•RECUPERAR• ×Rubegetta×

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Vuestras danzas de invocación han funcionado xd

Perdón por no actualizar pero había hecho una apuesta con una amiga que constaba en verme Naruto antes de que acabase el año, hoy mismo he terminado los 720 capítulos y he ganado la apuesta así que disfrutad la lectura uwu

Cuando el resto de héroes recibieron la señal la fase final del plan estaba por comenzar.

Rubius comenzó a caminar por las calles cercanas junto a Mangel tratando de que los aldeanos se separaran lo más posible del ayuntamiento.

Por otro lado el resto de héroes entró en el edificio.

-¿Como ha salido?- preguntó Vegetta.

-Todo bien, la mayoría de guardias están atrapados en el banco, ahí no llega la cobertura así que no podrán pedir ayuda- respondió Alex.

-Perfecto, tampoco quedan guardias por las calles ¿Ha habido alguna baja?- cuestionó el pelinegro.

-Exceptuando a los guardias nadie del pueblo ha muerto- añadió Rubius que no había visto ningún cadáver de ningún aldeano por las calles.

-Lo guardias eran NPCs chiqui, estaban programados para detener a cualquiera que incumpliera las leyes pero al fin y al cabo no son más que robots.

-En ese caso podemos seguir con la fase final- añadió Luzu.

-La fase final ya ha comenzado, Lolito y Mangel están poniendo a los aldeanos fuera de peligro, en cuanto recibamos su señal podemos empezar nosotros.

En ese preciso instante en el que Vegetta dijo eso recibieron la señal y todos se pusieron manos a la obra.

Se encontraban en el último piso del edificio, habían ido acabando con los guardias piso tras piso trabajando juntos. Lolito era el que mejor se lo estaba pasando puesto que hacía mucho que no mataba a una persona, aunque realmente eran NPCs.

Ahora tan solo quedaban los guardias de dentro del despacho de Cerdus Gil. Según las palabras de Alex era el lugar que más guardias tenía de todo el pueblo por lo que no sería fácil.

-Bien ¿Que hacemos Vegetta?- preguntó Fargan.

-¿Ya has olvidado el plan?- cuestionó Willy.

-No es eso, en esta habitación hay muchos guardias, si no entramos con cuidado alguno de nosotros morirá.

Todos se quedaron discutiéndolo en voz baja mientras Vegetta pensaba en algo.

-Creo que lo mejor será que ataquemos por ambos lados- dijo el de ojos morados ante las expectantes miradas de sus compañeros.

-¿A que te refieres?- preguntó Mangel.

-Fargan y Alex entrarán por esta puerta fingiendo que ha habido una emergencia mientras el resto se dirige hacia las ventanas de detrás de su asiento y a las de los lados.

-¿Y como llegamos?- cuestionó Rubius.

-Hay un aire acondicionado que da al exterior ahí mismo, después tan solo tendríais que llegar al tejado.

-¿Como sabes tanto sobre el ayuntamiento si a penas vienes?- cuestionó Alex puesto que se acababa de enterar de la existencia de ese aire acondicionado.

-Muy fácil, yo construí el ayuntamiento.

(...)

Todos estaban en sus puestos y cada uno tenía a dos guardias a los que tenía que matar.

Alex y Fargan entraron y rápidamente todos apuntaron sus armas hacia ellos hasta darse cuenta de quienes eran.
Sin duda si hubiesen entrado todos habrían muerto.

Cuando los guardias bajaron sus armas aún miraban a los dos policías por lo que esa fue la señal para todos.

Dispararon flechas y lanzaron espadas hasta que todos los guardias de la sala estuvieron en el suelo.

Después de eso entraron en la sala viendo la sorprendida y a la vez furiosa mirada de Cerdus Gil.

-¿¡Qué creéis que estáis haciendo!? ¡Esto es traición al alcalde, os condenaré a todos!

-He pasado ya muchas horas en la cárcel anteriormente pero lamento decirte que esta vez serás tú el que las pase- añadió Fargan con gracia, a decir verdad de todos los héroes él era el que había visto más la cárcel y no por ser policía.

Todos rieron con el comentario, Vegetta mantenía su espada de diamante bajo el cuello del alcalde aún dispuesto a dejarle vivir si atendía sus condiciones.

Todos estaban felices puesto que, quitando el hecho de que acabaran de hacer un golpe de estado y tenían al alcalde amenazado de muerte delante suya, habían vuelto a reír todos juntos por los chistes malos de Fargan.

Pero el momento de diversión no duró mucho puesto que Vegetta llegó a ver por el rabillo del ojo a uno de los guardias arrastrándose hacia su arma.

Cuando se dio cuenta ya era demasiado tarde puesto que el arma ya había sido disparada, no le dio tiempo a reaccionar cuando Rubius calló al suelo y la habitación se llenó de un profundo silencio.

Y hasta aquí xd

Como llevo bastante tiempo desaparecida tal vez publique un nuevo capítulo más tarde, mientras tanto os dejaré con la intriga ¿Rubius vivirá? ¿Perderá al bebé? ¿Morirán los dos? Lo sabremos en el próximo capítulo... ¿O no?