KÄTHARINA [+21]✔️

Capitulo 31

Tiziano

MAKSYM BOSS

Abro los ojos de golpe sintiendo como el oxígeno regresa a mi cuerpo. Sujeto mi pecho con fuerza repasando el lugar donde entró la bala el cual ahora está cubierto por una pequeña venda blanca adherida a la piel de mi pectoral.

¡Me disparó! ¡Kätharina me disparó! La sangre se me sube a la cabeza, la ira y el dolor al recordar la peor traición de mi vida me obliga a gritar con los ojos llenos de lágrimas. Ningún maldito golpe, ni puñalada en la vida me ha causado tanto dolor como esto.

Las puertas del dormitorio se abren dando paso a mi hermano que se acerca apresurado cuando ve que comienzo a quitarme los cables que están conectados a mi cuerpo.

—Estás loco, no puedes quitarte eso ¡Maldición! —intenta detenerme pero le doy un empujón continuando con lo mío hasta que logro levantarme pero mis piernas no soportan mi peso. —Maksym calmate.

—¡No me jodas Tiziano! ¡La voy a asesinar!

—De aquí no sales. —advierte esta vez ganando en fuerza y forzando a regresar a la cama. —Danella te explicara todo

—¡No me provoques Adkin porque no me conoces y esa maldita no los usará para impedir que regrese! —gruño sin poder dejar de llorar como un jodido imbécil.

Mi hermano me observa en silencio hasta que finalmente se acerca y me da un abrazo que rehusó a recibir luchando porque me libere pero no lo logró. Termino llorando y gritando cubriendo mi rostro mientras Adkin me sostiene por varios minutos.

—Estás conmigo, tu familia Maksym. —habla serio.

Niego y dejó el drama respirando con dificultad dejando que me acomode de nuevo en la cama justo como me desperté. ¿Por qué lo hizo? No esa no es la pregunta la verdadera pregunta es ¿Porque confie? Su hermano tenia razon al decir que un puto coño me doblego pero Katharina esta lejos de conocer al demonio de nombre Maksym Boss. Aquel demonio que estaba durmiendo porque mis malditos sentimientos lo encarcelaron, aquel que no quería mostrarle para que no huyera pero olvidé que estaba jugando con la hija del diablo.

—¿Qué sabes tú, Adkin? —pregunto en tono bajo sin mirarlo.

—Katharina le pidió a Danella un favor. Que te mostremos que tu vida es aquí con nosotros tu familia y no en ese infierno. Así que llegaste aquí hace dos meses con una enfermera que ella envió para volver a la vía luego de que te disparo.

—En toda mi vida solo he recibido dos balas. Una en el brazo para protegerla y esta —le doy una mirada fija encontrarme con sus ojos verdes en total preocupación— ¿Sabes porque pudo dispararme? Porque la deje acercarse demasiado tanto que presiono el gatillo a centímetros de mi corazón. Pero cometió el mismo error de su hermano al no tener buena puntería y darme donde debía.

—Ella no lo hizo por falta de puntería sino porque no quiso. —La voz de Danella resuena desde la puerta. Me observa con seriedad,

—Katharina Zakharova es capaz de engañar a quien sea, incluida tu.

—Katharina hizo esto por amor. —camina hasta quedar al lado de su marido sujetando sus manos pero con su atención en mí— Ella quiere que tengas otra vida que seas feliz sin temor a que nadie te clave una bala en la cabeza.

—Ella lo hizo porque quiere el poder solo para ella. Esa mujer no conoce el amor, ni la compasión.

—Maksym yo hablé con ella, yo reconozco cuando una persona es sincera o no. Ella te ama y su manera de demostrarlo fue dejándote ir. Porque prefiero renunciar a ti con tal de que tengas la vida que mereces.