Enamórame (2° SAI)

Capítulo 17.

Nunca odié estar a miles de kilómetros de casa, mi viaje que sólo iba a durar una semana se convirtió en quince días en París trabajando. Sólo quería volver a Chicago por él. Extrañaba sobre manera a Julián y me hace mucha falta.

Que tonta me he vuelto en estos últimos meses, pero la culpa de todo esto la tiene el hombre de intensos ojos oscuros que sin esperarlo había armado cada pieza de mi corazón roto.

Ahora mi tonto corazón le pertenecía a mi romántico novio.

Estaba a nada de aterrizar en Chicago, moría por salir del aeropuerto y correr a sus brazos.

Sonríe como una boba enamorada al reconocer al hombre que me esperaba con un gran cartel.

"Te extrañe, novia linda "

Dejé de lado mi equipaje y corrí como una loca a sus brazos donde el no perdió el tiempo en abrazarme fuertemente.

Ambos nos habíamos extrañado demasiado.

— Te eché mucho de menos — murmuro sobre sus labios.

Él levanta mi vista y planta un pequeño beso en mi boca. — Casi pierdo la cabeza estos días sin ti — susurra en mis labios.

Niego divertida y junto nuestras bocas en un beso lleno de muchas sensaciones difíciles de explicar, sólo ahora quería perderme en la boca de mi novio.

¡Lo había extrañado!

Luego de nuestro demostrativo reencuentro entrelazamos nuestras manos para dirigirnos a su auto.

— ¿Y tú asistente? — inquiere mientras carga mis maletas.

— Al parecer necesitaba tiempo para pensar en su vida, dice que encontró al amor de su vida — suelto divertida. — En dos semanas lo tenemos de vuelta — aseguro conociendo muy bien al loco y obseso del trabajo que es Josh.

— Pensé que tenía algo con Kevin — suelta confundido.

— Creo que ahí pasa muchas cosas, pero son muy tontos en no darse cuenta para mi Josh aprovechó el momento para pensar en todo esto a solas — acoto.

— A veces es más fácil jugarse por amor que pensar lo que puede llegar a pasar si no lo intentes — dice envolviendo sus brazos a mi cintura. — Te extrañé como un loco — repite al estrecharme de nuevo entre sus brazos.

Sonrío como una tonta mientras envuelvo mis brazos en su cuello. — Te extrañé demasiado, lindo — ambos volvemos a juntar nuestras bocas en un intenso beso que se vuelve algo rudo y con señales de querer seguir.

El ruido de su celular nos obliga a separarnos, aunque no queremos.

— Rubia espero que sea algo muy importante — gruñe molesto. — ¡Qué! —grita retumbando toda su voz en el estacionamiento. — Ya estoy por allá, ese hijo de puta no puede ganarnos — sentencia tenso. — Esta bien le mando tus saludos — rueda los ojos sonriendo.

— ¿Todo bien? — consulto preocupada.

Él suspira. — Si, solo un juicio bastante jodido nos tiene de los nervios y más si el abogado de la otra parte acaba de encontrar un supuesto testigo que nunca había aparecido — todo su cuerpo esta tenso mientras me cuenta su problema.

— Se que te irá bien, eres el mejor abogado de Chicago y con la loca de Izzy harán de las suyas ganando ese juicio — aseguro apoyando.

Julián e Isabel se había vuelto un dúo letal en los tribunales.

— Izzy te manda saludos — suelta abriendo la puerta de su auto para que suba.

— Más tarde la voy a llamar — afirmo necesito juntarme con mis amigas para hablar de miles de cosas que me está pasando en este momento.