azotando la puerta.

Tiró su mochila y abrigos al piso y se deslizó sobre ésta hasta quedar sentado en el piso.
Abrazo sus piernas y empezó a llorar , todo lo contenido lo dejó salir, ya no aguantaba más. Odiaba todo, odiaba el hecho de ya no tener a alguien quién le dijera que todo estaría bien, que le diera besitos en la cara y mimos, extrañaba a aquel chico detallista, caballeroso y suave, quién en un momento de su vida fue lo más importante para él, su mayor tesoro y su mayor orgullo.

Extrañaba poner pellizcar sus mejillas, cocinar juntos apesar de que él no era experto en ello, dios, ¿Qué se supone que debería de hacer si su alma gemela ya no estaba junto a él?, sentía un vacío inmenso dentro de él, algo que nunca se podría llenar.

Younghoon, siempre se trataría de él.

¿Por qué la vida se había encargado de arrebatarselo cuando eran tan felices?, ¿Acaso había hecho algo malo y eso era un castigo?, es que no lograba explicarse la razón de que todo haya sucedido así, tan de repente sin siquiera darle la oportunidad de despedirse, de poder agradecerle todo lo que había hecho por él, siempre se reprochaba el hecho de que, ¿Por qué no estuvo en su lugar?, aunque de nada le servía lamentarse.

Younghoon había fallecido hace un año y eso no es algo que él pudiera cambiar.
Tenía que vivir con el hecho de que no lo volvería a ver de nuevo, tan sólo quería verlo una vez más, sentir que lo tenía a él, es lo que más deseaba.

— Te necesito, ¿Podrías bajar a verme sólo soy?, sabes que le tengo miedo a los relámpagos, sólo por hoy— la voz de Jaehyun estaba quebrada y sus labios no paraban de temblar, quizás podía parecer absurdo pero está era la primera vez que intentaba 'hablar' con Younghoon , no había tenido el suficiente valor de volver a pensar en él hasta hoy, el día en que no soporto más.

(...)

Younghoon desde el otro lado de la puerta quería decirle que estaba junto a él, que no tendría que preocuparse hoy ya que él cuidaría de sus sueños, si, Younghoon haría eso aunque Jaehyun no pudiese verlo tal y cómo era.

A partir de hoy, por más oscura que fuese la noche en el cielo que cubría a Jaehyun siempre habría una estrellita brillando por y para él, para hacer que por más difícil que parezca todo siempre habrá un rayito de luz y esperanza, la luna y las estrellas serían los acompañantes de Jaehyun en las noches de lluvia, en las noches de cansancio, Younghoon siempre sería el hombro en el que Jaehyun se pudiese recargar, en esta vida, y en la próxima.

noche blanca ; bbangmilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora