Par de Ases /Sirius Black/

Domingo, 3 de Abril de 1977

Solo un día más, ya casi ha pasado el mes que se necesita para ser animagos. Mañana es la siguiente luna llena, Pandora, Rita y yo hemos hecho todo al pie de la letra.

Las últimas dos semanas no salíamos, no hablábamos, tratábamos de pasar desapercibidas, nos habíamos esforzado tanto y estábamos tan cerca de lograrlo que no queríamos arruinarlo. Recuerdo que leía todo a mi paso, me ponía a tejer y a dibujar. Todas las tardes sin falta, saliendo de las clases me regresaba a la habitación, decía que tenía una horrible alergia y que no quería salir, casi siempre evitaba a Sirius y Remus, también tuvimos que cancelar nuestras sesiones de estudio con Regulus, lo cual aprecio, ya que él y yo no nos hablábamos desde la última discusión. Nuestras compañeras de habitación nos preguntaban si estábamos bien, Pandora tuvo que fingir que había tenido un rompimiento horrible con Xenophilius para que también pudiera decir que no quería hablar con nadie.

Éramos como fantasmas pero sabíamos que esto valdría la pena.

Otra cosa, los nervios, ¿en verdad lo lograríamos? Una cosa por la que se conoce que convertirse en animagos no es fácil, son por las complicaciones. Si te equivocas en una cosa, podrías terminar con tu vida, o deforme, hay gente que asegura que puedes terminar siendo un híbrido del animal que te podría tocar, y jamás regresar a lo que eras antes.

¿Qué diría mi madre si se enterara que su hija se convirtió en mitad caballo? Probablemente perdería la cabeza, de la misma manera que yo.

Ahorita el profesor Slughorn nos ha llamado al salón de pociones para poder revisar otra de las pociones más peligrosas según él, la amortentia. Esta vez, el profesor no nos dejaría llevarnos, pero si olerla, y justo este domingo fue que estuvo lista.

Pandora y yo íbamos caminando directo al salón, ella ya sabía que tipo de olores encontraría, pero yo, no sé si oleré algo, porque no creo que me guste nadie en estos momentos.

Al llegar ya había alumnos alrededor de sus calderos, Pandora y yo nos ponemos detrás de nuestro caldero y podemos observar un color dorado dentro, parece ser que está perfecta.

—¡Oigan todos! Ya saben, nada de llevarse a casa, esto no es para jugar, solo para fines de estudios. —Slughorn grita para que todos podamos escuchar, pero yo solo espero a que se distraiga para tomar un poco.

—¿Quieres oler primero? —Pandora me dice y yo niego.

—Tú primero, quiero ver a qué huele Xenophilius. —Comento divertida.

—A ver. —Mi amiga se acerca al caldero y comienza a oler. —Huele a... manzana verde... un poco a pino, tinta y al mar, huele a mar. —Se escucha emocionada al saber que si huele a su novio.

—¿Todo eso oliste? —Ella asiente. —Que chistoso, uno pensaría que Xenophilius olería a pachuli o cannabis.

—No seas mala con él. Además te toca oler, y me tienes que decir. —Puedo ver su sonrisa, sé que se burlará, pero aún así le diré que huela.

—A ver. —Me acerco y cierro los ojos. —Huele a... —Mierda, no sé ni siquiera se que estoy oliendo. —Pasto recién cortado, colonia para hombre, huele a cigarrillos y... espera. —Me acerco de nuevo —Hay uno que no logro distinguirlo, huele a algo mojado, pero no a tierra, huele a... huele a... no lo sé, la verdad es que no sé qué es ese último olor.

—Tal vez sea invernaderos de Hufflepuff. —Pandora sonríe divertida.

—No, no huele a eso, era diferente, era algo silvestre, algo animal, no lo sé, jamás lo he olido.

—¿Estás segura?

—Claro.

—Tal vez sea Sirius, me refiero, ¿cigarrillos? ¿Quién más podría ser? —Lo dice con obviedad, pero los olores eran tan desconocidos que no sé quién es. —O pasto recién cortado, podría ser de Amos.

—No, Amos y yo solo somos amigos y bueno, Sirius... estamos bien. —Le digo tranquila.

Nos quedamos en silencio un rato, bajo mi capa abro un frasco de vidrio muy pequeño. Pandora hace lo mismo, ahora, tenemos que crear una distracción.

Pandora saca su varita y hace que la poción de un chico de Slytherin comience a hervir, disparando burbujas y gotas a todos lados. El profesor Slughorn va corriendo a controlarlo, perfecto, ahora aprovechamos que se ha distraído y las dos llenamos nuestros frascos.

No sabemos porqué lo hacemos, pero no podemos irnos sin llevarnos un poco, es simplemente malvado de Slughorn tentarnos con está poción y no ponerla a prueba, no después de que nos regaló veritaserum y funcionó de maravilla.

Después de eso, volvemos a nuestra habitación y no volvemos a hablar. Ni siquiera nos molestamos en bajar a cenar.

Ya es de madrugada, oficialmente es el 4 de abril, oficialmente es el día donde nos convertiremos en animagos.

En estos momentos no puedo dormir, estoy en el ventanal que da al bosque prohibido y veo la luna, está casi completa, y brilla intensamente alumbrando todo. Delfos llegó a mí hace rato, y ha estado junto a mí toda la noche ¿sabrá que pasa algo?

Estoy acariciándola cuando escucho unas pisadas bajar las escaleras, reconocería esa melena rubia donde fuera.

—¿No puedes dormir? —Yo niego. —También estoy nerviosa.

Pandora toma asiento frente a mí, como cada vez que bajamos a escuchar al lobo. Nos dimos cuenta que solo aulla durante la luna llena, es claro que es un hombre lobo, ese bosque está lleno de misterios y criaturas que jamás hemos visto.

—Creo que después de lograrlo deberíamos dar una vuelta al bosque. —Le digo y a ella le brillan los ojos.

—Primero hay que lograrlo. —Pandora dice. —Aunque si consideras nuestros logros no creo que mañana sea un problema.

—¿Crees que Rita lo logré? No quiero que nos culpen por algo en donde ella se metió cuando nadie la llamó.. —Pregunto y ella se ríe, ambas sabemos que es broma.

—Todas lo lograremos. —Y con eso, las dos nos quedamos viendo la inmensidad del bosque. 

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1/2

Nota: Hello, siento no haber publicado esté miércoles, pero con todo esto de la Navidad y las vacaciones mi madre me tiene haciendo todo tipo de cosas que no he podido concentrarme. 

A lo que me lleva a mi siguiente comunicado, no creo que me sea posible actualizar cada miércoles como habíamos quedado (Al menos por este mes), así que actualizaré cada que pueda, algunas veces serán dos veces por semana o a veces no publicaré en esa semana, espero lo entienda. 

Y sin más, disfruten este mes, que siempre trae cosas buenas.

Ahora las dejo con el siguiente capítulo, espero les guste. 

Atentamente 

Fernanda