Especial de Navidad: Ultra Magnus.

Parte Única

Patrullo desde muy temprano, esperando encontrar a su hermano. Ultra Magnus siempre fue reservado con sus comunicaciones y el resentimiento que le tenía, no mermó lo suficiente como para compartirle su ubicación, ni señal.

Semejante a un fantasma, aparecía sin previo aviso y se marchaba de la misma forma.

Optimus entendía su preferencia a permanecer en la sombra, pero por años esa sombra y la competencia los alejó. Ya no quería continuar respetando su lejanía.

Además, era Navidad. Esa fecha donde las peleas se perdonan y se olvidan en clamores festivos del más puro gozo.

Llevaba bastantes ciclos en la tierra, aprendió de las tradiciones humanas y las vivía con el mismo fulgor. Side Burn era un adepto bastante fiel a las celebraciones que incluyeran fiestas, Prowl, y X-Brawn no permanecía indiferentes, los Spy Changers disfrutaban de acabarse todo el energon en competencias y los constructores aprovechaban para demostrar sus talentos de entretenimiento. Todos disfrutaban de la convivencia...

Siendo una constituida costumbre desde su llegada, ese año decidieron continuar con la festividad, incluyendo un acento de bienvenida por cada autobot recién llegado.

Cada autobot incluye a Ultra Magnus, su hermano.

Si tan sólo tuviera forma de localizarle que no incluyera un ataque enemigo...

Optimus suspiro, mientras doblaba la esquina del centro de la ciudad. Perdió la cuenta de cuánto llevaba recorriendo la zona...

Tampoco iba a darse por vencido.

Deseaba tenerlo ahí y de ser posible, hablar correctamente, sin el armamento de sus armas disparándole.

Desde hace mucho tiempo no lo veía, creyó que jamás iba a volver a verlo cuando abandonó Cybertron...ahora que estaban en el mismo planeta, quería arreglar la situación con él.

-Ultra Magnus ¿Dónde estás?

***

Lo supuso, que está era la única manera de encontrarlo, sólo cuando el enemigo atenta contra alguna planta de energía.

Había sido una batalla feroz, de la cual, salieron victoriosos. Los decepticons huyeron y una vez separados de su modo omega prime, Optimus se apresuró a detener a Magnus, sujetando su placa de hombro.

-Espera Magnus. Hoy no te vayas.

Ultra Magnus miró el servo de Optimus establecido en su placa de hombro, y como si fuera un mosquito molesto, quitó bruscamente el intento de conexión de Prime, de un manotazo.

-¡No sigo tus órdenes Prime!, sólo porque de de vez en cuando te ayudó, no significa que voy a seguir tus órdenes.

¿Por qué todo lo que decía era tomado como una orden por su hermano?

Tan difícil.

-Magnus, no es eso lo que estoy diciendo.

-No lo estás diciendo tú, lo estoy diciendo yo.

Optimus se sorprendió por un momento. Estaba seguro, que desde su reencuentro, las mareas del coraje habían cedido con el tiempo y la cooperación mutua en batallas calmó las aguas, a un nivel donde su hermano podía soportarle...Pero hoy se encontró con un muro, se atreve a decir que el mismo de ese día del reencuentro, pero en vez de estar en la ofensiva y atacarlo , Magnus se hallaba resguardado en este...A la defensiva.

-Mi trabajo terminó.-Declaró Magnus, dándole la espalda y activando sus propulsores.

-Espera Magnus, no he terminado de hablar.

-Pero yo sí.-

En otra ocasión, se resignaría a despedirse; esta vez, no, por eso, lo sujeto de un ala.

-Estas siendo molesto - advirtió Magnus, poniendo en espera los propulsores, y volteando su yelmo.

-Estamos organizando una fiesta por Navidad, cada autobot estará ahí. Y quiero que tú también asistas. -explicó Prime rápidamente -el año de este planeta está terminando, y nos has ayudado en este conflicto. Mereces estar con nosotros.

-¿Una fiesta? -

¿Podría estar considerándolo? Pensó Optimus esperanzado.

-No tengo tiempo para eso. -rechazo Magnus, regresando su yelmo al frente.

Optimus suspiro, retirando su servo del ala de Magnus.

-Considéralo detenidamente, y si cambias de parecer, conoces nuestra línea de comunicación.

A veces Optimus, sentía una pequeña espina de culpa. La relación competitiva de su vida laboral, destruyó cualquier relación familiar que pudieran haber tenido, aún ahora, por muy cerca que pudieran estar, la lejanía nunca era reducida. Cuando se dio cuenta, era muy tarde para tener el descaro de intentar arreglarlo...

-Si es todo...

-Espera, Magnus. Acepta esto.

Con curiosidad, Magnus gira su cuerpo a Optimus, quien busca en su ciberespacio.

-Iba a dártelo hoy, en la fiesta, pero considerando que puedes no aparecer, te lo doy ahora.

Optimus sujeta una caja mediana y alargada en sus servos, decorada con árboles navideños, y un agradable sujeto sonriente (según las primeras observaciones de Magnus) .

-Es tu primer año aquí en la tierra así que...-Optimus extiende hacia Magnus la caja, y con un tono cálido y una sonrisa, dice:

-Feliz Navidad, Ultra Magnus.

Los ópticos de Magnus escudriñan el objeto que Prime sostiene hacia él.

-Es...- su expresión se suaviza...-La matriz?

"Incluso ahora, lo que pertenece al espacio laboral interviene"

Frustrante.

-Magnus eso no es posible y lo sabes

Su curiosidad termina con las palabras de Optimus. Magnus regresa sus ópticos al frente.

-Entonces no lo quiero.

-Mag...

-No sé que pretendes Prime, pero no creas que he desistido, algún día tendré la matriz.

Sin más que agregar y evitando cualquier respuesta de Optimus, Ultra Magnus enciende sus propulsores y se marcha rápidamente del lugar.

El regalo queda en los servos de Prime, quien suspira una vez más, mientras lo observa desaparecer en la distancia.

-Hasta la próxima...hermano. 

*

*

*

Cuenta la leyenda, que un día le preguntaron a un escritor famoso, que si había una tragedia peor que el desamor, este contestó con sinceridad y melancolía: "Una tragedia de hermanos, no hay nada peor que ver a dos personas que debería quererse y respetarse; odiarse por cosas tontas" William Shakespeare...(Comentario de Lagoonuniverse)