CAPITULO 4

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21 de Julio, 2025

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21 de Julio, 2025.

Ángel

Mis padres siempre me han dicho que mi tranquilidad llega hacer aterradora ya que no saben lo que mi mente está analizando, mamá me concidera el más observador a diferencia de mis hermanos, aunque cada uno tenemos un rasgo que nos caracteriza, tenemos más cosas en comunes de lo que nos gustaría.

Mi mirada se encuentra en el libro que tengo en mis manos, que queda en segundo plano al momento que veo a Adam cruzar la puerta de mi habitación, un suspiro sale de mi boca cerrando el libro, dejándolo en la mesa.

Sus ojos grises me miran de arriba hacia abajo, formando una sonrisa divertida en su rostro.

–Se supone que Andrew es el aburrido de lo dos, dónde quedó tu diversión hermano?– mis ojos ruedan ante su comentario, me encamino hacia la puerta antes de emitir un sonido.

–Madura de una vez quieres, mamá nos avisó que este fin de semana nuestros padres dejarán la empresa a nuestro nombre– su sonrisa se hace aún mas grande confirmandome que ya sabía.

–Por que crees que estoy celebrando, me siento tan jodidamente feliz– mi ceja se alza ante su comentario.

–Vas a tener más responsabilidades, aunque los tres seremos los dueños, sabemos que Andrew estará al frente de todo, tú tendrás más trabajo acuérdate que decidiste estudiar derecho y bueno yo, creo que tendré todo tranquilo– su sonrisa se borra de inmediato ante mis palabras.

–Eres un aburrido, tenías que recordarme cuál es mi trabajo, déjame disfrutar unos días– salgo de mi habitación tratando de ignorarlo pero me sigue mientras bajo las escaleras.

Cada uno tiene su propio departamento que fue obsequio de nuestros padres cuando terminamos la carrera, pero siempre habíamos vivido juntos, éramos inseparables, los mejor amigos que el jodido mundo pudiera tener, así que entre los tres compramos una casa a media hora de la de nuestros padres.

Adam sigue detrás de mi como un crío y no se que me molesta más el hecho de que me siga o que se mantenga callado con un estúpida sonrisa en su rostro.

–Habla, algo traes entre manos– su sonrisa se hace más grande pareciendo el gato de Alicia.

–Mis padres han hablado mucho de una tal Astrid, que mamá ya la conoció y quedó encantada con ella– asiento analizando lo que está tratando de decir.

–Si crees que vas a follartela estás equivocada, si a nuestros padres les agrada esa chica no dejarán que te acerques a ella– rueda sus ojos y su sonrisa se borra pasando a una más seria.

–No es mi intención llevarla a mi cama, al menos no ahorita, y presiento que ella estará trabajando para nosotros tres, solo digo que podíamos divertirnos como antes– si bien aún no conozco a la chica, me causa curiosidad las veces que eh escuchado a mis padres hablar de ella, y que mamá la allá aceptado solo lo hace más interesante ya que es muy selectiva con las mujeres que entra en su círculo de amistad.

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