16. Gruñido.

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¡Hola mis bonitos lectores! Este es uno de mis capítulos favoritos, acá partimos con turbo en la relación de estos dos, ya cacharán porque pero hoy y mañana se nos vienen intensamente lindos. Perdón por la forma de partir el capítulo, ya veo que tengo traumados más de alguno con el tema, pero me quieres así, yo sé. Nos vamos a Cape Cod.

¡Espero que les guste!

¡Espero que les guste!

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—Ash... —El aludido se da vueltas, han quedado agotados luego de correr hacia el lago de Cape Cod, por eso se han recostado bajo la sombra de un alerce, con prendas ligeras, con el corazón sangrante en un sentimiento indescifrable cuya nitidez es evidente—. ¿Crees en las parejas destinadas?

—¿Parejas destinadas? —Se hallan realmente cerca, lo suficiente para que las esponjosas orejas de Eiji le hagan cosquillas en sus propios cabellos, con la cola meciéndose al son de la brisa, presionando la hierba en una ternura infantil—. No estoy muy familiarizado con los términos. —Si bien, Griffin solía hablarle de la leyenda, Dino no ha sido el más benevolente durante su infancia.

—¿Cómo explicarlo?

—Inténtalo, ¿no se supone que la vejez te hace sabio, onii-chan? —Se burla, permitiendo que la bruma de feromonas los envuelvan, adora el aroma de este omega, le es increíblemente familiar y adictivo, delicioso si tiene que definirlo todavía más—. ¿Acaso debo anotarte las cosas como a Max?

—¡Max no es tan viejo! —Chilla, sin moverse ni levantarse un solo centímetro, sus pies descalzos están jugueteando por encima de las flores, el clima es agradable—. Deja de tratarlo así, haces que se acompleje con su edad, no tiene ochenta años.

—Es un anciano, igual que Jessica e Ibe. —Eiji bufa.

—¿Cualquier persona más grande que tú es un anciano?

—Vaya, lo has entendido bien para tu edad. —Le guiña el ojo divertido, ambos se voltean, quedando rostro frente a rostro por encima de la brisa, su flequillo se enreda entre sus pestañas, sus garras se relajan contra la tierra, es una tontería, sabe, sin embargo, jura que la calidez de este conejo lo ha atravesado entero—. ¿Qué es un destinado, entonces?

—Se dice que ocurre entre un alfa y un omega. —Empieza, arrugando la nariz erráticamente, como si le fuese difícil pensar en las oraciones correctas para describir esa leyenda—. Es algo así como una pareja hecha a la medida, se supone que son compatibles desde alma hasta cuerpo y que es fácil detectarlas por las feromonas. —Aslan se encoje en su camiseta, es roñosa, vieja y blanca, posee un logo estúpido acerca de que ama a Nueva York.

—Ya veo. —No le interesa siendo sincero.

—Yo creo que tú eres mi pareja destinada, Ash. —O al menos, hasta este momento.

—¡¿Qué?! —Se ha puesto rojo hasta la nariz, su cola de lince se mece con violencia contra la hierba, arrancando cada brote iluso en el camino, el corazón le ha estallado en la garganta, la mente le corre para atrás—. ¿Nosotros dos?

Release the bunny [Omegacember]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora