One Shots // Spreen X Carrera

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POV/Iván

Jodida alarma de mierda, hacía 20 minutos que sonaba, pero yo no quería despertar, me contuve para no aventarla contra la pared más cercana y hacerla añicos, me encontraba acostado boca abajo con la cara sumida entre la almohada, la levanté para mirar la hora, dando las nueve de la mañana.
Otra vez tarde, hacía un tiempo que no llegaba a buena hora a la Facultad, ni siquiera tenía ganas ya de estudiar, todo se había ido a la basura, desde que corté con él...
Trato de alejarme de esos pensamientos, me rehuso a llorar tan temprano. Me levanto con la pereza más grande y me encamino al baño, después de acabar de ducharme, me visto con lo primero que encuentro, y me pongo mis lentes, bajo a la cocina por algo que tomar, solo encuentro un pedazo de pizza, no sé cuánto tiempo lleva ahí, pero no la tomaré por ningún motivo, no quiero terminar intoxicado en el hospital.

Salgo rápido de mi departamento, para dirigirme a la escuela, voy montando una bici, por el camino encuentro a varios amigos, así que nos vamos juntos hacía la Facultad, al llegar, ingresamos por la entrada charlando de distintas cosas hasta que choco con alguien, haciendo que por la fuerza, la persona caiga de culo, inmediatamente trato de ayudarle a levantarse, cuando por fin ya lo ha hecho, veo que se trata de una chica, la cual ya conozco, es la nueva "novia" de Rodrigo, al parecer me olvidó demasiado rápido.

- Lo siento, Camila, ¿estás bien? - le pregunto en voz alta, parecía encontrarse bien, pero aún así quería confirmarlo.

- Si... Pero fíjate por dónde caminas idiota - dice molesta haciendo una mueca de asco al verme y antes de largarse de ese lugar rápidamente, me mando un suspiro cansado, éste día no paraba de mejorar, pienso con sarcasmo.

Me despido de mis amigos y al tratar de entrar rápido al salón de clases, el profesor  habla.

- Jovén Iván, es la tercera vez en la semana, que se presenta tarde a las clases, la próxima vez que sea así, tendré que poner un reporte - exclamó mi profesor con pena, le respondí que no volvería a pasar, entré suspirando a el aula, había una sola banca desocupada, y era al lado de la persona que menos quería ver, hoy y siempre.
Las filas perfectamente alineadas, seguí mi camino, tomé asiento en completo silencio, sin darle una sola mirada de mi parte, Rodrigo yacía a mi izquierda, me pregunto ¿Por qué no se habrá sentado con Camila?...

En fin, como siempre Rodrigo no tarda en tratar de llamar mi atención, a eso sumándole que donde estábamos situados era en una esquina, casi imperceptible para el profesor y el resto de estudiantes.
- Iván, ¿Me extrañaste? - dice ese enano estúpido, y me contengo para contestar que sí.
- ¿Qué?, claro que no - susurro bajo para que así nadie se de cuenta.
Siento como apoya su mano en mi pierna por debajo de él pupitre, y agradezco por que no se vea nada de éste.
Suspiro cansado, y trato de concentrarme en lo que dice el profesor, hago caso omiso al hecho de que Rodrigo está subiendo y bajando su mano por mi muslo, me causa escalofríos.

- Por favor, para - le digo suavemente, volteando a verlo, por primera vez.
- Necesito concentrarme - le repito, pero sigue sin hacerme caso.

- ¿Ya no te gusta que te toque así? - me pregunta, y casi asiento con la cabeza, claro que me encantaba pero nunca se lo diría.

- No... está mal, ya no seguimos más juntos, sumándole que además tienes novia - le dije en tono amenazante, apretando los dientes, su mano ya tenía propasado el límite.

- Tu cuerpo aún sigue reaccionando a mi -   dice mientras suelta una risa burlona, me mira de manera intensa, esquiva lo que antes le dije de su novia, tan descarado va a ser.

- Deja de tocarme así, estamos en público - respondo casi en un susurro ahogado, estaba tocando mi entrepierna por encima de la ropa.

- Vale, ya entiendo, entonces hagámoslo en privado - dice mientras deja de tocarme y toma mi mano, me jala fuera de ese salón, antes de salir veo cómo el profesor ni siquiera toma atención al hecho que dos alumnos salieron sin permiso del aula.

Rodrigo sigue caminando conmigo detrás siguiéndole, observo que me lleva a los baños, y entro en pánico.
Que carajo me va a hacer, ya le dejé en claro que no estamos juntos, porqué no me deja en paz.

Entramos al baño, veo cómo Rodrigo cierra la puerta con seguro, ¿Acaso me va a violar?, empiezo a sudar.

Avanza hacia mí, y yo retrocedo aún con miedo, hasta que choco con la pared, maldita sea.
- Hola amor, que gusto volver a verte - me dice dulcemente, a lo que yo solo entrecierro los ojos, observando cada movimiento, necesito escapar de aquí, o volveré a caer, nuevamente.
- Ya no soy más tu "amor", tienes novia Rodrigo - digo mientras veo cómo se aproxima a el lavabo de manos, se impulsa con sus brazos y se sienta sobre éste, con sus pies colgando, y me parece tan tierno.

- Ven aquí bebé - vuelve a ignorar lo que le dije hace un momento, me acerco a pasos pequeños dudando en sí hacerlo o no, llego hasta él, quedando de frente, me mira y suspira, enreda sus piernas alrededor de mis caderas y me tira hacia el.

- Te extrañé - dice mientras posa su cabeza sobre mi hombro, posando sus manos alrededor de mi cuello y yo no puedo estar más confuso.

- Yo también - digo con ligero sonrojo, lo abrazo lentamente, notando por el reflejo del espejo, lo lindos que nos vemos juntos.

- Por favor, vuelve conmigo, sabes que lo de Camila no es serio, solo estoy con ella para que mis padres piensen que soy "hetero" -me reveló, siempre pensé que había dejado de amarme, o quizá si lo hizo.

- Siento que esto no volvería a funcio - me calla, por fin me ha callado, me ha robado un beso, después son dos y luego tres, y como siempre hago, le beso de igual manera, soy egoísta y por eso no quiero verla con ella, ni con nadie más.

- Ella está en el lugar donde yo debería estar - le digo después de separarme de sus labios lentamente para poder tomar oxígeno de vuelta a mis pulmones.

- Ella nunca tuvo un lugar - y no puedo evitar sonreír inmediatamente después de escuchar eso, lo vuelvo a besar, tal vez podamos solucionarlo.
Extrañaba estar a su lado, vernos en los pasillos, disimulando a la vista de todos, el se llevaba todo mi dolor, al salir el estaba en la puerta, esperándome, me tenía mareado, sabía lo que provocaba en mí.
No puedo pensar claramente, siempre seguiré siendo un tonto por su amor, siempre será el único a quién quiera de por vida.

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JAJAJA muy bobo el springles, no Iván sal de ahí, aún tienes tiempo xdd