34: Navideño

1.8K 206 46
                                    

Los cascabeles eran agitados por el rubio creando ese conocido y agudo sonido creado por el choque de las dos pequeñas esferas metálicas, la interior y la exterior plateada.
El rubio sonriendo daba vueltas y vueltas con un montón de esos pequeños artefactos de percusión atados a sus muñecas creando una fuerte melodía, un encantador ambiente navideño.

Cuando Zoro llegó ya estaba oscuro afuera, sonrió al ver la casa de su rubio, había tardado como media hora más en llegar de la hora acordada debido a que los caminos de la casa de Robin a la de Sanji se habían movido, pero por fin estaba ahí.
Sonrió al ver las luces prendidas de la casa de su rubio, era algo innecesario ya que de todos modos no veía, pero le parecía tierno que Sanji no hubiera dejado la costumbre de encenderlas.

Zoro se bajó de su auto y fue a la cajuela por unas cuantas cajas de cosas uqe había llevado para decorar la casa de Sanji, entre ellas esferas de multiples tamaños y colores y una encantadora corona para la entrada, quizás era algo tarde para decorar pero es que Sanji no tenía pensado festejar Navidad ese año.

Abrio la puerta pues el espadachín tenía llave, después de irrumpir la vez anterior, Sanji le había dado una copia; al entrar no pudo hacer nada más que reprimir su carcajada, Sanji con su "suéter feo" o "sauter navideño" de un reno con su nariz roja, era verde y tenía luces de colores en las mangas, pero eso no era lo mejor, quizas era que Sanji usaba un gorro de Santa Claus y estaba sentadito en el suelo jugando con los cascabeles todavía, o tal vez era el hecho de que estaba cubierto de series de luces navideñas enredadas, parecía que había tenido unos cuantos problemas desde que empezó sacando los adornos.

-¿Necesitas ayuda? - Preguntó Zoro sonriendo y dejando las cajas en el suelo.

-Ah jeje... Hola Zorito.- Sonrió con la inocencia de un niño. - No te preocupes, todo está de maravilla. - Sacudió sus manos para que los cascabeles sonarán haciendo reír un poco a Zoro. - ¿Podrías pasarme ese vaso de allá? - Señaló con su cabeza un mueble y Zoro le dio lo que quería.

-¿Qué es?

-... Alcohol.

-Ajá si, como eres un ebrio de mierda. - Dijo Zoro con sarcasmo mientras sonreía viendo a su dulce novio beber de esa cosa, fuera lo que fuera.

-Es... Lechita de chocolate... - Tomó haciendo un puchero.

-Eres tan dulce. - Sonrió Zoro, era algo irónico, siempre había odiado lo dulce pero ese rubio le encantaba más que cualquier cosa. -Bueno, ¿Qué haremos primero?

-Claro, claro. - Sanji se levantó agitando sus manos y haciendo ruido. - Primero que nada, estoy seguro que no tienes espíritu navideño, así que ponte esto. - Sanji le puso unos cuernos de reno a Zoro. - Perfecto, seguro te ves bien.

-Me veo bien idiota. - Dijo zoro levantando la ceja al ver su lindo adorno.

-No lo creo, además debes tener espíritu navideño mi amor, así que espíritu navideño, chequeado. - Zoro rio, Sanji estaba demasiado feliz. - lo siguiente en la lista es el árbol, me tomé la libertad de intentar ponerlo pero... Como que no pude....- Agachó la cabeza y señaló una pila de ramas verdes mal puestas con algo de tristeza. - Es que no veo...

-Oh mi amor. - Zoro beso la cabeza de Sanji para consolandolo. - Yo lo pongo bebé, no te preocupes.

-Bien. - El rubio sonrió y se dejó querer. - Mientras tanto yo debería desenredar las series de luces oara cuando este listo pero no se donde están... - Empezó a pasar sus manos por el suelo buscando.

-Jajaja ay mi vida... - Zoro le quito las luces a Sanji porque no estaban en el suelo, estaban sobre él, sonrió y se las dio.

-¡Las encontraste! - Celebró cuando ya no las tenía encima y en su lugar estaban en sus manos.

-Eres tan tierno. - Zoro beso los labios de Sanji con dulzura y fue a poner a su pariente para que el rubio fuera feliz.

Zoro colocó el pie de árbol, la base y las ramas, le dio volumen hasta que bueno, parecía un pino de plástico normal; Mientras tanto, Sanji desenredaba las luces en lo que tarareaba villancicos.

El peliverde sonrió al ver a Sanji así, la verdad era que él no creía mucho en esas cosas pero haría todo por ver al rubio feliz, pero lo que más le alegraba era ver como había cambiado tanto su humor con respecto a su vista, aún podía notar el dolor de Sanji por sus ojos, pero no se parecía en nada al rubio de hace tres meses, el rubio que incluso le dijo: "Este año no festejaré navidad, este año no tengo nada de nada... Nada que celebrar". Recordarlo le dolió al espadachín, pero el dolor se fue cuando su rubio le habló sonriendo por su logro de desenredar las luces, Zoro sonrió, el espíritu navideño de Sanji había regresado.

Tras horas de trabajo, mayormente de Zoro, la casa estaba adornada a más no poder, con colores rojos y dorados por doquier, las esferas colgadas, las luces titilando, el árbol y su imponente estrella en la cima, era perfecto.

-¡Seguro es genial! - Dijo el rubio después de escuchar la maravillosa imagen que tenía Zoro. - Gracias.

Zoro respondió a su agradecimiento con un tierno beso sabor a ponche de frutas amargado con sake.

-También te quiero.

Sanji sonrió y tomo a Zoro del cuello de su camisa para tirarlo en el piso junto a él y seguir besándose en el suelo, rodeados del delicioso aroma a ponche, abajo del resplandor de las luces titilantes del pino navideño que observaba a ambos jóvenes desde una esquina a lado de la ventana, puede que Zoro no creyera en Navidad y que Sanji ya casi perdía todo su espíritu, pero eso no pasó porque se tenían el uno al otro, para mantenerse felices, para amarse sin condiciones.

Aaaaaaw quedó horrible el final... Honestamente me dolió lo del árbol y que Sanji no pudo, ya quiero que vaya hacerse la cirujia >:v opino que después de Navidad, si o no banda, quien quiere cooperar para la cirujia del rubio? Orale! Mochense! OK no, ya me voy gente, HASTA LUEGOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

I don't see you... but I love you!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora