Hug ♡ [HANKISA]

Parte unica

Hanma necesitaba un abrazo, pero no de cualquier persona, quería que se lo de Kisaki Tetta, el chico que con su inteligencia y carácter le había atraído y conquistado desde el momento en el que se conocieron. Por lo cual se le había ocurrido la brillante y razonable idea de fingir que estaba pasando por un periodo de decaimiento y tristeza.

...

Hanma estaba esperando que Kisaki saliera de su instituto. Lo vió salir por el portón y apenas sus ojos ámbar se fijaron en el de lentes quiso correr hacia él, pero se abstuvo para poder seguir con su maravilloso plan.

Kisaki se le acercó y los dos caminaron a la par en dirección al departamento del más bajo, tenían que ordenar algunas ideas para poder tomar el control de la Toman.

Iban caminando en total silencio, algo extraño siendo el de manos tatuadas un hablador de primera.

–Hanma, estás muy callado ¿que mierda tienes?– Kisaki miró a su acompañante de reojo para captar alguna mueca o señal extraña que le diga lo que le pasa. Para su sorpresa lo notaba cabizbajo y con un aire deprimido, eso no es común en él.

Shuji sintió una pequeña corriente en su espalda, tenía la atención de Kisaki, iba por buen camino para cumplir su objetivo.

–Yo no creo poder seguir con tu plan de destruir Toman– Hanma habló mientras seguían caminando sin dirigirle la mirada a Kisaki.

Kisaki se detuvo.

–¿De que estás hablando?– preguntó Kisaki con un pequeño destello de enojo e incertidumbre en sus ojos.

Hanma paró sus pasos y lo miró.

–Lo que oíste, ya no quiero seguir... A menos que-

–Para. No juegues conmigo, Hanma, sabes muy bien que eres solo un peón y puedo reemplazarte en cualquier momento. Suelta rápido lo que quieres y si no es una estupidez lo tomaré en cuenta– Kisaki lo interrumpió, ya sabía de que trataba esto, Hanma solo estaba haciendo una de sus jugarretas. Aun que por un pequeño lapso de tiempo se asustó por las palabras del más alto, no podía permitirse perder a su herramienta más preciada.

–Un abrazo– soltó Hanma.

Silencio total.

–¿Que dijiste?– le miró Kisaki sin entender a qué se refería.

–Un abrazo tuyo y pongo toda mi atención en el plan.

De nuevo silencio.

Kisaki lo tomó del antebrazo, apresuró sus pasos y se dirigían rápidamente hacia su departamento que se encontraba a una cuadra de distancia.

...

Al estar frente a la puerta el de lentes la abrió y entró jalando del más alto, se aseguró de cerrar la puerta principal y lo continuó llevando hasta la sala de estar. Una vez ahí lo plantó frente a él y retrocedió unos pasos para mantener distancia.

–¿Acaso estás enfermo? ¿Por qué me pides algo como eso?– le preguntó Kisaki al hombre alto delante suyo.

–Así es, estoy enfermo, me encuentro tan mal que en cualquier momento podría caer muerto, pero un abrazo tuyo me salvaría totalmente.– dramatizó Hanma inclinándose hacia un lado con la cara más triste que pudo colocar, aun que no funcionó de mucho porque su sonrisa traviesa era difícil de borrar.

Kisaki lo miró fijamente a los ojos, pero Hanma no le regresaba la mirada.

Tal vez cumplir el capricho de su subordinado no era mala idea. Y Con eso en mente se acercó lentamente al más alto, le tomó unos cuantos pasos para estar lo suficientemente cerca como para poder pasar sus brazos al rededor del cuerpo de Hanma y así lo hizo; su cabeza quedó en el pecho del mayor por la clara diferencia de estatura. El de tatuajes le devolvió el abrazo inmediatamente y lo pegó más a él, apoyó su cabeza en la de Kisaki y al estar más cerca pudo respirar su aroma.

El abrazo era tan perfecto como Hanma lo había imaginado, cálido y reconfortante. Y así se quedaron durante unos minutos, hasta que el de lentes le dió pequeñas palmadas en la espalda.

–Espero que con esto puedas sentirte mejor y dejar de distraerte, necesito el cien por ciento de tu atención en el plan, y en mi– susurró las últimas palabras y se separó de Shuji dirigiendo sus pasos a su habitación sin voltear a verle con tal de que no note su nerviosismo y bochorno.

Hanma se sintió en el cielo, un abrazo lo tenía en las nubes, no podía ni imaginar como lo haría sentir otras cosas que pudiera hacer con el rubio.

–¡Hanma, ven aquí!– Kisaki le llamó aún desde su dormitorio.

Tenían tanto que planear después de lo sucedido en el Halloween sangriento, pero eso no era algo que le preocupara a Hanma. Él ahora tenía otros planes y un nuevo objetivo.

Conseguir un beso de Kisaki.

–¡Ahora voy!~ ♡.

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Tenía esta idea en borradores y la inspiración me pegó de golpe para terminarla, no pegué ojo hasta las 6 de la mañana HAJJSJS pero valió la pena pq me gustó el resultado.
Un amigo me dijo q el Hanma q escribí parece perrito, honestamente siento q así actúa con Kisaki HJQJWKWJW

Espero les haya gustado💞
Si ven algún error no duden en decirme, se los agradecería mucho.