El regalo indicado

111 18 18
                                    

Navidad 2021

Una escapada a patinar

Ya hacía frío en Chicago, pronto empezaría a nevar, Candy y Albert pasarían juntos la navidad por segunda ocasión, y a diferencia de la primera que si bien fue afectuosa, no tenía el acercamiento que ahora habían desarrollado en el largo tiempo de convivencia. 

Albert deseaba darle un regalo que ella disfrutará, pero no sabía cuál sería el apropiado, además  existía el problema que el dinero extra del bono anual, solo alcanzaría para pagar los servicios, surtir la despensa y comprarse un poco de ropa  general que ya le urgía, por lo menos pagando  los gastos mayores, ella también podría comprar algo de ropa, ambos ya tenían su vestuario en situación crítica y urgía la ropa de invierno. 

El frío ya había comenzado a propiciar las pistas de patinaje en múltiples parques. 

Candy, en su camino de regresó al magnolia pasaba por uno de ellos, aún no estaban óptimos para su uso, pero pronto se podrá ver la multitud deslizarse con gracia, con elegancia, con energía, y con miedo  de tener una vergonzosa caída, la cuál  resulta divertida en alguien más pero no en uno mismo.   Recordando esa sensación de deslizarse sobre la pista, como si en cualquier momento le salieran alas para elevarse totalmente, se propuso buscar sus patines por si necesitaban algún ajuste y tenerlos listos con tiempo.

En cuanto llegó al departamento saludó a Albert que ya tenía un par de horas de haber llegado y terminaba de preparar la cena, le respondió el saludo afirmando que en diez minutos estaría la cena, no se escuchó queja de "¿Tanto?", Ni un, ” estoy muriendo de hambre", lo cual le pareció alarmante, al asomarse no la vio ayudando a poner los cubiertos, ni en el sofá gruñendo contra  Ericka y Mayra, (las encargadas de surtir las medicinas) que le hayan discutido alguna situación o medicamento.

Redujo la flama de la estufa para ir en su búsqueda, sentía el corazón oprimido de pensar que  alguna noticia sobre cierto actor, la haya derrumbado nuevamente.

Se acercó directo a la cama y veía la litera vacía, de repente no entendió que fue a buscar allí,  pero enseguida lo recordó quedando desconcertado, estaba seguro de haberla escuchado llegar y hasta saludarlo, un ruido a sus espaldas le confirmo que no estaba solo, al voltear la pudo ver, bueno estando en búsqueda de algo dentro del armario lograba ver la mitad de ella que estaba agachada, su mitad inferior que se agitaba  levemente con su inspección lo ponía un poco incómodo al reaccionar ante esa vista, optó por regresar a la cocina, ver que no estaba en un mar de llanto lo tranquilizaba,  corría antes de no poder dar ni un paso por efectos visuales. 

Ya servía la cena y la rubia no aparecía, se asomo está vez con precaución, afortunadamente estaba sentada en el piso, tenía un gran gesto de decepción.

La cena está servida, ¿Hay algún problema?¿Pasó algo en el hospital?.


Lo de siempre, solo que hoy esa Ericka me discutía sobre la vitamina c para los niños diluida en jugo de naranja, ella alega que sin diluir, y yo que funciona igual diluida.


Pero no es eso lo que te tiene así.


No, tú  preguntaste qué pasó en el hospital, yo te contesté eso, debes ser más específico Albert.


Está bien, ¿Que es lo que te tiene así?


¿Así como?


Candy…


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 17, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Una Escapada a Patinar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora