Ella es una contradicción. Se esconde detrás de sus capuchas y cabello, pero luego va sobre cómo a ella no le importa lo que piensen los demás. Quiere que desaparezca, pero llamaría la atención sobre sí misma para defenderme. Hace como que no importa la marca, pone los ojos cuando ellas hacen cita con otro doctor, pero en realidad la esperanza se enciende en sus ojos.
Ella deja caer el libro en su regazo. Las dos estamos yaciendo sobre la espalda, con las rodillas flexionadas.-Lo mismo de siempre. No sé por qué mamá siempre me arrastra a las citas.
Sus palabras provocan visiones del gimnasio. De Samuel. Lo empujo a un lado, porque no quiero pensar en él. No acerca de cómo se sintió cuando me rescató. Estoy yendo al gimnasio por mí y eso no tiene nada que ver con que el señor No me presento.
Pero mi trabajo fuera y sus citas con el médico son un poco lo mismo, ¿no es así? Ambas estamos tratando de cambiar las cosas que parecen definirnos. Conozco la verdadera respuesta a mi pregunta y sé lo que ella va a decir, pero de todos modos le pregunto:-¿No quieres ir entonces? ¿Sólo para ver?
Emily suspira.
-¿Por qué? ¿Así puedo encajar con gente como Billy Mason? Son idiotas y van a seguir buscando una razón para poner a la gente un paso por debajo de ellos.
Inmediatamente me siento tonta, porque la razón principal por la que estoy haciendo lo que estoy haciendo es gracias a personas como él. Porque quiero demostrarles que soy más de lo que creen que soy.
-Sí, pero tendrías que admitir que sería bueno impresionarlos, ¿sabes? Mostrarles que somos tan buenas como ellos. -Mostrar a mi mamá que yo no soy una mentirosa y que yo soy tan buena como ella lo es también.
Emily se da la vuelta para mirarme.
-Pero no lo hará. La gente en general son unos idiotas. Es por eso que no me gusta nadie excepto tú y mi mamá. Hay ciertas personas que siempre serán los que te pisen y los que siempre van a ser a los que pisen. Esa es la forma en que funciona el mundo, asqueroso, pero cierto.
No me la creo. No puedo. ¿Cuál es el punto de todo esto, si eso fuera cierto? ¿Pero qué si sólo estoy mintiéndome a mí misma y realmente lo creo? Yo pensaba como ella la primera vez que vi a Samuel. Resulté estar en lo cierto acerca de él también. Hay una parte de mí que lucha para compartir sus creencias.
-Yo no sé nada de eso.
-Y es por eso que encajamos tan bien. Por qué siempre vamos a ser las mejores amigas. Tú eres la blanda, mientras yo soy la perra pura y dura. ¿Ves? Perfecto.Y entonces ella se sienta y me golpea con una almohada.
-Uf, eres una perra.
Ruedo hacia el suelo, agarro una almohada y la golpeó con ella en represalia. Antes de darme cuenta, nos estamos riendo como locas y golpeándonos la una a la otra con mis almohadas. De alguna manera Emily me ayuda a olvidar lo de mamá y Samuel.
-Vas a caer.
Tomo un giro hacia ella, pero cuando lo hago, ella rasga la almohada de mi mano y empieza a martillearme con ella. Me caigo de la cama
-¡Eres tramposa! Me rindo. -Emily cae a mi lado otra vez, riendo, libre de una manera en que no lo está muy a menudo. Me da pena por ella.
-Yo siempre gano, __(tn). Recuérdalo -ella se señala a sí misma-, perra pura y dura. -Niego con la cabeza, sus palabras nadando dentro de mis oídos.
-Eso apesta... La gente, quiero decir.
-Lo sé, pero al menos me tienes. -Emily se ríe, me hace reír.
-Tienes razón. ¿Quién necesita a esos idiotas?Y se lo voy a demostrar a Samuel. Se lo voy a demostrar en el gimnasio como si nada. Tal vez voy a fingir que no me presente también. ¿Y mamá? Mi pecho se aprieta. No importa qué, yo siempre querré que me quiera. Nunca dejaré de luchar por eso.
Justo entonces, mi celular vibra con un texto. Yo la saco y miro.-Mamá está en casa. Vamos. Baja a cenar. -Después de lo que pasó esta mañana, necesito el apoyo de Emily. Sólo espero y rezo que ella no diga nada acerca de mi corto trote esta mañana.
-No puedo creer que tu mamá te envíe textos desde abajo para la cena. -Emily se desliza su capucha mientras estamos saliendo de mi habitación-. Lo que es peor, no puedo creer que me hagas comer con ella.
-¿Para qué son las mejores amigas? -La choco con la cadera mientras bajamos las escaleras. Papá está sentado en su lugar, en pantalones y camiseta, mientras mamá se ve como si estuviera en una cena de negocios. Ya sabes, la típica noche en torno a la familia Conway.
-Hey, chica. No sabía que estabas aquí. -Papá le da a Emily su sonrisa contagiosa y se la devuelve. Él es en realidad otra persona que puedo añadir a su lista de personas en las que confía, aunque no estoy segura de que ella lo admitiría para mí.Mamá, por otro lado, pinta esa sonrisa falsa en su rostro. No es como si ella la reservara para Emily específicamente. La consigo todo el tiempo también. Un montón de gente porque ella nunca causaría una escena por nada. Siempre sonriendo.
-Emily. Yo no sabía que ibas a unirte a nosotros.
-Sí. -Antes que nada puede salir mal, prefiero hablar yo.
-Vamos a ir a conseguir tu plato, Emily.Unos minutos más tarde estamos de nuevo en el comedor con sus utensilios. Sentados en la mesa están una lasaña, ensalada y palitos de pan. No casero claro está. Papá probablemente lo recogió en su camino a casa, pero cocinado en la cocina o un restaurante, estoy segura de que esto no está en mi plan de comidas. Por lo menos no mucho de ello.
Me encanta la italiana. Es mi favorita.
Papá toma una porción de comida, y me la pasa a mí. Se ve muy bien. Huele muy bien, la albahaca hace un dulce cosquilleo en mi nariz, y quiero complacerme, pero no lo hago. Me corté un pequeño cuadrado de queso de los dioses. Tal vez 3 cm. por 3 cm. No he llevado la cuenta de mis calorías como debería, en parte porque me he pasado toda la semana saboteándome a mí misma.
Pero Samuel también habló sobre el control de porciones. No negándomelas, pero se limitándome. Algo de esto no es una dieta, sino un cambio de estilo de vida. Este pequeño cuadrado es probablemente igual o inferior a lo que mamá come, así que ¿por qué me siento culpable?-¿Estás bien ahí? -Emily me despierta de mi análisis de lasaña.
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ENTRENADOR PERSONAL; Vegetta777 -ADAPTACIÓN-
Fanfiction____, de veinte años, está cansada de que el Instituto Elite Hillcrest le haga la vida imposible porque no es una talla dos. Este verano, ella contratara a un entrenador personal para ayudarle a perder peso. ____ no esperaba que su entrenador fuera...