❯ T R E I N T A y T R E S

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「 𝙴𝚜𝚝𝚎𝚏𝚊𝚗í𝚊 」 ; 🍒

Me sentía nerviosa, mire como Sebastián terminaba de meter las últimas maletas en la cajuela de su auto. ¿ si quiera en verdad estaba lista para conocer a su familia? , no lo se, pero si se que en parte, estoy haciendo esto por complacerlo a el.

El me dedica una sonrisa y se que es momento de que ambos tomemos camino a casa de su familia, soltando un suspiro silencioso me doy prisa y subo a donde es mi lugar comúnmente.

Sebastián sube unos segundos después, como siempre enciende su estéreo y su playlist se comienza a a producir. Antes era extraño, pero ahora parece que ya me acostumbre a la música de Sebastián.

El conduce y mueve la cabeza de un lado a otro disfrutando " Bussines " De tiesto. Sonrió, no soy tan fan de la música electrónica, pero repito, me he acostumbrado por el.

Así es como inicia el camino en carretera hacia Aguascalientes, en verdad me pone mal el pensar que no sea bien recibida. Sandra dijo que es normal, que ella también había sentido esos nervios cuando Jesús le presentó a su familia.

Recargo mi cabeza en la ventana que esta cerrada, pues a Sebastián le gusta el aire acondicionado cuando va por carretera.

Me dejó sumergir en cada uno de mis pensamientos, estos días Sebastián a estado algo ocupado con las cosas de su trabajo. Hablando de eso, he Tratado de buscar algo que se acomode a mis horarios, pues es solo por la noche cuando puedo estar verdaderamente con Sebastián.

Pero aunque esta ciudad es enorme, simplemente no hay algo para mi. Soy feliz compartiendo mi vida con Sebastián, pero siento que no encajó para nada en una vida de citadina.

No se por cuanto tiempo me quedo pensando, analizando todo y viendo prácticamente a la nada. Apesar de tener un paisaje frente a mi, no logró verlo con atención ni apreciar lo lindo que es.

La mano de Sebastián acaricia mi cabello suelto y es cuando me doy cuenta de que seguramente, estaba hablándome y yo no puse atención por estar pensando en mi. Observo frente a mi y me doy cuenta de que estamos en el tráfico.

- perdón, amor, ¿ me estabas diciendo algo? - pregunto, el asiente levemente.

Sebastián hace una mueca y baja el volúmen de la música, se acomoda un poco y me observa.

- Te decía que adelante hay una gasolinera, por si quieres ir al baño o comprar algo para ir comiendo en el camino - comenta por segunda ocasión

- Ah si, agua tal vez - Sebastián asiente y la fila de auto frente a nosotros avanza, segundos después el también.

Justo como Sebastián lo dice, unos cuantos metros hay una gasolinera y el se detiene a cargar su auto.

Bajo de este para ir y comprar algo en la tienda de autoservicio.

- ¿ necesitas dinero? - pregunta sacando su billetera de su pantalón, niego inmediatamente

- No sebas, estoy bien.

Estaba por renegar pero me doy media vuelta y camino hasta aquella tienda, entró y tomó el camino entre los pasillos. Tomó algunas frituras, dulces, refrescos y finalmente voy a a caja para pagar.

Me siento estúpida, intento no verme sería o incómoda en este viaje, pero la inseguridad abunda en mi ser justo ahora. Pague lo que era en todo lo que tome y volví al auto, Sebastián ya estaba al otro lado casi a la salida de la gasolinera para poder irnos.

Camine hasta allí y una vez frente al auto, abri la puerta y me subi. Sebastián estaba enviando algunos mensajes o algo así, yo le límite a dejar la Bolsa con las cosas sobre mis piernas y ponerme el cinturón de Seguridad.

➤ V E L E R O  「 Sebastián Córdova 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora