Una aventura más (Finn y tú)

Capitulo 19

Narra Finn:

Entramos a la cueva y yo empecé a analizar todo y vi al monstruo azul: era grande, tan grande que era la mitad del tamaño de la cueva, tenía un solo ojo y un cabello largo, tan largo que lo ocupaba para sentarse en el, y de ropa tenía puesto un short, estaba sin camisa y se veía musculoso. Al parecer estaba dormido. ¿Mencione qué tiene un cabello muy largo y bonito? Bueno, tiene un cabello largo y bonito, pero no tan bonito como el mío. 

A su lado derecho estaba otra puerta.

- Si pasamos con cuidado el lago, podremos pasar al siguiente nivel, al parecer el que tenía que cuidar tomo su siesta de belleza.- Comentó ____ riendo a un volumen bajo.- Además, el grosor del lago es delgado, si brincamos pasamos sin problemas.- Y cuando menos me había dado cuenta, ella ya estaba tomando impulso para correr y saltar y vi como ella saltaba y apenas y había logrado cruzarlo, a lo que por el gran salto hizo mucho ruido por el eco, ambos volteamos a ver al monstruo pero esté solamente se acostó en el piso.- Casi... jiji, vamos Finn yo te atrapo.

- Vamoos.- Me hice para atrás para poder tomar impulso, corrí y brinque al igual que ella, pero casi me caigo y ella me alcanzó a jalar de la camisa a lo que me sonroje por que quedamos cara a cara. 

- Te atrape rubio.- Me sonrió y me soltó.- Bueno vámonos.- Ella me tomó de la mano y caminamos entre todas las criaturas.

- Son tan diminutas, y son tan tiernas.- Me agaché y tomé una.- Oww, que tierna eres, te podría comer a besos.- Dije a la pequeña criatura la cual al parecer se espantó y soltó un pequeño grito, todas las demás criaturas gritaron e hicieron mucho eco, y provocó que los picos que están hasta arriba empezaran a temblar, y una de ellas cayó muy cerca del monstruo.

- ¿¡Quién me ha despertado de mi siesta de belleza!?- Se levantó y vi a las pequeñas criaturas que señalaron su cabello, que fue cortado por la piedra.-¡NOOOOOO! Mi preciado cabello- Tomó su cabello, y como en Rapunzel el vio triste todo su largo cabello cortado. Lo ví y la piedra había dejado su cabello a la altura de sus hombros, y lo peor es que estaba mal cortado.- ¿QUIÉN FUE?.- Y ahora todos me señalaron.- ¡Tú estás muerto para mi!- Se hinco y estiro su brazo para tomarme.

- Ay mamita- Dije antes de que me tomara en su brazo y me acercara a él.

- ¡Oye grandulón! ¿Puedes bajar a mi novio por favor?- Exclamó ________.

-¿Cómo quieres que lo baje si me arruino mi cabello? Nunca me lo había cortado por que me gusta mucho tenerlo largo ¡Llevo más de 100 años cuidándolo porque así soy la envidia al gimnasio que voy!.

- Bueno, entiendo que te enojaras, yo también me enojaría mucho si alguien llega y me corta mi cabello, es más también me pondría así como tú.

- ¿Vees? Entonces sí estoy en lo correcto- A lo que apretó su mano aplastándome más.

- No me estás ayudando mucho _______.- Dije sin aire.

- Nooo lo aplastees, mira ¿Si te arreglo tu cabello y te lo dejo mas lindo  dejas ir a mi novio?.- Dijo _______-

- Si no lo haces entonces a los dos les cortaré el cabello como yo quiera sí?

- Esta  bien.- Ella camino a donde estaba el gigante y él le estiro la otra mano y la puso en su hombro.- Que bueno que la Dulce Princesa me dio esta espada, tiene buen filo y podré arreglarte el cabello.

Después de casi una hora por fin terminó, dejando el cabello perfectamente cortado y un poco más arriba de los hombros, su cabello incluso brillaba mas.

- ¿Ves? te dije que iba a quedar muy bonito tu cabello.

- Eres una gran estilista, me encanto mi cabello, incluso es más fácil de mover mi cabeza. 

- De nada, ahora puedes soltar a mi novio por favor?

- Claro claro, me gustó mucho mi corte.- Me bajo y por fin pude respirar bien, me quedé acostado en el piso.

- Ay por dios ¿Estas bien Finn?.- _____ se agacho para verme

- Sip, solamente deja respiro.

- Disculpe señor gigante ¿Por donde podemos salir?.

- Por la puertita, pero está un laberinto y al final salen en otra cueva pero está vez ya es en la superficie, y por el fantástico corte que me hizo ella, los cruzaré en el laberinto con mi mano, suban.- Nos extendió la mano y los dos subimos, y el solamente subió sus dedos como una pared. Nos sentamos en la palma y el paso su mano por la pequeña puerta a una velocidad muy rápida, tan rápido que destruía todo, pasamos por el laberinto y rompiendo todo, hasta que llegamos al final y se detuvo la mano. Los dos bajamos de la mano y _______ abrazó a un dedo del gigante.

- Muchas gracias, fue divertido cortarte el cabello.- Lo soltó y la mano se fue. Al final de la cueva había una luz, vi a _______.

- Corre, que no me alcanzas.- Y en cuanto lo dije corrí como si no hubiera un mañana.

- ¡No es justo tú si tienes condición física y yo no!.- Voltee a verla y venía corriendo detrás de mi.

Salí más rápido de la cueva, y ya era de noche, salimos del lado de un bosque. Ví una piedra que estaba al lado de la cueva y lo que hice fue esconderme detrás de ella para espantar a ______.

- ¡Finn! ¡Donde estás!.- Me asome con cuidado y la vi, que me buscaba entre los árboles.- ¡Finn!- Caminé con cuidado y cuando estaba detrás de ella, salte en su espalda.

-¡Buuuuu!

- ¡AAAAAAAH!- Gritó, a lo que empecé a reír.- Me espantaste Finn.- Ella también comenzó a reír, me empujo y empezó a correr entre el bosque.- Vamos lento, atrápame.- Gritó.

- No me desafies _______.- Empecé a correr detrás de ella. Pasaba entree los rayos de la luna, y escuchaba su risa, corríamos sin dirección.

Ella corrió hasta una zona de flores donde se tropezó y cayó riendo entre todas las flores. Me acosté a un lado de ella.

- Nunca... había... corrido... tanto...- Dijo entre suspiros.

- Te vas acostumbrar bonita.

Ella controlo su respiración y empezó a reír de nuevo, y yo estaba hipnotizado con su risa y lo bonita que se veía a los rayos de la luna.

- Te ves muy bonita cuando ríes.- Ella me vió y su risa se calmó, para dar paso a un sonrojo.

- Gr-gracias Finn.

Junté nuestras manos y los dos nos vimos aún más sonrojados. Ella vió el cielo, observando la luna, y yo hice lo mismo.

- Cuando no puedo dormir me gusta ver la luna, me calma mucho poder verla rodeada de tantas estrellas, y es que esa misma sensación tengo cuando te veo ______, eres tan bonita, pareciera que tú y la luna son la misma.- Ella me vio y puso su mano derecha en mi cachete, a lo que yo la puse la mía sobre de ella. Me acerque aún más y su cabello tenía pétalos, y unas cuantas flores. Ambos nos acercamos y juntamos nuestras cabezas, recargándonos en ellas, ambos con los ojos cerrados.